lunes, 31 de agosto de 2015

Ya no quiero ser un corazón solitario


Ahora que me encuentro solo, 
pienso: ¡No quiero seguir solo!
pero te busco y no te encuentro,
¿dónde estás, adonde has ido?
Nada me importa, ¡solo nunca más!

Pero te busco y no te encuentro,
suplico al Señor alguna señal
que me conduzca hasta ti,
que me permita encontrarte
que te haga regresar a mi vida,
es solo que, no quiero seguir solo,
lastimo a mi corazón.

El único que se opuso a que te fueras,
deseo pronto encontrarte.
Amarte, besarte, que te sientas cómoda,
que sientas el verdadero amor,
ese que en mi ha nacido por verme solo.

Vuelve, regresa, 
te esperamos mi corazón y yo,
no quiero seguir más tiempo solo,
me dirás: ¡Puedes dejar de ser un solitario
con quien nos separó, estarás bien!
Confieso que al inicio estuvo bien,
pero si no hay amor 
nada puede seguir asi de bien.

Tarde lo comprendí 
debí haber escuchado a mi corazón,
el único que se opuso a que te fueras de mi lado
y por eso solo estoy, ¡solo quedé!
Y no quiero seguir solo.
¡Ya no más!

Regresa, dame una señal, 
¿dónde estás?
para ir a convencerte, 
pedir que me perdones,
demostrarte el amor 
que en mi nació y creció,
al confirmar que no quiero estar solo, 
¡nunca más!

Mi corazón me lo reclama 
y lo siento sufrir,
debes de saber que para él 
no hubo nadie más 
a quien amar;
cerró las puertas 
y a nade dejo entrar.

Adentro de él 
todo sigue igual
como lo dejaste,
amor dulce, amor todo entero 
solo para ti.

Dime: ¿dónde te encuentro?
y salgo a tu encuentro,
es que no quiero estar 
un día más en solitario 
sufriendo, ¡viviendo por vivir!

Quiero dejar de ser un corazón solitario
corazón sin amor, 
¡aléjate de mi desamor!
Una pequeña señal 
y dejaré de estar solo.

Solo dí: ¿dónde te escondes?
Y por ti, a tu encuentro salgo,
y mi corazón y yo, 
dejaremos por fin de ser solitarios.


Llegará el día en que se comerán unos a otros


Hace unos días me tocó que atravesar a la Central de Abastos, iba en mi vehículo, en busca de un producto para una de mis tiendas, ya me había entrado la tarde y por lo que ahí vi me tocó que pasar muy despacio, iba tan despacio, que mejor decidí detener mi auto y me baje de él para comprobar si lo que mis ojos veían era lo que realmente yo creí que pasaba ahí. Así que paquee mi auto y como quien no quiere nada caminé, pero por poco y caigo al suelo, sí, mis zapatos brillantes estaban embadurnados de lo que fue un tomate, el que casi me hace ir derechito al sucio suelo; me incorporé de inmediato para no hacer el ridículo, ni evidenciar mi presencia en el lugar, aunque los que se encontraban ahí cerrando sus negocios estaban tan ocupados que ni se percataron de mi presencia; ni de mi labor detectivesca que me había echado a la espalda, más por curiosidad, que por otra cosa. 
Mientras caminaba, esquivaba: Tomates, melones, aguacates, y demás verduras, claro tambien algunas frutas, etc. mientras toreaba con ellas, desde mi altura: uno con setenta y cinco, bueno menos pues, ni que mis ojos los tuviera en la mollera, (¡jejeje!) veía que lo que estaba en el suelo, las verduras y frutos, estaban en excelentes condiciones, seguramente residuos de lo que no se había vendido ese día, pero todo, al menos los que no se dañaron al caer estaban utilizables, comestibles. Por fin llegué a uno de los recipientes de la basura municipal y de mis ojos extraje mis lentes oscuros y los coloqué sobre mi cabeza y como todo un gran detective, hacia a dentro del recipiente municipal vi y claro, entre la basura natural del lugar, pude evidenciar que habían suficientes verduras, frutas y otros alimentos, más los que ya dije; que ese día ya no se vendieron, pero estaban todavía: "frescos"  
Al darme cuenta de la realidad diaria en ese lugar, y seguro, en los mercados cantonales tambien, el darme cuenta que los locatarios de ahí botaban en la calle lo que no lograron vender ese día para que los barrenderos municipales pasaran recogiendo esa "basura" mientras otros, la llevaban personalmente a los depósitos municipales de basura. 
Entristecí, claro que se mezclaron varios sentimientos; tristeza, cólera, impotencia; me sentí una golondrina solitaria en la Central de Abastos.

Cuando a mi carro volví, antes de entrar en él, eché un ultimo vistazo y lo que vi, fue lo mismo que al inicio, cuando aquí llegué, recordé las palabras de mi madre, hace mucho años atrás cuando todavía yo era un niño: "Llegará el día en que unos se comerán a otros"; sonreí pues, en ese instante mi cabecita de niño me trajo a la mente imágenes de personas comiéndose a otras, en otras palabras: Canibalismo. 

Pero hoy, muchos años después y con la madurez entre mis sien, sonreí con un dejo de desilusión y me repetí: ¡A ésto se refería mi madre!... ¡Somos tan inhumanos, tan insensibles! y lo digo, por los gobiernos y sus asesores y, tambien por éstos que trabajan acá, parte de la pobreza, de las mayorías en un país, ellos, prefieren tirar lo que no han vendido a regalarlo a personas o entidades, para que éstos utilicen esos alimentos con los menos privilegiados, esos que duermen en las calles y que una mañana amanecen muertos de frió o de hambre o por ambos. 

Mientras conducía de regreso a mi casa, pues a donde iba ya era tarde y seguro abrían cerrado, pensé; ¿porqué los gobiernos central o municipal no hace un acuerdo con éstos locatarios?, indicándoles en el trato, que ellos, los gobernantes les comprarán al costo o mitad del costo lo que en el día no logren vender o, simplemente colocar en lugares especiales recolectores especiales tal cual los que ponen para el reciclaje, para que los vendedores y trabajadores municipales u otras entidades recopilen lo que para ellos ya es considerado basura, pues para el día siguiente eso estará: "Chuco" dañado, pasado, agusanado, pero que en el momento y debidamente refrigerado o por otros procesos podrían palear el hambre de quien no le interesa que esos eran residuos, si al fin y al cabo eso pasa con todos, lo digo pues, por los alimentos considerados de primera, mejor serán alimento de exportación y para el consumo de los ciudadanos de economía media, media baja y baja nos venden en los supermercados lo que no se pudo exportar, y si queremos algo que se exportó de nuestras fronteras y han regresado, se les considera importados, por tanto son mucho más caros. 

Si lo analizamos, es lo mismo que dije antes, con ello, muchos niños, madres solteras y padres desempleados podrían sobrevivir y no morir de hambre. Pero ¡no! mejor arrojar a la basura y que los más pobres y desamparados se mueran de hambre. 
Casi estoy seguro que si me acerco a alguno de los locatarios y les digo: ¿ésto lo tirarás? Me contestaría que sí y si le digo: ¿Me lo regalas para alimentar a gente pobre? seguro me hubieran dicho: ¡Te los vendo, yo soy pobre y voy a perder dinero si no los vendo!... ¡Pero si de todas maneras los vas a tirar!... ¡No, si me los compras! 

Bueno, así es la gente en cualquier lugar, "solo ven el derecho de su nariz" (otro refrán de mi madre). 
Ojalá y ésto llegara a oídos de algún político y lo pusiera en practica; aunque seguro diría: ¡Eso ya lo tenemos contemplado en nuestros planes de gobierno! Y al rato, esa "comida basura" la terminarían vendiendo o serían suministros de hospitales.
Bueno, ésto es solo un pensamiento que seguro Dios puso en mi, para compartirlo con quienes disfrutan de mis artículos. 
Pido perdón al Creador, por ser uno más de los que solo observa y no hace nada, seguro yo soy, otro más de los caníbales que mi mente me mostró de niño. 

