jueves, 30 de junio de 2016

Trabajo de Día y Noche (erotismo light)


trabajo día y noche, 
querida, en el día trabajo como burro, 
para llevar a nuestro hogar 
el sustento familiar.

Pero en la noche mi trabajo 
debe de cambiar, 
quiero una buena cena,
tomar un baño caliente,
ir a mi cama y recibir un masaje,
mejor si es uno erótico,
para concluir mi trabajo nocturno 
con el mejor de los orgasmos.

Al día siguiente, luego del matutino, 
me dirijo entre el trafico 
con ganas de que el día termine ya,
hacer mis labores diurnas, 
alimento a mi casa llevar
para que así en la noche 
alimentar a mi apetito sexual.

Y así mi rutina de trabajo.
Me deben de tener consideración 
por mi doble jornada 
trabajo de día y de noche.
Quiero renuncias al trabajo diurno 
y quedare de tiempo completo con el nocturno,
pero no me quieren indemnizar.

Tú como mi jefa nocturna
me exiges un excelente trabajo 
y hasta la fecha no te he podido defraudar,
pues aun te escucho aullar,
aun siento mi espalda castigada 
con diez uñas ensartadas
y otras veces las clavas en mis nalgas.
Di, no es un duro trabajo tener que aguantar
como esclavo medieval 
o algo más moderno, como el de los años sesentas.

Nadie se puede quejar, 
de que trabajo de noche y día todo el mes,
por la mañana cobro con cheque 
el cual al llegar todo te lo debo entregar
y por la noche, mi sueldo me lo pagas en especies.

Pero no quieres darme un aumento,
sí me exíjes, que dure un poco más,
pero no tengo mi incentivo.
Creo que voy a renunciar. 
¡Noooooooo! Ya te escuche mujer.

Trabajo como oficinista en la mañana 
y como un burro por la noche,
se invirtieron los papeles, ¿qué puedo hacer?
de todos modos me pagan lo mismo,

¿Que tal si aumentamos al personal nocturno?
y agregamos a nuestras tareas nocturnas
a tu prima que esta bien buena,
ya la tantee y esta de acuerdo en ayudar 
con algo en este hogar.

¡Ay!, ¡suéltame de ahí! 
sabes lo sensible que soy ahí
me queres trabajando día y noche 
o solo de día.

¡Ah verdad! acarícialos pues los pobres se sienten 
amagados, frótalos lentamente y si quieres 
humedecerlos un poco veras los resultados 
serán increibles, tan increibles 
que lo harás cada noche y también 
en la mañana ¡ah viciosa ya te gustó!

Hoy pediré un aumento en mi trabajo matutino,
ve pensando tú ¿cual será mi aumento?
si traes a la culona de tu prima 
ese sería un tremendo aumento 
puedes tenerla como practicante 
o a prueba un por de días,
que si no saca la tarea, la despedimos y ya.

Nada me hará más productivo 
si cuentas bien, ya tenemos 15 pelones
y contando, pero es que no me das ni vacaciones.

Mejor me las pagas 
pero necesito un respiro, un descanso,
piénsalo y al regresar de ellas 
vendré más potente, prepárate 
para tomar el horario alargado y horas extras,
ya veras que feliz estarás. 

Y sí en lugar de tú, prima mejor a mi primo,
¡Noooooooooooo!  ¡olvídalo, me sacrificaré! 

Seguiré trabajando como burro día y noche 
no tendrán queja ni tú, ni mi jefe, 
puedo hacerlo, pues la naturaleza me doto
con esa habilidad de ser esclavo del trabajo.

Me encanta trabajar para ti mi amor,
trabajaré como burro, 
de día y de noche, ¡lo prometo!


Like a Virgen


Tu pides y exiges pureza en  mi,
me revisas si tengo el sello de la pureza en mi,
lo que tu deseas no es una mujer, 
sino una virgen.

Porque tanta exigencia 
si yo no te exijo nada a ti
tú puedes entra y salir 
a tu antojo machista has de ser,
¿Di con cuantas has estado antes de mi?,
no tengo el mismo derecho de exigírtelo a ti.
Pero yo no deseo a un virgen, 
que aburrido ¿no crees?

Busco un hombre 
que me haga morir y luego revivir,
que me lleve por los caminos del placer, 
que bebamos juntos toda la miel 
que esa noche nos dé.

¿No te gustaría recibir lo mismo de mi?
a caso quieres perder el tiempo 
esperando a que aprenda y si eres mal maestro 
o yo mala estudiante, ¿qué nos esperará?

Me comparas con alguien celestial 
pero yo soy cien por cien terrestre
y mi carne procede de aquí, 
al igual que tú, tengo los mismos anhelos y deseos, 
las mismas cosquillas.

Aunque debo decir 
que las mías son más intensas
no me importa que después deberé de parir con dolor 
que hombre lo podría soportar 
y aun así me comparas con una virgen.

