Las ventanas, cedían ante el ventarrón, azotando contra las paredes. Era una noche lluviosa,
adentro en la habitación se iluminaba por completo; cada vez que, un rayo serpenteaba en el firmamento, para volver a quedar completamente a oscuras. Este invierno si que era copioso; era como si fuera el mismo diluvio bíblico. Sin pensarlo, se acerco casi desnuda a asegurar la ventana, el frió, corrió por su espina dorsal hasta llegar a los dedos de sus pies, por un instante quedo helada frente a la ventana, sosteniendo las dos hojas de las puertas, a la vez se sujetaba, pues el aire era fortísimo, su mirada se perdió entre las calles que convergían en su casa. Nuevamente, brillo el cielo, iluminando todo a su alrededor, ella quedo por un instante fotográfico tal cual radiografía, se alcanzaron a ver los huesos de su cráneo y u cuerpo; nuevamente volvió el manto oscuro y ella regreso a ser una linda rubia, que para entonces ya sus ropas sexys que utilizaba para dormir, casi habían sido arrancadas de su cuerpo, cosa que a ella no le importó. Justo en el momento en que se ilumino el vecindario con el último rayo, ella pudo ver el cuerpo de un animal peludo y de color negro, que esta precisamente parado frente a su jardín, y que ahora no se puede ver. Ella, desde el segundo piso de su hermosa casa seguía inmóvil, como si fuera una figura de mármol tallada por uno de los mas grandes artistas del renacimiento, con curvas perfectas, su cabellera flotaba en el aire impidiéndole volver a su estado natural, su cuerpo estaba ya casi en su totalidad mojado, nunca pensó que ese viento frió y fuerte, que golpeaba sobre su humanidad podría causarle una enfermedad bronquial, que la podía dejar en cama con tremendas fiebres y problemas respiratorios, era mas importante en ese momento, aquel impulso que la había llevado a pararse frente a esa ventana. Y, ahora que su curiosidad había aumentado por la visión de aquella bestia de un pelaje negro azabache, no le permitían moverse, esperando que el próximo rayo en el horizonte le encendiera el vecindario para volver a ver a aquella imagen que seguía grabada en su retina y con ello, asegurarse que no había sido una imagen provocada por su imaginación. Tremendo brinco dio cuando se escucho el corto circuito producido en los cielos e iluminando nuevamente el vecindario, sus ojos estaban clavados justo en el lugar, donde hacia unos minutos vio a esa criatura que por sus dimensiones no era un perro, y mucho menos iba a estar parado retadoramente frente a ella bajo tremenda tempestad. Que seguramente tendría a su hermanito, metido entre las chamarras de sus padres. Se hizo nuevamente la luz, apareció como si el cielo con su manto negro se hubiera abierto de par en par, para dar paso a los rayos del sol, que utilizaban a la luna como espejo para ser reflejados en toda la ciudad.