"Comerse unos a los otros": No es algo que deba verse literalmente, es algo como ésto: Me aprovecho de mi prójimo... Si lo puedo joder lo jodo... Si le puedo meter el huevo se lo meto (perdón, pero éstos son los que mejor se entienden)... Yo le cobro más caro y así me hago luego rico, etc."  

domingo, 30 de agosto de 2015

En la carretera


Mientras conduzco rumbo a tu casa te estoy pensando, pienso que ella me espera y en los vidrios del auto su rostro reflejado veo, besando con ansias mi boca, sigo apretando el pedal, veo como los postes pasan muy rápido, mejor frenaré, si no nunca llegaré los accidentes están a la vuelta de la esquina, si lo sabré. 
Veo en el retrovisor y nada, sigo en la carretera solo, vuelvo a ver y te veo en él; tus ojos negros muy bien abiertos, vista lujuriosa esperándome, tus cejas alzadas como invitándome y por ratos, arrugas el seño como impaciente. ¡Espérame que ya voy a cien! 
Oigo que por algún lado una sirena gritando con prisa va, eso me hace reflexionar y ver el aspirómetro, ¡ahora estoy arriba de cien!, recapacito, ¡mejor frené! 
¡Que lata ha empezado a llover! es una llovizna, pero éstas son más peligrosas, hacen un pavimento más resbaladizo, ¡que mala suerte! y yo con ganas de estar con ella. 
Adelante un cruce de tren, las luces rojas están titilando, deberé detenerme mientras el tren frente a mi pasa y pasa, ¡que largo que es!, tú te reflejas en mi windshield, te veo al frente saludándome alegremente pues, la espera ha sido larga, cuanto deseo estar ahí, sigo con tu imagen muy distraído mientras pasa el largo tren. 
Una bocina me regresa a la realidad, miro el retrovisor y una larga cola la que he provocado, limpio la humedad de mi windshield, ellos que esperen aunque sus bocinas me desesperen, del tren ni una sola pizca de humo hará ratos que por fin se fue. Sigo mi camino, y a mi lado pasan los que desesperan, me ven con mala cara y yo me pregunto: ¿cuanto tiempo les habré robado? algunos son amables, otros son mal humorados, otros más bien malcriados pues, me han recordado a mi dulce madre. 
Yo sigo en la carretera voy por ti espérame, los cuenta kilómetros me dicen la distancia que nos separan, yo sigo pensando en ti, aún sigo en la carretera, veo que ha empezado a anochecer y prendo los faros para  mejor ver, pues lo que me espera son bajadas y muchas curvas, siento que nunca llego a ti, éste viaje se me ha hecho muy largo; prendo la radio y en ella suena nuestra canción, melodías del Bee Gees, románticas canciones, invitación a amarte, ellos me recuerdan; ¡cuan profundo es mi amor por ti!; le subo el volumen para con la musica pensarte. 
Me asomo al mirador y pienso; que estoy más cerca, no desesperes pronto a tu lado llegaré y me suena el celular, sé que no debo contestar pero tal vez es ella, lo busco y saco de mi jeans azul bastante rasgado, estoy a la moda. Veo la pantalla y ésta me confirma que es ella, mi auto derrapa, creo que me salí de la cinta asfáltica por pocos segundos; las estadísticas nunca mienten, ¡aló! ¡hola amor ya deje atrás el mirador!, ¡date prisa que te espero y desespero!, ¡si mi amor, en breve creo que llegaré! 
Cuelgo y guardo el celular, no me distraeré más, no quiero ser una estadística más. Por fin entro en la ciudad, en el tablero una luz me alerta que pronto quedaré sin combustible, yo pienso; ¡lo que tengo aun me alcanza!, 
Las luces de los anuncios me indican que mi larga espera por fin termina y que su casa esta ahí adelante, aprieto el pedal, pero una luz amarilla me advierte que deberé de parar, vaya contratiempo, no contaba con ésto, la luz es roja y me advierte que pare y me detengo mientras limpio mis lentes y en sus vidrios te veo sonriendo, pienso ya pronto estaré contigo mi amor bello, besaré tus labios, tu me abrazaras, después de varios minutos disfrutando del beso, me tomaras de la mano y hacia adentro seguro me llevarás, al cerrar la puerta me amaras; ¡eso lo sé, como tambien lo deseé! 
Una vez más me distraigo, pero los claxon me regresan a mi realidad, me avisan que la luz roja ya se fue, que ahora es verde, que debo acelerar y sobre la carretera muy mojada me pierdo entre sus calles y avenidas, estoy tan cerca lo sé, mi corazón me lo anuncia con su fuerte palpitar, ahora mi estomago hace su fiesta, ese agradable cosquilleo es de emoción, solo esta calle y por fin habré llegado.
¡Mira ahí esta su casa, ella en la puerta con alguien me espera! ¡ya no desesperes aquí estoy, mejor despídete, no quiero testigos para cuanto te besaré. Parqueo mi coche, reviso los vidrios podría ser victima de la violencia; bajo de mi coche y escucho que mi alarma se activó; mi coche seguro estará esta noche.
¿A donde vas? si por fin llegué; ella no me vé y me atraviesa, ¿qué es lo que sucede, estaré dormido en alguna curva? se van en ese coche, ella parece que va llorando, ¿no entiendo porqué no me ve? y ¿cómo hizo para a través de mi cuerpo pasar? ¡sin que lo sepa la seguiré! 
Ese coche nunca antes lo vi, mucho menos al tipo que va con ella tengan cuidado pues, la carretera mojada está, ya son varios minutos de acelerar. 
Ésta es la curva de la llamada, lugar en donde derrapé; ¡Dios mio, ese es mi coche! ¡me accidente! ¡ahora otra estadística soy! 
Ella levanta la sábana blanca que le indicó el bombero, a su pecho llorando ella se lanza; ¡qué diantres está sucediendo? seguro que esto es un mal sueño del que no puedo despertar, me acercaré para ver quien es el de al sábana blanca sobre la carretera al lado del que fue mi coche, ese que ahora esta desecho 
¡Mírame soy yo! nunca debí su llamada al celular responder, seguro cuando derrapé sobre éste muro me estrellé y allí como otro cadáver más quedé, tal como lo indican  las estadísticas y los anuncios lo advierten: ¡Si conduces no chatees! ¡no hables por el teléfono! 
Tanta era mi urgencia por verla que ya no lo haré, triste mi fin, sobre la carretera húmeda mi cuerpo yace ya sin vida, nunca debí desesperar, pero es tarde ya. 
Nunca sus labios de nuevo volveré besar, ahora ella ya no esperará, mucho menos desesperará, seguro triste estará; yo hasta aquí llegué en la ultima curva previa a la felicidad.
¡Ya voy, esperen! son esos dos tipos que salen de esa luz blanca que es tan intensa, seguro mi tiempo en este mundo yo terminé. 
¡Esperen no quiero irme sin sus labios poder volver a besar! ese recuerdo quiero que me acompañe al otro lado adonde me habrán ustedes de llevar. 
Me acercó a ella y con mucho amor y cuidado, sus labios beso; ella lo siente y luego se los acaricia, un beso tan salado lo sé, pero con mi amor en ella para siempre quedaré. 
¡Adiós mi amor! 
Ella con leve susurro en sus labios me dice: 
¡Adiós mi amor, nunca te olvidaré!

                                                FIN


Inspirado en la canción: 99 miles from LA. Interprete: J. Iglesias.



jueves, 27 de agosto de 2015

Inseguridad


Como tú ángel, 
sin que sepas yo te vigilo
evitando que puedas enamorarte de otro,
evitando que mis besos los cambies por otros,
evitando que se atraviese en tu vida un payaso,
que te haga reír más que yo,
que te besé mejor que yo.

Como tú ángel, 
protegeré lo que es mio
evitando que tus ojos 
puedan encontrar algo más bello,
evitando que tu cuerpo 
reciba a otro y que me compares,
evitando que puedas un día
repartir ese amor en pedazos.

Que tus ojos, 
se enamoren de lo superficial,
que sientas otras caricias 
y que te muevan los hilos del deseo.

Como tu ángel, 
sin que sepas yo sigo tus pasos,
adelantándome 
a lo que te pueda quitar de mis brazos,
porque quiero que a tu alma tan bella 
no la contagie la maldad de este mundo.

Vigilante 
para ver si tan solo eres mía
o en mi ausencia habrá 
quien disfrute tus brazos, 
tus besos y a tu cuerpo de ángel.

Porque ahora que te he hecho mía
mi amor es más profundo 
y no quiero perderte, 
mucho menos compartirte con nadie.

Como tú ángel, 
sin que sepas yo día, día te sigo,
no podría vivir 
si supiera que te he perdido,
porque ahora 
que te he hecho mía, 
más yo te quiero.

Evitando que más de un payaso 
te siga los pasos,
porque eres el ángel más bello 
que he encontrado en mi vida
y con nadie quiero compartir 
lo que siento ya es mio.

Porque quiero proteger 
a tu alma tan bella 
que nada la contagie en este mundo
porque roperías a mi amor en pedazos,
con saber que alguna vez 
has pensado en alguien que no sea yo,
porque romperías a mi corazón en pedazos
con saber que le sonreíste a ese payaso 
que quiere apartarte de mi.

No quiero que nada 
te aparte de mi lado, 
porque cada vez 
mi amor para ti es más profundo.

La verdad es que quiero saber 
si tan solo eres mía 
o compartes mi amor con payasos.
Con mi mente, corazón 
y amor yo te acompaño,
porque quiero que tan solo seas mía.