Lo que si te ofrezco 
como una virgen es mi alma,
te entregaré mi corazón y cuando lo hago 
es solo para amar a mi hombre
el que mi alma como una virgen eligió, 
pero de lo otro, lo carnal, no es justo. 

¿Te imaginas? 
yo como una virgen y tu como un santo,
¿qué hacemos aquí en a tierra? 
mejor regresemos al cielo y entreguémonos 
nuestro amor ahí, 
tocando arpas, tú a la diestra y yo a la siniestra.

¿Cómo una virgen? 
eso ya es tiempo pasado,
no se si sabes conjugar 
pero si es así, te equivocaste de época,
regresa y que te reenvíen a esa época 
en donde era lo mismo pero a escondidas 
de una sociedad hipócrita.

No te mientas 
vírgenes ni en el reino animal 
y eso que ellas traen su propio reloj 
que les indica cuando hacerlo y con quien, 
con el mejor, el más fuerte, asi es el reino animal.

Si fuéramos iguales perderías 
pues yo solo buscaría al mejor 
al mas guapo, al mas fuerte y tú, ¡enclenque! 
nunca probarías de las mieles de la vida en pareja
porque nadie te haría caso ni por accidente.

Por eso, cambia tu mente 
y acéptame, yo te quiero a ti,
pero no quiero ser tu virgen 
para que me coloques en un altar
y no me puedas tocar. 
¿Qué hago yo aquí y tu ahí? ¡solo viéndome!
Para no mancillar mi piel
que te desea mucho más que tú a mi.

Piénsalo y si razonas y lo entiendes
ven por mi, la noche que nos espera 
es para compartirla, disfrutarla y gozarla 
no dejar ni una sola gota de placer de lado 
todas serán succionadas y saboreadas, nada mejor.

Para nuestra luna de miel en la tierra 
cuerpos disfrutando lo que les pertenece 
y en el cielo musica celestial, 
fiesta por dos almas que se hallaron y se amaron,
¿entiendes la diferencia, que una complementa a la otra?

¡Cómo una virgen! 
eso ya quedó en la inquisición, ¡modernízate!,
pero sin perder la brújula, 
a la carne lo que le pertenece 
y al alama lo que es de ella 
y asi felices por siempre seremos 
llegaremos a viejos, 
ancianos aun amándose, no jóvenes divorciándose.





Suspicion minds


Siempre me pregunté ¿por que nos miran así?...

Empiezan en nuestros pies y siguen subiendo, 
hasta llegar a nuestra cabeza,
luego regresan su mirada y la fijan en la nuestra
dejándola ahí, siempre fija y por unos segundos 
para después de vernos con desprecio 
quitan su mirada de golpe. ¡Y te ignoran!

Y si se encuentran en grupo, 
el cacareo de las gallinas no es nada,
luego de hablar y hablar, 
nos vuelven a ver de la misma manera,
para luego quitar la mirada fría 
de encima nuestro, dar la vuelta e ignorarnos.

Pero si es al revés y somos un grupo de chicos
y la vemos venir sola, preparamos 
nuestros mejores piropos, 
ella sigue su andar sin claudicar y como si nada, 
entre nosotros pasa, escuchando solo cosas lindas 
ella sonríe y ve a quien le interesa nada más.
Pero algo si no pueden evitar y ocultar 
a pesar de que se ven tan seguras de sí;
y es su andar las que las delata 
un paso largo, otro corto, sienten como si no avanzan,
sienten como si no caminan, como si al suelo caerán,
como si se les hunde el piso, 
sienten que no caminan y no avanzan

¡Ahora lo sé!
Son seres inteligentes, pues la naturaleza las dotó
de una mente perspicaz, una mente sospechosa,
que sabe perfectamente como dominar al macho.
¡Ese es su secreto! ¡yo lo descubrí!
Más bien, alguien que me amó mucho, 
en demasía diría hoy, me lo confesó 
y mucho tiempo después lo confirme, 
si que lo comprobé.

¡Mentes suspicaces! ¡Mentes sospechosas!
Se hacen las victimas, pero solo es una de sus tantas trampas,
otra, dejan salir de sus bellos ojos, 
lagrimas, pero estas ni saladas son, pues solo son de utilería, 
de cocodrilo las han llamado ellas mismas.
Mentes suspicaces, en cuerpos perfectos, 
de cabelleras al aire, caminar depredador 
sonrisa misteriosa como la Gioconda.
Da Vinci lo sabía, a genio; 
por ello nos dejó la pista con su maravillosa pintura.

No me sorprende, pues con una simple sonrisa nos desarman, 
mentes sospechosas, suspicaces e inteligentes, 
dignas del más grande general en plena batalla.
Que manda primero a sus peones 
luego a su artillería, entre ellos a sus arqueros 
y para finalizar y acabar con el contrincante,
manda su caballería. 
Al final, coloca su bandera que indica que ya eres de su propiedad;
esto es el equivalente a la orina con que marcan su territorio,
animales territoriales, pero mucho mas bellos e inteligentes.