Si! Allí esta en posición firme, amenazadora e inmóvil, como si fuera él parte de aquella épica tempestad o, como si fuera él, el que provocaba que lloviera de esa forma tan brutal y salvaje. En ese preciso momento, recorrió en ella ya no aquel frió provocado por la tormenta, ahora ella recibió una descarga de aquel miedo, que solo puede sentir, alguien que esta condenado a muerte y escucha la palabras: -preparen, apunten fue...! Se ilumino nuevamente el vecindario pero la criatura ya no esta en el sitio donde lo había visto hace cinco minutos completamente inmóvil, erguido y con la vista clavada en ella. El impulso que tuvo fue el de cerrar las cortinas que colgaban de las puertas ya aseguradas y corrió hacia su cama, metiéndose entre sus sabanas, dejando tiradas en el suelo, a aquellos diminutas y sexys prendas, quedando completamente desnuda, entre la cómoda cama, que la acompañaba desde niña; la calma que le había acompañado hace unos minutos la había abandonado; se había ido, como presintiendo algo terrible que pronto acaeciera. Su corazón brincaba de tal manera que en su pecho, que por unos instantes ella vio a sus senos separados por una mancha roja, color y olor de sangre; cerro sus ojos pero estos le dieron mas intranquilidad al darse cuenta que aun con los ojos bien cerrados podía ver a través de ellos. Asustada, tiro sus sabanas que siempre le habían protegido de sus pesadillas de niña y un grito desgarrador se escapó de sus labios delgados y sensuales, lamentablemente en ese preciso momento al haber emitido aquel grito que hubiera sido causal de que sus padres y vecinos se hubieran echo presentes. En ese preciso instante, el vecindario se estremeció con un rugido, salido del mismo infierno, se trataba de otro rayo pero esta vez el sonido fue tan estruendoso y prolongado que cuando el cuarto se iluminó, el perfil de la bestia, se apoderó del ambiente cálido de aquel que había sido su habitación; parecía que este monstruo estaba entrando por la ventana. Ventana que se abrió de golpe nuevamente, pero esta vez arrojando al fondo de la habitación el cerrojo. El vaivén de las hojas que protegían su ventana, comenzaron y pasaron a ser la melodía perfecta, de aquellas películas de terror que, te anuncian que el final esta cerca. Despues de unos segundos, ella totalmente desnuda y postrada en su cama, tomo un aliento de valor, pensando: -esto debe ser una pesadilla y se levanto lentamente de su cama y se dirigió nuevamente hacia la ventana, la silueta de su cuerpo desnudo se vio caminar lentamente hacia la ventana. La tempestad, había menguado, el aire había decaído en su intensidad, parecía que, la calma volvía a aquel vecindario, las hojas de las puertas de la ventana se movían pero sin revotar contra la pared; su cabello dejo de volar volviendo a su estado natural; el cielo parpadeaba eventualmente pero ya sin escucharse aquellas estruendosas descargas eléctricas. Asomo su hermoso rostro a la ventana todo parecía haber vuelto a la calma, tomo valor y se asomo por completo por el ventanal, a cada luzazo celestial, se iluminaba el vecindario dándole a ella la paz y tranquilidad en su corazón pues, no se veía a ninguna criatura de largos pelos mojados, de mirada incendiada, de tamaño colosal, de un respirar como de aquellos toros dispuestos a embestir, con colmillos que hacían ver a aquel hocico tenebroso y de lengua bífida que limpiaba sus labios, de los cuales caían agua de lluvia quedando completamente secos cada vez que su lengua se frotaba y recorría todo su hocico. Tomo tanto valor que dejo expuesto parte de su torso fuera de su casa, para estar segura de que aquel horrible monstruo no estaba y que solo había sido una mala y desafortunada mezcla entre una pesadilla y la realidad como si por un instante se hubiera vuelto sonámbula. Introdujo su bello dorso, que por un momento sus senos de regular talla habían quedado colgando de su pecho y sus pezones rosados e hinchados por el frió apuntaban para ambos lados, su cabellera la cual había colocado tras sus orejas para poder ver mejor habían vuelto a su lugar. Todo volvía a la calma, tomo las hojas y las acomodo junto a las rasgadas cortinas, para luego cerrar las puertas. Se voltio despacio, para dirigirse nuevamente a su cama, en ese preciso instante, solo le dio tiempo a ver una inmensa masa de pelos,que con dientes afilados y ojos color fuego se abalanzaron hacia ella. Y, en todo el vecindario, se dejo escuchar un grito que rompía los tímpanos, acompañados de un aullido que estremeció a varios, a varias cuadras a la redonda; para ese instante en el cielo brillaba una enorme y redonda luna llena, la cual no se había apreciado por el manto negro y la tempestad que hacia unos pocos minutos había sido el principal actor de aquella noche; para dar paso a un bello cielo, iluminado con centelleantes estrellas en el firmamento.
Los padres de la adolescente despertaron y la madre llevó al niño a su cuarto. Cuando la madre retornaba a su habitación, vio a tremendo perro, pelo negro y abundante, con ojos de fuego y dientes afilados goteando sangre de sus fauces pasar por el pasillo....
-No?... seguro es mi imaginacion!!! Expreso la señora y se acostó junto a su marido.
SergioRaga 28.01.14
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