Como tú ángel de la guarda
yo te sigo tus pasos,
para proteger 
ese maravilloso amor
que un día encontré 
en tus brazos.

Alguien como tú (las canciones de mi vida)


- ¡Antes de irte, antes de terminar, vuelve a mentirme y hazme el amor una vez más!

Estas palabras detuvieron al hombre que fue todo para ella, justo en el umbral de la puerta él quedó paralizado al escuchar ésas palabras que hirieron a su corazón. Ella al ver que sus palabras habían logrado detenerlo, esperanzada, siguió con ese juego desesperado de palabras para convencerlo una vez más, de que ella era la mujer que lo amaría por siempre. Y agregó.

- ¡Acuéstate y hazme el amor, solo por ultima ves; luego si quieres te puedes marchar!

Él se volvió, cerró la puerta, bajo su maleta y con sus ojos vidriosos la vió, después de unos minutos esperando que su orgullo y sus sentimientos le permitieran hablar, ésto dijo.

- ¡Sabes que es lo que más deseo, pero también sé que, solo se trata de lo mismo, de una manipulación más, tú nunca cambiarás!... Ella lo interrumpió con estas palabras...

- ¡Luego vete tranquilo, nada me va a suceder, ya lo he decidido, porque se que no moriré!
Él sonrió irónicamente al ver que nada cambiaba con ella y le dijo con la voz entrecortada.

- ¡Sabes que aún te amo, y juegas conmigo, como lo has hecho siempre, sé que no morirás, porque el que morirá!, ¡ese soy yo!
Ella se encontraba frente a él, imponente, hermosa como siempre, pero al escuchar lo que le dijo quien se marcharía, ella para no evidenciarse le dió la espalda y como si nada se colocó a arreglar la habitación, mientras ésto hacía, ella le dijo que arreglando esa habitación, era como si arreglara su vida que vendría pronto a ella, y siguió con ésto; pronto podré volver a empezar y además le dijo; que solo era cuestión de tiempo.  Ésto ultimo a él le dolió mucho, pues al decir esa frase: ¡Solo es cuestión de tiempo!, con una mano ella señaló a su bello cuerpo, el cual estaba parado frente a él de una manera más que sugestiva.
Mientras él veía su actitud desafiante que contrastaba con sus palabras. Seguramente se sentía muy herida por la partida del hombre que la hacía muy feliz y sentirse toda una mujer.
Él se defendió, diciendo: _ ¡Claro! no pasará mucho tiempo, pues eres una bella mujer, pero seguro estoy que no encontrarás a alguien que te amé, como te amo yo, mucho menos que te bese como yo te beso, pero siempre me largo, está vez no hay retorno, pues, no puedo con esta situación ya tan insostenible. 
Ella se calmó pues, sabía que estaba perdiendo al amor de su vida y entonces lo intentó nuevamente con ésto.

- ¡No digas nada, será mejor así, no más palabras que no quisiera oír! Y entonces ella caminó hasta donde él se encontraba con lagrimas en sus ojos, ella se acercó lo más que pudo para sentir su olor y soñar con él, con sus caricias y mientras él sentía que aun la amaba tanto, escuchó esas palabras que para él fueron hirientes.
Ella le dijo al oido:

- ¡Acércate una vez más, haz lo que quieras de mi y luego si quieres te puedes marchar!

Éstas palabras carecían de arrepentimiento, había soberbia en ellas, algo que sin ella darse cuenta lo alejaba en lugar de acercarlo. Él quiso y deseo abrazarla y hacerle de todo, tanto la amaba, pero sabía que con ella no se podía quedar, si lo hacía era para seguir sufriendo; así que se alejo de ella y se dirigió nuevamente a la puerta; mientras tomaba la maleta, ella sintió la muerte, y lanzó su ultima frase, una que causaría más dolor que arrepentimiento en la pareja, ésta vez ella también lloraba, pero en su rostro no se veía cambio alguno, la soberbia se había apoderado de ella, pensando que lo convencería como en oportunidades anteriores. 
Ella dijo con la voz temblorosa y gangosa por lo que en el pecho sentía, con pucheros de niña malcriada.

- ¡Necesito de alguien como tú, para poder olvidarte, que me bese los labios como tú...
que me enamore y atraviese mi cuerpo como lo sabes hacer tú, dulce y suavemente pero muy intensamente!
- ¡Alguien que me hable y consuele como lo sabes hacer tú. Y, casi gritando dijo: ¡Alguien que me bese como tú! ¡dulce y suavemente! ¡y a la vez tan intensamente! ¡Regresa y hazme el amor solo por ultima vez! ¡luego, si quieres te puedes marchar!

Él no se detuvo y siguió caminando hacía la puerta, tomó la maleta y llegó nuevamente hasta el umbral de su puerta, ahí se detuvo y sin voltear le dijo:

- ¡Sabes que te amo, pero ya no soporto tus celos irracionales y esa violencia que no puedes controlar!, ¡debes cambiar, no por mi, ni por nadie! ¡hazlo por ti, y para quien llegue! ¡pues, solo será cosa de poco tiempo a mujer bella no le será difícil! ¡para ti lo difícil, será encontrar a alguien como yo, no por mis besos que me dices, sino por lo mucho que te aguanté!, ¡pero ya me cansé! 
Ella dijo llorando y de rodillas al borde de la cama que los vió ser muy felices, amándose muchos años.

- ¡Necesito de alguien como tú!, ¡que me bese como tú! ¡que me ame como tú, dulcemente, suavemente e intensamente!... Ella siguió musitando éstas palabras ya postrada, medio cuerpo sobre la cama y el resto en el suelo. ¨
Pero él, con mucho dolor en su corazón no se detuvo y del que fue su hogar por años, sin ver para atrás con maleta en mano, del lugar se marchó, él iba igual o más destrozado que la que en el lugar, ahí llorando con sus celos enfermizos y su soberbia. ¡Sola, ella quedó!


Historia de: C. Blanes y S. Raga



miércoles, 26 de agosto de 2015

Chico tímido


Es tan tímido
que no puedo acercarme
sin que se ruborice,
pero es tan bello
que quiero comerlo,
debo tener sumo
cuidado para no asustarlo.

Es muy timido
me hace más quererle,
su cara de niño asustado
y ruborizado
lo hace mas bello
me hace desearle.

¿Cómo hacer?
para que se fije en mi
que se atreva a decir
lo que siente por mi,
si es tan tímido
que quiero comerlo.

Me acercaré para besarlo
él clavado ahí quedó
sin poder musculo mover,
pero en sus ojos vi
el amor que siente por mi
y no se atreve a decirme,
es tan timido
que quiero comerlo.

Su timidez 
me robo el corazón,
debo pronto tenerlo
o moriré, me atrae tanto
su timidez la mejor 
arma que él tiene,
y el pobre sin saberlo,
su timidez sexy lo vuelve
es tan tímido 
que quiero comerlo.

Acerco mi boca
lo tengo contra la pared
siento su cuerpo temblar
no se me escapará
hoy lo estrenaré
huelo su aliento
por sus poros percibo su miedo
es tan lindo.

Es tan tímido que deseo comerlo
no tiene escapatoria
debe de rendirse a mi
mis senos aprietan
sus pectorales fuertes,
mis labios rosan los suyos
quiero morir 
que emoción mas fuerte.

Nuestros labios, 
por fin se fundieron 
hoy me lo comeré
beso fantástico 
no lo comprendo
¿a dónde se fue su timidez?

Él dejó de temblar 
y contra su cuerpo me apretó 
somos uno solo, creo morir 
el chico que soné
por fin despertó y junto a mi
su cuerpo quiere fundir.

Él es tan tímido 
y eso lo hace tan sexy
mira como de pronto
dejo de ser el chico tímido
ahora me devora con un beso
me siento intimidada
ahora soy quien tiembla,
chica sexy ahora soy
en brazos del que 
hasta hace un minuto
chico tímido fue.

Ese primer beso 
con el me devoró 
y yo que pensé
que era mi presa
más la presa fui yo.

Cuando el beso terminó
el tímido regresó, que lindo,
chico tímido quiero comerlo
se convierte en fiera 
a la hora de amar
suerte la mía
conseguir a un chico 
tímido y lindo.

Que al momento de besarme 
en una bestia de amor se transforma
nadie debe conocer su secreto,
soy su criptonita y el mi supermán.

Mi chico tímido se transforma
en amante perfecto,
quien diría, suerte la mía, 
haber conocido
a chico tímido, que bello.

Solo pienso 
en comerlo y besarlo
para que deje de serlo
y de tímido a super hombre
desinhibido se vuelva.

Yo tiemblo y una chica tímida
entre sus brazos se duerme,
nadie sabrá nuestro secreto.
Mi chico tímido,
es tan lindo y quiero comerlo,
pues sin él saberlo
al besarlo en otro se vuelve.


martes, 25 de agosto de 2015

Nunca supe lo que era el amor


Hasta hoy, 
nunca supe lo que era estar enamorada.
Abrí mis ojos... ¡vaya sorpresa!
También me atreví 
y a mi corazón abrí.