Date cuenta; que bruto soy, con quien  las comparo,
pero no te ofendas, es mas bien un alago 
de lo que sus maravillosas y maquiavélicas mentes 
hacen con nosotros, pobres e indefensos terrícolas.

Mentes sospechosas, suspicaces mentes,
ojos increíblemente persuasivos y sugestivos,
ademanes que nos enloquecen; ¡malas han de ser!
cruce de piernas, una practica muy usual y generalizada,
mordisco del labio inferior y lamerse el dedo indice
o frotarlo sobre el cristal, botones desabotonados
dejando a la vista su mejor armamento.

Y cuando te hablan, sonidos del mismo cielo oyes
¿dime qué puedo hacer? ¡nada!
Y si hablo de su andar, ¡Dios mío! 
Caída de caderas a diestra y siniestra, 
cabellera suelta para que juegue con el viento 
y este nos lleve el olor a sus feromonas,
piernas super depiladas y muy bien trabajadas 
para tener pizadas de fuego en cada paso.

Y si ves sus pies, que te digo, si nada tiene error en ellas 
todo es perfecto. ¡Ah mentes suspicaces, Ah mentes sospechosas! 

¡Ahora ya lo sé!
Así que tengan cuidado, que a partir de este escrito
su secreto, ese guardado por siglos 
a quedado develado, a quedado al descubierto.
A ver con que nuevas armas nos salen ahora,
pues si hay algo que no podremos cambiar
son: Sus mentes suspicaces y sospechosas.

Y sin embargo, aun así, conociendo sus secretos, ¡creo que aun asi las amo!

El BMW (El Princesita)


Tendría como diecisiete años y nuestro punto de reunión, con o sin amigos, era el único lugar de aquella época dorada en mi querido y amado país, me refiero a la zona uno, específicamente, la sexta avenida, nuestro centro de comercio, lugar en donde se centralizaba el mejor comercio de nuestro país como ya lo he contado en otras historias. 

Pues, me baje del transporte publico que me llevó hasta ahí, uno que costaba quince centavos de dolar, pues nuestra moneda valía más que el dolar, me encaminé hasta el parque central para iniciar mi caminata por toda la avenida y no perderme de nada, así que empece mi incursión justo en el Portal del Comercio, ya era costumbre mía pasar a la Plaza Vivar, subir al segundo nivel y apostarme en su balcón y desde ahí observar a las hermosas chicas de la época que no faltaban día a día.  Llevaría como una media hora ahí disfrutando de la paz y la vista cuando observé que a unos cincuenta metros de mi balcón se encontraba mi a migo Jacobo, vitrineando, me baje muy aprisa para que no se me fuera a perder entre tanta gente de todas las clases sociales, he de contar que en esos años no había discriminación entre clases sociales y si la había, no era tan marcada como lo es hoy día y además, no había necesidad de ir al norte de compras pues, como dije, acá era más barato y era lo mismo. Bueno, podrías estar en un comercio esperando tu producto y al lado tuyo una personalidad de dinero, mil a uno a la par tuya. -pero esa es otra historia-.

Llegue al lugar en donde vitrineaba mi amigo de colegio, Jacobo y lo abordé con un saludo, el habitual en esos días.
_ ¡Hola vos! ¿qué haces?
_ Solo viendo vitrinas ¿y vos?
_ También, ¡jejeje!
_ ¿Nos damos una sexteada? Era la expresión utilizada para recorrer toda la avenida de aproximadamente diez calles. 

Ya eran como las cinco, cuando nos dirigimos con dirección a la dieciocho calle por una de las banquetas, para cuando volvimos, ya eran como las seis y media, la hora de restricción para parquear en ella se había levantado hace una media hora y en la avenida los mejores carros y otros no tan lujosos, pero eso sí, todos comprados de agencia, pues eso de carro rodado o reciclado ni idea, ni soñarlo, eran más baratos los carros aquí que allá -¡jajaja!-

_ ¡Mira quien esta recostado en esa nave! 

Me dijo Jacobo, se trataba del Princesita, apodo ganado por ser tan fino en todo el sentido de la palabra, amigo de mi hermano mayor y catedrático en el colegio donde estudiábamos.

_ ¿Sera de él esa nave vos?
_ Mira ¡es un BMW! y al colegio llega en un Datsun, seguro esta recostado en él solo para chilerear. Me dijo convencido el Jacobo.
_ Vamos a chingarlo y de paso chilereamos tambien nosotros.
_ Vamos pues. 

Dijo Jacobo y nos atravesamos la calle, mientras avanzábamos yo observaba al Princesita; ropa de marca, lentes de marca, zapatillas Italianas y sobre sus hombros una sudadera muy fina; en fin, Princesita era un cromo ambulante, un comercial de televisión y es que había que darle su puesto y el tipo era bien parecido, un galanazo, creído tambien y mucho.