Es que, nunca antes supe 
lo que era el amor,
cambios a mi vida pronto llegaron,
cambios de amor, 
porque antes de ti, 
nunca supe qué era el amor.

Abrí mis ojos 
y al hacerlo te conocí, 
me dije: ¡Él es el amor!
Abrí mi corazón 
y se lo mostré,
de acuerdo conmigo estuvo.
¡Vaya sorpresa!
Mis ojos y corazón en sintonía,
sintonía de amor.

Algo que antes nunca pasó
y hasta hoy nunca lo supe,
nunca supe: ¿Qué era el amor?
Hasta hoy,
nunca supe lo que era el amor
Antes de ti todo era común.

¡Vaya sorpresa!
mis ojos abrí y a mi corazón sentí,
la emoción se apodero de mi
algo nuevo conocí,
pues, nunca antes 
supe lo que era el amor,
antes, de conocerte a ti.

Tú llegaste y 
a mi amor robaste,
bendito ladrón,
que me hizo abrir mis ojos y a mi corazón,
sin miedos, ni dudas los has dejado,
antes de ésto, nunca lo supe.

Nunca antes mujer enamorada fui,
de lo que me perdí;
ahora puedo gritar:
¡Sé lo que es el amor,
mujer enamorado ahora soy!

Hasta que llegaste a mi
mis ojos y mi corazón 
morían sin saber, que era el amor,
bella sorpresa, conocerte y ese día
conocer al mayor de los sentimientos.

Mis ojos, mi corazón, 
mi piel, mi alma, mis brazos,
todos abiertos a ti,
no lo puedo ni quiero evitar,
sensación bella y hermosa
nunca más lo podré olvidar,
ahora sé lo que es el amor
y debo gritar, que te lo debo a ti.

Nunca, hasta hoy supe lo que era el amor:
Ojos dilatados,
corazón agitado,
piel erizada,
brazos abiertos,
mariposas desatadas, (liberadas) 
pasos descontrolados,
amor a la vida,
deseos desmedidos de ser amada.

Ahora que  te conocí 
y el amor llego a mi
deseo más que nunca, ser mujer
¡vaya sorpresa!

Se han despertado en mi:
deseos antes dormidos,
sensaciones jamás sentidas,
amor a la vida y sus criaturas,
cantar, canciones sin sentido,
bailar:  ¡Mira y lo hago en el aire!

Nunca, nunca antes
abrí mis ojos, 
nunca, nunca antes 
mi corazón vibró,
nunca, nunca antes
mariposas volaron en mi abdomen,
nunca, nunca 
dejaré de amar, lo juro así será.
Desde que llegaste a mi.
Ahora que sé lo que es el amor, contigo lo pienso vivir.

Dicen que el Sr. Presidente: ¡Sólo quedó!


Dicen que hubo un militar que apostó y ganó,
a su lado una que un día princesa fue, hoy su reina será.
Dicen que se aprovechó de la necesidad de un pueblo 
deseoso de paz y seguridad y que su lema: Mano dura, fué 
y su seña y santo: Un puño cerrado, fué.
Dicen que así llegó y afirmó su poder, con el respaldo de todo un pueblo
que con cohetes y marimba su asunción al poder celebró 
y ésta victoria como propia la adoptó.
Dicen que el tiempo transcurrió y la violencia fué peor,
pues,  la ecuación  así quedó: 
Asesinos + mareros + empleados del gobierno = un pueblo moribundo.
Dicen que la alarma se escuchó hasta en el extranjero y de ahí 
llegaron personajes expertos en el tema. Pero el lugar estaba ya tan enfermo 
que todos éstos se contagiaron y se largaron para no volver.
Dicen que después de esos malos extranjeros, contaminados y ahora millonarios 
llegó uno que, vacunado contra la impunidad y la corrupción hace años él está.
Dicen que mientras el tiempo pasó y nada bueno se vió en es pueblo que lloraba sangre,
la reina no pudo su codicia aguantar y con desespero al pueblo le empezó a robar
hasta que éste, sus niños desnutridos y sin educación, morían en carne y conocimiento.
Dicen que el militar y presidente, no creyó cuando escuchó del pueblo 
venir consignas de que el pueblo moría de hambre y extorsiones, 
de asesinatos en las calles y hospitales a falta de medicamentos y de policías justos y honrados.
Dicen que, el que de afuera y vacunado llegó, de éste pueblo se compadeció 
y decidió junto a locales dignos, honestos y honrados, acabar con ésta manera tan nefasta de la reina de vivir.
Dicen que sacaron sus aparatos y sus orejas destaparon y se pusieron a escuchar sus platicas impunes, de los que con él y la reina regían en el lugar 
y lo que escucharon les indignó tanto que callar ya no pudieron más.
Dicen que contaron a los dueños del país, que la reina y sus valets eran  los que se apropiaban de las riquezas de ese bello país, con ello se robaron: 
Educación, salud, seguridad y crecimiento. Que barrieron con todo.
Dicen que la mano dura y aquel puño que al poder los llevó, 
en una mano aguada y con guante negro se convirtió.
Dicen que como en el ajedrez, primero cayeron los peones, seguidos de sus alfiles, 
ésto dejó al descubierto a la reina, quien un día del palacio salió, 
despedida por un pueblo que al poder con algarabía un día la llevó y al militar acompañó.
Dicen que el Sr. Presidente estaba absuelto de toda culpa, 
pero la reina lo logró, tal vez, sin ella quererlo, salpicar y con ello ensuciarlo 
y quedar en evidencia, pues con vehemencia él por ella hasta sus manos al fuego metió.
Dicen que al investigar a su reina codiciosa que del pueblo se burló y de alguna forma al pueblo mató.
Se evidenció que al Sr. Presidente la codicia también lo alcanzó y de millones se adueño, 
aunque él dice que es inocente, pero él nunca dijo no, al recibir las riquezas que no eran de él sino de su patrón, a pesar de ver como muchos: En casas, hospitales y en las calles fallecían, 
del ojo chico éste se hizo y todo por defender a la que las manos un día le quemó.
Dicen que el pueblo como nunca en su historia se unió e indignados en grupos de miles a sus calles se hicieron con consignas, a pedir la renuncia del militar y Sr. Presidente de aquel lugar.
Dicen que éste se negó su puesto dejar, pues siempre en su inocencia él creyó, 
aunque las evidencias lo ahogan y condenan; su destino ya estaba escrito y la historia su venganza contra él ya fraguó.
Dicen que una incipiente democracia quiere sobrevivir y por ello a sus puertas y a su cara 
le gritan que se largue, que ya no lo quieren más ahí. Pero él, con rostro demacrado y asustado, conociendo que su castillo es la única fortaleza que le mantiene de pie, a él se aferra y asegura no dimitir y del pueblo se sigue burlando, pues éste es su patrón y el que ahí a su trabajo un día lo llevó.
Dicen que al ver como caía de su pedestal y a su reina tras las rejas, su palacio ahora es, 
y que jueces justos la escucharán para que la democracia y la justicia, 
sea quien defina su nefasto futuro, que ella en pocos años con avaricia construyó.
Dicen que las torres y caballerías del ajedrez del poder al ver que su Presidente los traicionó 
y sentir las gotas de barro negro llegar hasta sus vestimentas, esperamos honestas, se empezaron a manchar, mejor decidieron al Señor Presidente solo en su palacio dejar 
al lado de unos pocos militares y fieles a él; que lo verán de ahí mas temprano que tarde con la cabeza baja de ahí salir y a su reina habrá de acompañar. Uno en la carceleta norte, mientras el otro en la carceleta sur, su condena habrán de cumplir.  

Ésta historia se a vivido en muchas partes del planeta en donde la democracia ha sido y será la que dicte sus leyes, veremos caer muchos más, pues ya la historia también se cansó y los alcanzó; aunque se ha negado a quererlos entre sus paginas, tendrá que colocarlos en algún lugar, en sus paginas más negras, junto a las guerras sin sentido y a la inquisición.

SergioRaga 
25/8/15

lunes, 24 de agosto de 2015

¿Cómo vencer a la muerte? 4


Evelyn dijo al fin: _ ¡Por esa razón, les diré! ¿como vencer a la muerte?... 

Los murmullos se escucharon en el estudio, el momento por todos esperado había llegado por fin, mientras el conductor y entrevistador, dijo.
_ ¡Por fin lo esperado por todos! pero, ¿cómo vencer a la muerte? lo sabremos después de un breve corte comercial...