_ ¿Qué onda vos? 

Le dije, pues aunque era nuestro maestro, tambien era nuestro amigo y en la calle y fuera de horario de colegio él no era nuestro maestro sino nuestro amigo.

_ ¿Qué onda vos Pancho? -me decía de apodo- ¿y Chupina?, -ese era el apodo de mi hermano-.
_ Pues, ¿no sé?, debe andar o chupando o chingando algunas viejas con el Palmita. -Otro amigo, quien tuvo cáncer, pero no murió de esa enfermedad sino que lo mataron, ya conté su  historia tambien- A Jacobo, no recuerdo como le decía; el condenado nos tenía apodo a todos. Jacobo le preguntó.

_ Y ¿vos qué? chilereando en esa nave que sabe Dios de quien es. Eso dijo Jacobo, a lo cual Princesita solo se sonrió, como ignorando al ignorante, pero fue Chupina, mi hermano quien respondió.

_ Esa nave es de este hueco. 

Y lo abrazó por la espalda, lo usa para levantarse alguna incauta, ¿verdad Princesita león? 

Y ellos rieron. Mi hermano quien casualmente andaba de compras por ahí y nos vio.

_ ¿Qué haces Chupina? ¿quebrándole el culo a alguien? 

Dijo Princesita con la seriedad que lo caracterizaba, pero era  un chingonazo y es que el tal Chupina era el director de la policía en esa época.

_ ¡Está calidad tu BMW!, deberías de llevarlo un día al colegio para dar chile. 
_ No vos, ahi me lo chingan estos huecos, patojos de mierda. 

Refiriéndose a nosotros y al resto de alumnado del colegio y era cierto, pues para envidias no hay respeto, ni recato.
Entonces, Chupina nos pidió lo acompañáramos a una tienda de pantalones que quedaba al frente, cruzando la calle en donde nos encontrábamos y asi lo hicimos. Cuando entramos en la tienda las vendedoras se dejaron ir como si hubiera entrado el artista del momento y todo por el Princesita y bueno, tampoco nosotros estábamos tan mal, pero bueno, luego mi hermano se probó lo que compró y nos retiramos; al dorso de la factura dos nombres y un número de teléfono, Chupina se lo enseño a Princesita y este dijo.

_ Están muy gachas las de ese almacén vos, yo no gasto pólvora en zanates. Eso dijo el creído del Princesita mientras que en nuestro adentro; Jacobo y yo, dijimos - ¿Gachas? ¡están buenotas! pero bueno, el teléfono jamas nos lo darían los envidiosos y aunque nos lo dieran las chicas eran mayores a nosotros dos y seguro querían con el Princesita.
Al retornar al BMW, dijo Jacobo con su característico tono de burla.

_ ¡Te clavaron una multa Princesita! Y se rió. Princesita tomó el papel con la caquería que lo identificaba y al tomarlo se lo enseño a Chupina y este dijo.

_ ¿De qué almacén serán vos?
_ Pues ahí dice el nombre ¿no?

El papel decía: Somos las chicas del Almacén El Cisne, salimos a las siete por si quieren llevarnos a bailar y a tomar algo y lo firmaban cuatro chavas. Jacobo dijo. 

_ ¡Allá esta el almacén! 

Efectivamente, a unos veinte metros del BMW se encontraba el almacén; - ¡qué barbaras! pensé, seguramente hace rato nos tienen en la mira. Entonces dijo el Princesita.

_ Que esperen estos aquí mientras Chupina y yo vamos a ver la mercancía. Agregó Chupina.
_ ¡Cuiden el carro mucha!
_ ¡A mi huevo! 

Dijimos con Jacobo y nos fuimos detrás de ellos hasta que llegamos al almacén El Cisne.
Princesita preguntó.
_ Perdón señoritas, ¿quien es...? Y mencionó los nombres de las firmantes. Sin titubear ni mucho menos, salieron al frente cuatro bellezas, mucho mejores que las anteriores y eso ya era palabra mayor.

_ Bueno -Dijo el Princesita-, las esperamos en mi carro hasta que salgan.

Y regresamos al BMW, Jacobo y yo, nos vimos a la cara y en ambas había una felicidad incalculable y un brillo que ni bulbo de leds en la actualidad.
Llegaron las siete y nosotros ahí, estoicos aguantando frió, esperando a nuestras damiselas, las cuales llegaron a las siete con quince. Cuando llegaron el Princesita les abrió la puerta de su BMW y las entró, luego se metió mi hermano y el Princesita, desde su puerta y aun sin entrar, nos dijo,

_ Ustedes, par de huecos, los veo mañana en el colegio y no se vayan tarde par de niñas.  
_ ¡Jajajaja!

Y se subió a su nave, el BMW y nosotros ahí quedamos, solo viéndole las luces rojas de sus stops perderse por la inolvidable Sexta Avenida de la Zona Uno. 

¡Ay Jalisco no te rajes! (las canciones de mi vida)


Salieron de sus ranchos dos entrañables amigos vistiendo con sus mejores galas, pues esa noche inauguraban la feria del pueblo; se treparon a sus corceles, unos caballos muy briosos, en uno de color negro y crines largas, iba uno de los dos amigos, en el otro, uno alazán con pecho y cascos blancos; colocaron en sus cinturas sus pistolas y se hicieron al monte, el viaje sería de varias horas, pasando por lindos parajes, montañas y barrancas, para llegar a la ciudad y su feria patronal, uno de los dos, era soltero, pero con ganas de encontrar una linda hembra como la que había encontrado su amigo de la infancia. Mientras caminaban en los polvorientos caminitos cantaban algunos corridos, uno llevaba la primera mientras que el otro le hacia la segunda. Por otros ratos, solo se escuchaban los cascos de los caballos uno siempre a la par del otro, para luego seguir con sus charlas de hombres jóvenes; pero cuando se encontraban una planicie se retaban a una carrera, peo siempre llegaban al tiempo; al llegar a un riachuelo de agua muy clara se apearon para refrescar a sus enormes y bellos caballos de pura sangre.

_ ¡Mira mi hermano allá se ven ya las luces de la feria! Dijo el soltero y sin compromiso 
-agregó- Esta noche me discutiré a una buena y bonita hembra mi hermano.
_ No olvides de que aquí se quiere a la buena, porque es peligroso querer a la mala mi hermano.
_ Esas son puras babosadas que alguien se inventó, yo no creo esas historias de abuelos o de algún padre celoso que luego regó la casaca para que no le chinguen a sus hijas. ¡Jajajaja!
_ Bueno, tu sabrás yo tendría cuidado, pues cuando el rio suena es por que piedras trae mi hermano.
_ Pues si tare piedras no hay problema, ojala no traigan balas, ¡porque mira! Dijo tocándose su pistola en la cintura. -y volvió a reír-   ¡Jajajaja!

La tonica de la platica ya no vario por parte del soltero de nombre Jorge, quien era un hombre muy macho de donde eran oriundos y en aquel lugar ya muchas señoritas lloraban sus traiciones; no así, la de su amigo Jalisco que le era muy fiel a su bella novia que vivia justo a la entrada del pueblo.

_ ¡Mira Jalisco! ahí viene quien te trae de un ala. ¡Hola Guadalajara!
_ ¡Hola muchachos! Dijo la muchacha más bonita, como si se tratara de una perla muy rara en todo Guanajuato, lugar en donde se llevaba a cabo la inauguración de la feria patronal.
_ Oye Jorge, ten mucho cuidado con las muchachas de aquí, pues ahora hay muchos valentones tomando aguardiente y si no te pones serio con ellas, corres el riesgo de que te den una buena si es que tienes suerte. ¿Verdad Jalisco! 
_ Eso ya se lo advertí, pero ya conoces como es mi hermano, si ve una morena hermosa, detrás de ella a cantarle hasta en Chapala si es necesario.
_ ¡Ay Jalisco no te rajes! Le grito Jorge y le metió los espuelas a su alazán y se adelantó hasta la cantina mas famosa del lugar, quedandose solos, Jalisco y Guadalajara, quienes se tomaron de la mano, si que se les veía lo enamorados a los dos.

Pasó la inauguración y empezó la diversión en Guanajuato; mientras Jalisco y Guadalajara paseaban por el parque tomándose un sorbete y subiéndose a todas los juegos mecánicas, jugar lotería y buscar el momento para besar los labios exóticos de Guadalajara. 

_ ¡Oye Jalisco! ¿no es Jorge quien esta cantando en la cantina?
_ Seguro que si. 
_ ¡Vamos mi amor! 
_ Pues si quieres vamos, debe estar chupando con los valentones, pues, él es uno de ellos. 

La pareja se dirigió para la cantina, la mejor de Guanajuato, entraron ahí los amigos de Jorge y este en medio de los mariachis cantando a todo pulmón. Y sí, justo en la mesa de los valentones y pistoleros del pueblo.

_ ¡Arriba Jalisco! Dijo Jorge cuando entró su hermano del brazo de Guadalajara. Ellos lo saludaron y buscaron una mesa para tomarse algo y escuchar cantar a Jorge, quien tenía un vozarrón envidiable y muy atractivo para todas las mujeres, las más hermosas del lugar.

Cuando ya habría pasado de la media noche, entró en la cantina una hembra de lo más bella casi tan linda como Guadalajara, Jorge al verla se puso de pie y se dirigió hasta donde ella estaba y de inmediato le ofreció un tequila, la hembra guapísima la aceptó de inmediato, pues se dio cuenta lo atractivo que era Jorge, éste, luego de empinar sus caballitos llenos de tequila la tomo de la cintura y se pusieron a bailar en la cantina, uno de los valentones de la mesa de donde se levantó Jorge se percato que se trataba de su hija, lo cual le molesto, pues conocía los alcances de jorge con las mujeres. 