Y se fueron a mensajes comerciales, pero en el estudio todos se preparaban y se acomodaban, otros extraían su agenda y verificaban si su pluma estaba en buen estado para tomar notas del tema tan esperado, por su lado, Evelyn pidió un permiso y se retiro a los servicios sanitarios, mientras ésto sucedía, el conductor y entrevistador, era maquillado para que al regreso de los comerciales estar a la altura de la ocasión.
Después de varios minutos, pues debían tiempo aire a los patrocinadores, como recordarán, el conductor nunca mando a comerciales, a pesar de que el floor manager se lo ordenaba, por ello fueron varios largos minutos de pauta comercial, para cumplir con los contratos de la emisora y sus patrocinadores.  

Evelyn regresó del tocador, se acomodó, los técnicos le colocaron los micrófonos, la maquillista le retocó el maquillaje y la cabellera. El floor manager indicó que pronto estarían al aire...
Y se escucho en el estudio.
- ¡Silencio!
- ¡5, 4, 3! y luego en silencio los restantes números los enseño con sus dedos...
- Gracias por continuar con nosotros, prometemos no interrumpir más, pues todos estamos ansiosos de escuchar lo que Evelyn tiene que contarnos.
- ¡Evelyn! entonces dinos ¿cómo vencer a la muerte? 
Evelyn vio a la cámara, a la que se le encendió el foco rojo y a ella vio, mientras el director de cámaras le hacía un close up ella inició su disertación.

- Bueno queridos televidentes, publico aquí presente. Dijo y se tomó un trago de agua, colocó el vaso sobre la mesa y dijo... ¿Cómo vencer a la muerte? algo que muchos desearíamos en algún momento de nuestras vidas poder hacer, y algo que para muchos es imposible, además de ser una ley de la propia vida, la muerte, el final de ese largo camino para muchos y corto para otros, arrebatado para unos, la solución para otro tanto, algo nunca sabido por nadie, ni por el más genio que piso nuestro planeta, ni siquiera ellos con todos sus conocimientos lograron vencer a la muerte, pues la muerte, supieron ellos en su momento que es algo necesario e importante en la vida del hombre, como dije, la muerte y la vida son dos cosas que si te detienes y lo piensan, es una sola, como nos enseñaron un día en la escuela: EL hombre nace, crece, se reproduce y muere, se dan cuenta, vienen de la mano o vienen en paquete diría yo y por tanto ella, la muerte, es algo inevitable, se los dije al inicio, ¿lo recuerdan? Éste tema no tiene como fin no morir, pues llega un momento en la vida del hombre que nada es mejor que ella, aunque no lo crean, pero la vida llega un momento que cansa y la muerte se desea, eso que llaman el descanso eterno y que desde el momento que llegamos a este mundo se encripta en nuestro adn la fecha en que habrá que suceder y no hay nada que lo pueda evitar, habrán visto accidentes aparatosos que nos maravillamos al saber que los ahí adentro, conductor y pasajeros, han salido ilesos, sin un solo rasguño, ¿y eso cómo pudo ser? nadie se lo explica y lo etiquetan como un milagro, otro elemento que esta en el paquete, en la trayectoria de la vida, como lo son las enfermedades que deberás enfrentar a lo largo de ella y aquí, otra interrogante: ¿Por qué soy tan enfermo y hay otros que nunca se enfermaron pero ni de catarro? incógnita que esta grabada en el adn de tu cuerpo que te tocó que usar en esta vida.

- ¡Todo eso es asombroso Evelyn y muy interesante, estoy seguro que ha más de uno has dejado pensando con lo que nos has dicho! La interrumpió el conductor y agregó: ¡Pero ya dinos! por favor: 
¿Cómo venceremos a la muerte? Evelyn respiró profundo, bebió agua y sonrió con la paz y quietud que la caracterizaba.
- ¿Cómo vencer a la muerte? Dijo y luego se respondió: Pues, la única manera de vencer a la muerte es... ¡Muriendo! 
Todos en el estudio murmuraron, quizá decepcionados, lo mismo que muchos televidentes, mientras más de alguien también dijo: ¡Se los dije! 

Esa respuesta causo revuelo y comentarios encontrados, sin embargo a Evelyn no le inmuto los comentarios y luego de una breve pausa mientras regresaba la cordura, ella agregó.
- Lamento haberles decepcionado, pero yo soy la más decepcionada, pues ¿cómo pueden pensar que la muerte se puede evitar? eso no tiene sentido, por lo ya explicado anteriormente sin embargo, les pondré algunos ejemplos y verán como mi respuesta, esa tan simple, tiene una tremenda verdad. 

Evelyn continuó con unos ejemplos elocuentes y claros, para que cualquiera lograra entender su punto de vista o el de su padre, eso nunca lo aclaró.

- Bíblicamente se dijo: ¡Deberás de nacer de nuevo para heredar el reino de los cielos! Ésto es: ¡Morir para tener la vida eterna!...  ¡Jesús, venció a la muerte, pero para ello Él tuvo que morir!... ¡En la naturaleza vemos otros ejemplos y les digo uno que recién ví por televisión!
- ¡Un venadito de pocos meses de vida, quien pastaba sin sentir que el peligro lo acechaba muy lentamente y cerca de él, la muerte lo rondaba y cuando se vino a dar cuenta ya era tarde, el león lo atrapó y su cuello quedó entre sus fauces, pienso, él pensó o se desmayó, aguadando su cuerpo, como animal ya muerto quedó y el león se lo llevó a su madriguera, pero en el camino algo pasó y lo colocó un breve rato sobre el suelo, ¡ya que! pues ¡está muerto! pero, al estar éste sobre el suelo ya no en las fauces de tremendo depredador, el pequeño venado dio de brincos y corrió, salvando su vida; el león quedó como diciendo ¿y ésto qué? todo desconcertado, ¿te das cuenta, el venado tuvo que morir para vivir?, ¡él venció la muerte! 

Todos escuchaban atentos y algunos con su cabeza indicaban estar de acuerdo. Evelyn no se detuvo, ella siguió y agregó. 
- ¡En la segunda guerra mundial, en una emboscada nazi, luego de ella, ¡solo cadáveres sobre el campo de batalla! y a pesar de que los soldados pasaron revista para ver si había algún sobreviviente no encontraron a nadie con vida y se largaron del lugar, pues la batalla había sido ardua y el cansancio no se diga; cuando ellos se largaron de entre los cadáveres y de los escombros, un soldado que al verse perdido se ensangrentó con la sangre de los cadáveres de sus compañeros de batallón y se metió entre los cadáveres, hasta el fondo de ellos; él tuvo que morir para vencer a la muerte que lo acechaba. Recuerdan la novela: "El Conde de Monte Cristo" él protagonista tuvo que morir y "su cuerpo sin vida "lanzado al mar, para así vencer a la muerte. Vemos en la naturaleza, como algunas especies se hacen los muertos cuando tienen encima de ellos a su mortal depredador y éste quien en ese instante no es más que la misma muerte, ve a un cadáver, un muerto que acaba de vencer a la muerte. El gusano, es otro que tiene que morir para vencer a la muerte y al hacerlo, deja de ser un desagradable y asqueroso gusano y nace de nuevo, pero como una hermosa y admirada mariposa, con miles de bellos colores. Otro más, el lobo, que cuando queda atrapado en una trampa, él sabe que morirá y ¿qué hace? ¡mata a su miembro, corroe su pata y la deja ahí muerta, para vencer a una inevitable y segura muerte! 
Ésto, lo han hecho hasta seres humanos para no morir y vencer con ello a la muerte misma. 

El silencio se apoderó del estudio y de muchos hogares y después, ella, Evelyn dijo.
- ¿Como vencer a la muerte? pues, ¡muriendo! 
Entonces todos aplaudieron en el estudio y en algunas casas también les llegó la emoción y lo hicieron; el que no volvía en sí, pues éste esperaba literalmente conocer: ¿Cómo vencer a la muerte?, se trataba del entrevistador, a quien se le veía muy decepcionado al escuchar todo lo que Evelyn había dicho, entonces por fin dijo con su voz apagada.
- ¿Entonces no se puede vencer a la muerte, digo voy a morir algún día?
Evelyn le tomó del brazo y con una sonrisa como de madre consolando a su niño, le dijo.
- ¡Y hasta lo desearás amigo ya estarás cansado de tú vida que desearás la muerte! pero lo bueno es que al morir habrás vencido a la muerte, pues pronto volverás en otro cuerpo, regresarás y lo harás con mucha vida y la disfrutarás como ahora no lo has hecho, ¿no es ésto bello? todos tarde o temprano vencemos a la muerte al morir, te digo, al morir dejas de sufrir, pues hay sufrimientos horribles que son peores que la misma muerte y al morir le habrás ganado a la muerte que era tu vida; ¿me entiendes? ¡esa vida no era vida, era una muerte en vida y al morir la has vencido! pues pronto estrenarás una vida nueva, ¡sin dolores ni angustias! ¡nuevo ser serás!
El entrevistador, por fin, aunque no muy convencido dio las gracias a su invitada y despidió el programa. 
El más visto en años de historia de esa emisora.