_ ¡Este desgraciado!, que no le vaya a jugar mal a mi hija o me lo quiebro. 

Dijo el hombre ya muy tomado. 
_ Tranquilo Pedro. Dijo uno de los acompañantes. 
_ ¡Sí hombre! -Dijo Alfredo- mejor tomate otra. ¡salud!

Sonaron los vasos y sin tomar aire se pasaron el tequila, el cual ya no les raspaba el gaznate.

_ Bueno Jorge gracias por la pieza y el tequila, pero solo vine a escuchar como cantas de lindo, pero ¿vez al que esta en la mesa junto a Jalisco y Guadalajara? es mi novio, ademas mi papá esta ya muy tomado y es algo loco con el tequila en su sangre, ¡gracias! 

Dijo Lola y se despidió de beso en la mejía con Jorge, quien después de ello se dirigió a la mesa de los valentones con pistolón en el cinto.

Sería como las dos y media de la madrugada, cuando Guadalajara le pidió a Jalisco que la llevara a su casa, pues se sentía cansada y quería estar bien para el día de mañana. Jalisco se dispuso a acompañar a su morena bella, no sin antes gritar a Jorge que pronto volvía, pero Jorge se puso de pie y llegó hasta donde estaban sus amigos y hermano.

_ ¡Feliz noche preciosa! nos vemos hoy por la noche. -refiriéndose al otro día, que ya era- 
_ Claro que si y tú deberías de ir a dormir, ya estas muy tomado. Le dijo Guadalajara a Jorge pero Jorge solo soltó la carcajada.

Se fueron del lugar los dos enamorados; Jalisco y Guadalajara; no habrían caminado más de dos cuadras cuando se escucharon de la cantina dos plomazos; Guadalajara dijo. 

_ ¡Que bueno que nos venimos! pues ya están plomaseando la cantina, eso no me gusta. 
_ ¿Sí no? 

Dijo Jalisco no muy convencido y en su pecho presintió algo muy malo. Luego de dejar a su novia en su casa, Jalisco regresó casi corriendo a la cantina y al entrar en ella lo que presintió sobre un mesón, el cuerpo de Jorge sin vida.

_ ¡Hermano! ¿qué pasó? 

Pero no escuchó respuesta de su hermano y como loco les preguntó a los que estaban ahí de mirones. 

_ Fue don Pedro. 
_ Se puso como loco y gritó a mi hija Lola la respetas desgraciado y le dejo ir dos pepazos, el cardinero tomó del brazo a Jalisco, pues ya sabía lo que se les venía esa noche. 

Pero otro de los valentones y borracho, precisamente, Alfredo grito.

_ ¡Ay Jalisco no te rajes! mataron a tu hermano, tienes que vengar su muerte. 

Jalisco revisó su arma y salio a donde vive el perpetuador de la muerte de su hermano y afuera como si se tratara de un gallo, pues detrás de Jalisco los mariachis y el resto de bolos de la cantina, entre ellos, el cantinero, Lola, Alfredo tambien. Alfredo le dijo a Jalisco.

_ ¡Jalisco no te rajes! ¡Ay Ay Aaaayy!  Grito Alfredo.
_ ¡Sal de ahí asesino de Jorge, no seas cobarde vos Pedro! Eso dijo tambien Alfredo. 

De la casa de Pedro, salio este con pistola en mano y gritando. 

_ ¡Yo no me rajo y tú Jalisco vete a la mierda solo defendí el honor de mi hija Lola, por eso mate al desgraciado de Jorge!
_ Mira Pedro, tú ya ni sabes de lo que hablas, asi que yo soy Jalisco y ¡Jalisco nunca se raja! ¡Prepárese para morir Don Pedro!

Y cuando termino de decir eso Jalisco sonaron dos plomazos, Jalisco vio como sangró su brazo izquierdo, pero don Pedro no tuvo la misma suerte, pues el pepazo lo recibió justo en la frente y tirado ahí quedo en la entrada de su casa.
Jalisco volteo hacia el publico que lo rodeaba y grito. 

_ ¿Alguien más que quiere meterse con Jalisco?
_ Pues ya me conocen y saben muy bien que ¡Jalisco no se raja...! 

Todos bajaron sus cabezas y uno a uno se fue del lugar, dejando ahí el cadáver de don Pedro. 

Las autoridades que conocen las leyes particulares que gobiernan a Guanajuato, dijeron en su reporte; que Jalisco mató a Pedro en defensa propia y que nadie pedía nada en su contra, que habían muchos testigos que atestiguarían a favor de Jalisco, asi quedó todo solucionado. 

Entonces dispusieron que Ahora el lugar se llamaría Jalisco, porque ahí se quiere a la buena, porque es peligroso querer a la mala, por una morena echar mucha bala. 
Y ademas acuñaron la frase siguiente:    ¡Ay Jalisco no te rajes! 
Paro esto se llevó mucho tiempo, pero al fin se logró.


                                                 El Fin




Inspirado en la cancion: Jalisco no te rajes de Ernesto Cortázar y Manuel Esperón Gonzalez
Historia de : E. Cortázar; M. Esperón y S. raga

miércoles, 29 de junio de 2016

Abrazos


Cuando recibo un abrazo,
deseo sea con agrado, que sea muy cálido,
con gotas de amistad y si son con amor, 
mucho mejor será el abrazo.

Que sea honesto, 
como el de un hermano, como el de un amigo, 
pero si es de un hijo,
mucho mejor será el abrazo.

Si viene de alguien que hace mucho no ves, 
sincero es, si viene de alguien que te guardo estima, 
caluroso será. 
Pero si viene de tu perro, mucho mejor será el abrazo.

Si es tímido abrazo, 
separado quedaran nuestros cuerpos,
si es confianzudo, 
sentirás que te derrites en sus brazos.
Y si ese abrazo llega de alguien que amas
mucho mejor será el abrazo.

Mi primer abrazo, 
fue de mi madre y el segundo de mi padre,
luego llegó el tuyo y en mi corazón guardado quedó,
mucho mejor fue el abrazo, pues todavía lo abrazo.

Abrazos en el día, abrazos al medio día, abrazos en la noche...
Mucho mejor será el abrazo.

Recibir un abrazo 
para el cumpleaños es algo hermoso,
saber que eres importante para alguien más.
Recibir un abrazo 
por el éxito alcanzado, cuidado podría ser uno sin valor, 
engañoso, falso, vanidoso... Envidioso será el abrazo.

Pero el que recibes en navidad 
esta lleno de amor, sea quien sea, 
debo recíbelo bien, 
pues llegará lleno de amor y paz 
porque vine del cielo, por ser el cumpleaños
de quien nos dio la paz.
Bello y bendecido será ese abrazo.

Pero el mejor, 
el más gratificante de todos los abrazos,
es uno que se da en la oscuridad 
de un cuarto de paso o el de tu casa, 
a media noche o justo al amanecer,
pues viene acompañado de caricias y besos miles
de cuerpos desnudos y sudados, 
llenos de pasión y a veces llenos de amor tambien. 

Nunca habrá otro abrazo mejor, 
cuerpos pegados, sintiendo caricias 
y cosquillas internas, sentirás que no duró mucho, 
pero es porque fue el mejor de los abrazos
y son adictivos, porque luego querrás otro. 
Nada será mejor que el abrazo de un amante.
Ese es el más grande y maravillosos de los abrazos.

Nunca rechaces uno, 
pues nunca se sabe cuando te ofrecerán otro, 
nunca te olvides de agradecerlo 
para que pronto llegue el siguiente.

No seas tacaño y abraza a quien puedas, 
no temas, no te robaran el alma,
si mucho se llevarán un suspiro y el mejor recuerdo de ti...

Que daría hoy que escribo esto, 
por darte el mejor de mis abrazos.
Recíbelo a través de nuestra única conexión.
Que mucho mejor será el abrazo.

SergioRaga 
29/6/16

martes, 28 de junio de 2016

Caballo viejo (Las canciones de mi vida)


Me encontraba en mi tienda de electrónicos, cuando Erick me llama. - ¡Ingeniero quieren consultarlo!
Salí de mi laboratorio técnico y efectivamente un hombre maduro se encontraba en la puerta de mi negocio como esperando a alguien, que me tocó llegar hasta donde él se encontraba esperando por mi.

_ ¡Buenas! diga: ¿En qué le puedo servir señor? 

El hombre maduro me vio y me dijo con la extrañeza dibujada en su rostro.

_ ¿Es usted el Ingeniero?
_ Para servirlo amigo.

Entonces ya aclarada su duda me indicó sus dudas referentes a un aparato que le daba ciertas molestias en su casa, mientras él me informaba del problema yo iba respondiéndole sus dudas, hasta que por fin le convencí que sí era el ingeniero en electrónica que el necesitaba.


_ ¡Sí sabe amigo!, ¿entonces es cierto que es ingeniero en electrónica?
_ Pues, eso dice en mi titulo universitario. Le respondí un poco molesto, pero luego mejor nos reímos.
Entonces se acercó al señor una ancianita quien le dijo al verlo frente a mi tienda de electrónicos.

_ ¿Aquí estas?, ¿me esperas?, voy para allá, pues olvide comprar algo, ya vuelvo, no te muevas de aquí. Eso dijo la anciana mujer y con caminar lerdo siguió su andar en busca de lo que había olvidado. 