La vida es el principio de una muerte anunciada y segura. Ésta no es corrupta, no acepta sobornos ni da plazos, cuando te toca: Ni un segundo antes ni uno después, el reloj del adn de cada cuerpo lo traemos como los medicamentos traen su fecha de expiración, solo que en éstos, aun tienen 6 meses de vida útil después o sea que si lo ves bien, hasta en los productos de consumo diario y medicamentos encaja la filosofía de Evelyn. Si quieres vivir a plenitud, debes de morir, es la única solución para vencer a la muerte y te digo ésto ultimo, pues conozco personas que su vida es un infierno, viven una muerte, son como muertos vivientes, viviendo pero muertas, la única manera de retomar el camino de una vida plena, es la muerte, me refiero, si un amor te hace sufrir, pues que muera y nace en los brazos de alguien que si te de vida, vida de calidad, si te maltratan, te violentan, hacen un infierno de tu vida, ¡no mates a quien es tu verdugo! ¡muere tú! y al morir, éste te dejará en paz, pues no tiene sentido seguir fregando a un cadáver y luego, ¡empieza a vivir! 
Un mensaje muy claro, pero a la vez muy difícil y confuso, que lo entenderás cuando decidas morir, me refiero a que entenderás de lo que Evelyn te habló, tome sentido para ti y que para poder vencer la muerte que es tu vida presente, no queda de otra más que morir y así vencerás. 
Tal cual, hace dos mil años lo dijo y lo hizo el más grande, Él sabía que para vencer todo, pecados mortales y al mismo sufrimiento que le tocó vivir en su calvario, solo había un camino y ese era morir; al hacerlo y para que lo comprendieras nos dió tres días de reflexión y entonces cuando nuestras almas ya habían comprendido, Él regresó para ascender a su lugar, lugar desde donde nos sigue dando ejemplos, pero muchos aún no lo entendemos y por ello, vivimos nuestra muerte pudiendo vivir una hermosa y eterna vida, pues cuando lo entiendas, verás que la muerte solo es transición de algo natural que viene con la misma vida. Recuerda, mueres para seguir viviendo; acá o donde tú fe te lo indiqué, en cualquier caso es lo mismo, porque todos los caminos convergen allá en el horizonte, allá en el fin del mundo, ese punto que no percibimos desde acá. Esos caminos convergen en un único punto: ¡La Resurrección!

... Y, ¡así es cómo se vence a la muerte!...

 ... Con cariño, Evelyn, a la memoria de mi padre...









sábado, 22 de agosto de 2015

Receta de Doña Rosaura, para dejar el licor


Ésta historia ocurrió en el oriente de mi país y lo que les contaré lo supe muchos años después de aquel acontecimiento, uno muy especial que se llevó a cabo en esa región de mi querido país. Doña Rosaura, era una señora ama de casa, con siete hijos, a los cuales amaba mucho, el único sustento de aquella típica familia oriental lo llevaba en hombros Don Catalino, un político y secretario municipal de esa región y muy amigo, de mi tío Wenche. Quien fue, el que nos compartió la efectiva receta para dejar de beber o chupar, como se dice por ahí. 
Mi tío estuvo un fin de semana de visita por esa región y aprovechó para visitar a su entrañable amigo de bohemia, Don Catalino, quien muchas veces se olvidaba de sus obligaciones en su hogar por su adicción al licor y eran muy buenos amigos con mi tío, porque a él también le gustaba el chupe y he de agregar que cuando mi tío se entonaba, era capaz de entretener por horas a muchos con sus ocurrencias e historias reales o ficticias, solo él lo supo y siempre dijo que todo era cierto, aunque habían unas, que ciertamente parecían películas gringas futurístas para aquella época. 

Una vez me contó, que en un lugar a donde lo envió el gobierno a trabajar, pues mi tío era telegrafista y era un eterno errante. Bueno, en uno de esos traslados, cuenta que llegó a un pueblo y al llegar lo primero que hizo luego de acomodarse en la pensión que sería su hogar por tiempo indefinido fue ir a la cantina a tomarse un par de cutos (bebidas alcohólicas) y que luego de ello salió al comedor más fino del lugar y que fué ahí, que conoció a la mujer más hermosa que jamás sus ojos hallan visto (era algo que siempre decía) y que después de varios días cortejándola, por fin la convenció y ella, fué su mujer. (Entraré en detalles de esta historia en otra oportunidad, pero a lo que voy) Y que al tiempo enfermó, cayó en cama y que los médicos no atinaban que era lo que le pasaba... Bla bla bla... Al fin supieron que mi tío había contraído Sífilis (sinónimo de Sida hoy día) Al enterarse de la mala noticia él pensó en mi abuelita, pues pronto moriría y bla bla bla... 
Que él fué, el que se sometió como conejillo de indias a las primeras pruebas de la penicilina y que milagrosamente se curó y que gracias a él, ésta medicina milagro del siglo XX, era segura. 
Éstas eran sus historias (saque usted sus conclusiones) Prometo contar esta historia completa en otra oportunidad, pues me salí del tema de hoy.

Ya con los tragos entre pecho y espalda Don Catalino invita a mi tío a un evento muy especial que estaba a 24 horas de llevarse a cabo; resulta que el gobernador y otras autoridades muy importantes llegarían al lugar, por asuntos políticos y que él, Don Catalino, era el encargado junto a Doña Rosaura de la recepción.
- ¿Entonces compadre Wenches se queda? Mi tío vió la oportunidad de resarce con la cúpula política y sacarle provecho.
- ¡Claro! ¿cómo no quedarme? ¡nada me hará faltar a tan magno evento! ¡Gracias por la invitación compadre Catalino!, ¡salud!
- ¡Ah y le cuento que Rosaura será quien preparé el ponche y sabe que delicia de bebida hace mi señora compadre!
- ¡Ahora con mayor razón me quedo compadre, esa bebida que prepara Rosaura es bebida del cielo, embriagante y deliciosa!
Regresaron algo coloradones a casa de Catalino, cuando éste llegó, Doña Rosaura estaba con garrote en mano, esperando al bolo de su marido, pero al ver con quien llegaba, todos saltaron de sus lugares a recibir a mi tío Wenches, incluyendo los niños los más chicos, pues sabían que esa noche sería muy especial escuchando historias que estoy seguro; ¡jamás olvidaron!
- ¡A dormir, mañana es un día muy largo! ordenó Doña Rosaura, pues eran los anfitriones del magno evento. Todos protestando pero se fueron a dormir.
Al día siguiente, el lugar era como un día festivo, todos colaborando en los preparativos del magno evento que se llevaría a cabo en el salón de la alcaldía municipal esa noche.
- ¿Rosaura, dime harás tu delicioso ponche? Preguntó mi tío con sonrisa en boca, la cual se le hizo agua al escuchar de Rosaura que si lo haría, pues era un evento especial y nada mejor que ese famoso ponche, para las personalidades de la capital y de la cabecera departamental, que llegarían a la reunión.
Unas pocas horas antes del evento, Doña Rosaura mando a llamar a su esposo, Don Catalino y a mi tío, para que le ayudaran a destapar las botellas y otras cosas más para la preparación del delicioso elixir, algo para lo que no hubo que rogarlos. Mientras Doña Rosaura preparaba el famoso ponche, mi tío hacia de las delicias, en cuanto a entretenimiento se refiere y cuenta que se le hacía agua la boca de solo ver como Doña Rosaura preparaba su ponche. 

Por fin, Doña Rosaura terminó su ponche y les pidió su atención a su amado esposo y a su compadre: Y con ello les doy el secreto para que cualquiera deje el vicio del licor. 
Esta es la receta, o la clave, o el chivo, de Doña Rosaura para quitarle el vicio a cualquiera...
- ¡Mira mi amor y usted compadre, acerquence que quiero compartirles un secreto de mi delicioso ponche! Ellos se acercaron como trozo de metal atraído por poderoso imán.
- ¿Si comadre, diga? Preguntó mi tío.
- ¡Habla mujer! ¿qué pasa? Dijo Don Catalino muy emocionado.
- ¡Bueno les voy a dar mi receta secreta para que éste ponche quede más delicioso, pero solo si prometen que no tomarán como cerdos hoy en la noche!
- ¡Jajaja! Rieron los dos y prometieron que no lo harían, pues el evento no era para hacerlo.
- ¡Claro que es un evento para no emborracharse y lo que haré es para salvar sus trabajos y no queden en evidencia de que son un par de borrachos! Dijo Doña Rosaura ya encabronada, pues mangos si creía en las promesa de ese par de desobligados borrachos. 

Entonces, Doña Rosaura tomó mucho aire y llenó sus pulmones, luego se escuchó un sonido muy particular en su garganta, de dónde extrajo desde sus pulmones una flema verde, mezclada con saliva y luego de saborearla y sentir nauseas, la arrojó en el ponche... ¡¡Sí!! Doña Rosaura acababa de echar un gargajo verde al delicioso ponche, el cual flotaba sobre el licor en la superficie del perol en donde se encontraba tan deliciosa bebida.
- ¡Ah desgraciada! ¿qué has hecho, sucia? Gritó Don Catalino muy molesto e indignado y en lo profundo de sus ojos se veía la tristeza a pocas horas de dar inicio el mega evento. Mientras, mi tío corría al corredor de la alcaldía a echar las tripas. Luego de echar todo el estomago afuera, regresó y dijo.
- ¡Compadre, se cagó en nosotros la Rosaura! Pero mi tío no estaba molesto, el se carcajeaba mientras lo decía y más, al ver la cara de Don Catalino.  
Doña Rosaura le daba vueltas al ponche con una paleta de madera, hasta que logró diluir su fluido pulmonar, su moco verde y después de varios minutos de movimientos, el ponche quedó impecable.

Más tarde ya en la reunión, luego del momento político que los reunió, todos los políticos y dignatarios de la república, preguntaban con ansias y sed, por el famoso ponche de Doña Rosaura la señora esposa del Secretario Municipal, Don Catalino. 
- ¡Vos Catalino, servite del famoso ponche que hace tu mujer, pues tenemos seca la garganta! Y todos brindaron por Doña Rosaura, menos Don Catalino y mi tío Wenches, al que se le revolvía el estomago al ver como los políticos y funcionarios, bebían aquel famoso ponche y pedían más y más.
- ¡Vos Catalino que afortunado sos, tu mujer es una diosa de los ponches!, ¿pero por qué no estas tomando? 
- ¡Si! ¡salud por Doña Rosaura!
- ¡¡Salud!! gritaron todos, mientras se servían más y más. 
- ¡Tómense aunque sea uno con nosotros! insistían las personalidades a mi tío y Catalino; pero ni Catalino ni mi tío bebieron. AL fin alguien dijo.
- ¡Doña Rosaura! ¿sería posible que me diera la rasete de su delicioso ponche para hacerlo en la capital?
- ¡Claro con mucho gusto! dijo Doña Rosaura, mirando a su esposo y a mi tío, quien no pudo más y salió corriendo del lugar a vomitar otra vez.

Ésta es la receta de doña Rosaura para dejar de ingerir licor, no tiene derechos reservados. ¡Así que puedes usarla cuando quieras!... ¡Hasta la próxima!... ¡Salud!







viernes, 21 de agosto de 2015

Vida de artista


Desde que era un niño 
busque con ansias el amor,
lo busque en los pechos de mi madre,
luego de ella me enamoré y
hasta la celé y se que por ella luché.
Crecí y comprendí mi error.
Seguí buscándolo con las mismas ansias 
de aquel niño que creyó estar enamorado 
pero solo estaba equivocado... 
Dulce equivocación que guardo en el corazón.

Más adelante alguien me dijo:
¿Quieres ser mi novio? 
Y yo sin responder, solamente temblé y me emocioné
pero me gusto y la malicia ella en mi sembró,
pero tampoco era el verdadero amor
el que con ansias desde niño yo busqué.

El tiempo pasó y por fin con alguien
compartí lo que en su momento yo creí
sería el ansiado amor, pero solo un espejismo fue.
Un entrenamiento adoc para mi edad
vaya decepción, algo tan natural pero tan difícil de encontrar
mi corazón junto a mi lloró, 
ambos de decepción y miedo 
por creer que ese amor que de niño busqué
y todavía no encontré, solo era una utopía.

El tiempo inclemente su caminar siguió
y yo con mi implacable búsqueda por el ansiado amor 
que de niño me exigió el corazón hallar,
a pasado mucho tiempo y aquí estoy, esperando corazón
pensando, el verdadero amor no es real
alguien en el tiempo seguro nos mintió
y ésto solo en novelas se logró.

Creo que ese amor solo existe en corazón de poeta
y que yo vine al mundo con uno de ellos
y que el amor que busco con ansiedad
ese que mi corazón de niño me mostró
solo existe en mi imaginación y que para hallarlo
tendré que escribir novelas, 
pues solo ahí se puede plasmar aquel utópico amor
el que me exige mi corazón.

Que ahora se desahoga, dictándome historias que se venden muy bien,
con ello nos conformamos mi defraudado corazón 
y el fracasado que soy en cuestiones de amor.

Historia de amor nace en mi corazón,
historias de amor mueren en mi realidad,
triste, pero a la vez esperanzador 
creer que un día aparecerá el verdadero amor,
el que de niño en pecho de mi madre creí haber encontrado.
No sufras corazón 
y sigue dictando tus historias de amor
quien sabe y un día nos encontremos con él...


Historia de un gran poeta, quien en el amor creyó el día que nació
y desde entonces buscó y buscó, sin un momento descansar ni claudicar.
Lo que si logró, fue llegar a ser el más grande escritor; escribiendo historias de amor,
que a muchos han hecho suspirar y hasta asegurar, que ellos lo encontraron
y que lo hicieron a través de sus obras literarias, esculturas y pinturas.
Triste, pero a eso llegaron al mundo los que son llamados: Artistas.
Nacieron con un corazón especial que los hace buscar y buscar la perfección 
en el tan ansiado amor, pero nunca comprendieron como hoy lo hago yo,
que el verdadero amor no es perfecto, el verdadero amor, el humano, 
esta lleno de imperfecciones, de errores, con sus aciertos y desaciertos,
con sus dolores y felicidades. Ése, es el verdadero amor, pues si nace con el hombre,
un ser imperfecto, el verdadero amor es también imperfecto.
Solo basta con ver a quien tenemos al lado nuestro, compartiendo nuestra vida,
para entender lo que el artista nunca aceptó. 
Mientras él sigue como muchos, en su búsqueda, en busca del amor perfecto, el amor utópico, ese que encuentras en mis historias y las de los exitosos y eruditos pensadores, que han dejado huella en sus obras. Las que hemos llamado: Obras de arte. 
Entonces me atrevo a decir: 
"Que el amor verdadero, es un error plasmado en una obra de arte"  

... Así es la vida de un artista. Que bien que yo no soy artista, pues tengo a mi lado al más bello error que la vida un día me dió. Sergio Raga




jueves, 20 de agosto de 2015

El bus de doble piso


- ¡¡Ahí viene!! ¡¡corre corre!!, al pasar por mi lado de un brinco me subí, pero mi acompañante: ¡¡No!! De mi mano se había soltado y se encontraba como una calle atrás, de un brinco de él me bajé y corrí con ella.
- ¿Qué pasó? ¿porqué no brincaste? le dije muy molesto, ella me respondió aterrada
- ¿No viste? ¡ese bus no llevaba chófer! el horror se veía en sus ojos.
- ¡Pues claro que no llevaba chófer! ¡no ves que es el bus de doble piso! ¡carajo, ahora habrá que esperar hasta mañana! Ella me vió con mirada de: 
- ¡Hello! ¿acaso estás loco?
- ¡Tú no entiendes nada! la cogí por el cuello y me acompañó de regreso, mientras subíamos la empinada calle; una tan empinada, como las de San francisco California y su famoso tranvía; mientras subíamos dije: ¡Te explicaré! Ella me dijo: ¡No hay nada que explicar! y se detuvo como aquellos burros que se paran de pronto y nadie los hace caminar ni a palos, luego señalando hacia la parte de abajo de aquella calle.
- ¿Qué ves? ¡es una calle sin salida!, ¡ésta calle no lleva a ningún lado! ¡mira, es más, allá abajo no se ve más que bruma! y entonces grito, aún más histérica.
- ¿Y dónde esta ese gran bus de doble piso? ¡desapareció ésto es una locura!, yo sonreí y la tope contra mi cuerpo para consolarla estaba muy nerviosa.
- ¡Pensé que sabías de este bus! ¡es mía la culpa, el querer hacerte subir a ese bus de doble piso, sino conoces su historia o leyenda, que se yo! ¡y lo que me costó conseguir una dirección por donde éste pasara y así poder abordarlo! suspiré y de nuevo seguimos caminando, esta vez ella iba más tranquila pero a veces volteaba a ver a la nada. 

Llegamos a un lugar en donde nos sentamos y empece mi historia...
- Ese bus, es raro quien lo conoce, siéntete afortunada por saber que existe y más por haberlo visto, si hubieras subido ahora estaríamos camino a... 
- ¡Al infierno!
 Me dijo asustada por lo que acababa de oír y claro ver. Yo reí nuevamente.
- ¡No! ¡estaríamos en camino o en ese maravilloso lugar, al cual se puede llegar de dos maneras!
- ¿Ah si? ¡una en el bus de doble piso y sin chófer! ¿y la otra cuál? 
Mi vista quedo en el vació por unos segundos, como indicando algo bello que había perdido en el tiempo, no fue, sino hasta que ella me zarandeo que volví en mi
- ¿Qué? ¡Ah si, la otra es con la imaginación de un niño y como ya no lo somos no queda de otra que buscar éste bus! 
- ¡Bueno, deja que te cuente!

... En ese lugar hallaremos todo lo que de niño vivimos, nuestra inocencia, nuestra alegría, los juegos que ya no se juegan por tanta tecnología que vuelve a los niños en idiotas, campos verdes, muy verdes, lagos de agua azul y que al estar cerca de ella es cristalina, muy cristalina que puedes ver los corales, unos de miles de colores y cambian conforme la luz del sol les pega y la luz del sol, maravilla, delicia, de un cálido calor que no quema ni causa ninguna enfermedad, éste cálido calor que no te hace sudar contrasta con la brisa que desde el mar llega hasta ahí y te refresca; claro, refresca a todo el ambiente, con playas enormes de un color muy particular, me refiero a que es una especie de arco-iris que mientras sobre ella viajas, ésta cambia de color; la rodean, un desfile de cocales con palos largos y curvos, con sus hojas especiales y verdes hasta arriba que parecen introducirse entre las nubes... 

Cuentan que si subes uno, pero como lo hacen los nativos, ¿los has visto? haciendo contra peso a sus brazos y piernas y llegas hasta arriba y logras pasar esa densa nube. Ahí tienes, una vista increíble, como si salieras de la atmósfera terrestre y mucho más arriba y ahí está... ¡El mismo universo! con sus estrellas saltarinas, efecto lumínico. Algunos cuentan que han patinado sobre los anillos de Saturno y otros cuentan que han probado los sabores deliciosos de la Luna: ¡Queso del mejor!, ¡galleta dulce que sabe a gloria!, ¡la mejor de las hostias, puesta en tu boca por el mismo Dios! !estiras tu mano y logras acariciar la cabellera de algún cometa que en ese momento por ahí pase y si eres audaz y te subes en uno, te lleva a dar una vuelta de varios años, pero para ti será de pocos minutos por el interior de universo!

Y si atraviesas esa especie de muralla que forman los cocales que rodean la playa multicolor, de aquel hermoso y azul lago, me han dicho, que en ese lugar encontraras todos los juegos mecánicos que se encuentran a lo largo de todo el planeta y los que aun no se inventan, y en ese parque de diversiones, ¿te puedes imaginar?  hay un lugar muy, muy especial en donde siempre hay largas colas, hay quienes cuentan que estuvieron en la cola como cinco minutos, pero en tiempo terrestre fueron casi cincuenta años, porque todos quieren entrar en esa carpa, una enorme con banderas en sus picos, en lo alto de esa carpa, que a simple vista desde lejos ni se ve, la ves mientras te vas acercando a ella y que cuando estas enfrente te asombra de lo enorme que ella es. 
- ¿Y que hay adentro de ella? dijo la chica ya emocionada y sin miedo. 
- ¿Lo que hay ahí adentro? ¡Wao! ¿no te lo imaginas!? ¡Claro que no! ¡lo inimaginable!, al entrar, me dijeron que adentro se encontraron con todas las mascotas que de niño tuviste y las que has tenido hasta el día en que te subiste al bus de doble piso sin chófer y que ahí adentro están todos los que se han ido.
- ¿Gente muerta? dijo admirada la jovencita.
- ¡Tus antepasados, los conocidos y los que no pudiste conocer, pues por lógica!¿no?
- ¡Cuando entras ahí, no quieres salir de ahí! ¿te puedes imaginar?

- ¿Y qué más hay ahí?, ¡cuéntame! 
- ¡Pues para saberlo tendremos que subirnos a ese bus! 
- ¡Por fin lo había logrado y tu me hiciste bajar de él! le reclamé algo molesto.
- ¡Mañana vendremos y de un solo salto estaremos sobre él! ¿te parece?
- ¡Pues claro! 
- ¡Ojala y no cambien de ruta, pues lo hacen sin previo aviso y de que vuelva a enterarme del lugar en donde pasé, será casi imposible! 
- ¿Sabes cuanto tiempo llevo averiguando donde pasa ese bendito bus?
- ¡No, no sé! ¿cuántos?
- ¡Lo busco desde que tenía doce años y hasta ahora que lo encuentro y te quise llevar conmigo porque eres mi mejor amiga! Ella le acarició la mano y luego de una disculpa con mucha ternura le dijo: ¡Gracias! ¡eres buen amigo!...

Al día siguiente, mi madre me despierta.
- ¡Hijo! ¡dormilón, despierta, abajo te esperan! ¡apúrate! 
Me desperté pues sabía quien era, entonces me dí cuenta que se me habían pegado las sábanas, me vestí y baje y sí, era mi amiga, quien sonriendo y con ropa de campo me dijo. 
- ¡Vamos! 
- ¡A donde? dijo mi madre, ¡esperen el desayuno! 
Pero los dos salimos de la casa corriendo y en cuestión de minutos nos encontrábamos en el mismo lugar de ayer, sentados sobre la banqueta, pero el bus de doble piso no pasaba ya me estaba aburriendo y ella se sentía muy mal, pues me veía completamente decepcionado.

Al final de la calle, allá en la más bajo, solo se lograba ver una pared y un redondel que hacía retornar a quien en auto bajara por ella y lo llevaba de regreso. 
cuando había perdió toda esperanza, la chica gritó. 
- ¡Mira! ¡mira!
- ¿Qué? 
- ¡Mira allá abajo, la densa nube apareció! 
Efectivamente, en ese momento en que toda esperanza se había perdido, el final de esa calle se empezó a llenar de una especie de humo que fue formando a una nube muy densa, como si fuera un dulce de esos; de colores, que venden en las ferias; los algodones de dulce, hechos de azúcar... Y en ese instante que se formaba esa nube se escuchó un claxon sonar :  ¡¡Piiii!! ¡¡Piiii!! y de la esquina apareció un bus de doble piso, sin nadie que lo condujera;  nos pusimos de pie con la ansiedad en nuestros rostros y cuando el bus de doble piso pasó frente a nosotros, éste se veía transparente, pero eso no nos importó y corrimos como niños o como perros detrás de carro al lado del bus, esperando el momento indicado para de un salto abordar al bus de doble piso y en su momento, ambos brincamos y cuando en el aire estuvimos sentimos como una fuerza invisible que nos halo hacia adentro; al estar adentro; música escuchamos y fuimos recibidos por los que abordo ya iba; ahí gritaban. 
- ¡Dame un Hooo! ¡si has logrado subir al bus de doble piso! y todos respondieron 
- ¡Hoooo! ¡Hoooo! ¡Hooooo!
- ¡Éste es el bus de doble piso, que de incógnito viaja por las calles sin dejarse ver, pues no lleva chófer que lo conduzca y eso asusta a cualquiera, pero... 
- ¡Dame otro Hooooo! ¡Hoooo! ¡Hoooooo! gritaban adentro.  
- ¡Es el bus que vivió y vive en tus pensamientos pero lo olvidaste...! ¡y es de azuuuucaaarr! ¡no te lo comas! 
- ¡Dame otro Hooooo! ¡Hooooo! ¡Hoooo! ¡Dulce, dulce bus de doble piso! 

Mientras todos cantábamos esta canción íbamos bailando al ritmo contagioso y veíamos como por los costados entraban otros, como halados por el mágico bus, en el entraban niños, desde los ocho años hasta los ochenta o más tal vez y al estar adentro todos se veían de la misma edad y bailaban y gritaban, nunca dejaban de cantar la canción, pues nunca dejaban de subir al bus de doble piso.
En eso se escuchó.
- ¿Listos para entrar en el mágico mundo de tu imaginación, la que perdiste en el tiempo, simplemente por el hecho de crecer y por tanta cosa que hace morir, lo más bello que llevas adentro de ti... la imaginación y la inocencia de niño...?
- ¡¡Siiiiiiiii gritamos todos!! 

Entonces se escucho de nuevo la música pegajosa y del bus, su claxon sonó:
- ¡Piiiii! ¡Piiiiii! 
Y entonces, éste dijo:
- ¡Dame un Hoooooooo! y todos gritaron: ¡Hoooooooooo! 
Y entonces el bus se estiro como chicle de diente a dedo, era que en ese momento estabamos entrando en la densa nube y de pronto éste se soltó como cuando el chicle se revienta y te embadurna el dedo o la boca. 
Llegamos a ese maravilloso lugar de la inocencia y la imaginación. 
Y se escuchó: 
- ¡Shhhhhhhhhhhh!... ¡Dame un Hooooo! y todos gritamos:  ¡¡Hoooooooooo...!!