_ Dale viejita, aquí te espero, sigo hablando con el ingeniero. Dijo ya convencido, yo sonreí y pensé. 
_ ¡Vaya! ¡al fin! Ni que fuera un anciano, pues ellos si que son desconfiados hasta no más. 

Entonces para retomar la platica, cometí la peor de las indiscreciones que habré cometido con un cliente.

_ ¡Su madrecita?
_ ¡No! ¡Mi esposa! Dijo el señor y al decirlo hasta se irguió aun más y si que era alto el señor, luego de acomodar sus bigotes muy bien recortados y encanados. Dijo.

_ ¿Cuántos años me calcula ingeniero? Me dejo ir la pregunta, a estas alturas un poco dificil de responder, pues el señor no se veía tan viejo como la que era su amada esposa. Pero me arriesgué y le dije.

_ Pues... ¿65? El señor respiro profundo y se subió sus bermudas y con orgullo me corrigió.
_ Tengo 85, Ingeniero. Admirado dije en mis adentros una expresión mexicana: ¡No mames!
_ ¿85 dijo? ¡Oiga! ¡diga la formula! pues de verdad que no parece tener esa edad amigo, lo felicito, si que se ha conservado muy bien.

Don Julián se veía como de 65 años en realidad; Don Julián tenía su cabellera sedosa y larga como adolescente que se la cuida más que una mujer, en su rostro no encontré una sola arruga, sí le brillaba, pues la llevaba con algún tipo de crema o filtro solar, de él, se sentía el olor de una loción muy cara, cómo llevaba pantalones cortos vi sus piernas, muy bien trabajadas con unos camotes que me dio envidia y sus bíceps eran enormes que yo mejor baje las mangas de mi camisa que las llevaba arremangadas... La tradicional barriga de hombre viejo, flácida y enorme, nada, aquello era un lavadero y lo cubría una camiseta juvenil y fina y sobre sus cabelleras largas una fina gorra de los Yanquis que la compró allá en uno de sus viajes. Debajo de sus lentes Ray Ban con cola de ratón, indicador de que usaba bicicleta o motocicleta, unos ojos azules que me encantaron, sin cataratas; más yo, un pterigión tan rojo como mi sangre. Ese era el anciano de 85 años, a quien me costo convencer de que yo era un titulado universitario en Ingeniería electrónica.

_ Bueno Don Julián, ¿me dirá cual es su secreto o no? Le insistí, pues sentía que volvía la anciana y se llevaba el secreto de la juventud que estaba frente a mi.

_ ¿Mi secreto ingeniero? -y suspiro- se cayó por unos segundos como pensando si me confesaba o no su secreto, me vio a los ojos luego de extraer sus lentes y me confió su secreto...
_ ¡El sexo ingeniero!
_ ¿El sexo?... ¿Con la ancianita? Sin querer se me escapó, pero me disculpe de inmediato. 
_ ¡Perdón Don Julian por mi exaltación! pero no puedo imaginar a su esposa con usted en eso. 

Don Julian río y aceptó mis disculpas y extrajo de su bolsa su billetera y de ella una fotografía 

_ ¿Su hija? ¡muy bella!  -le dije- esta vez con respeto para no meter las patas otra vez, pero las volví a meter.
_ ¡Ella no es mi hija! mis hijas ya son abuelas... Esta chica es mi secreto ingeniero... El sexo con esta chica es lo que me tiene así, ella me compra mis cremas, mis lociones y me viste; además me da una experiencia sexual y de convivencia que nunca la vida me dio. Pero me la vino a dar ya en el ocaso de mi vida. Ya puedo morir ingeniero que moriré feliz, y ¿sabe algo? es la única vez que le soy infiel a mi viejita desde que nos conocimos. Pero ¿diga usted ingeniero? 
_ ¿Qué haría usted si le ponen a una potra alazana así en bandeja? ¿dígame si no se vuelve en un caballo que le dan sabana y su corazón amarrado suelta la rienda y se desboca detrás de esa potra alazana? Cómo dice esa canción o algo así. Me dijo Don Julián.

_ Y, ¿qué edad tiene su benefactora Don Julian?
_ ¿Mi Potra Alazana? ¡tiene 30 años ingeniero! Y me devolvió la vida, ¡ese es mi secreto amigo! _ ¡Mire! ahí viene mi esposa, lo dejo. 

Se dirigió al encuentro de su amada y anciana esposa y se fue con ella. Ya no supe más de aquel Caballo Viejo que llevaba una vida más excitante que la mía con menos de la mitad de su edad.
Corrí a mi auto y saque un Cd, lo introduje en el equipo de sonido que recien reparaba y le di play a la canción: "Caballo Viejo" compuesta por quien en vida fuera el Venezolano: Don Simón Díaz. Y al lado del cantante, la cante con sentimiento y motivación.

"Quererse no tiene horario ni fecha en el calendario cuando las ganas se juntan... Caballo viejo te dan sabana y si una potra alazana porque estas viejo y cansado... y si una potra alazana se encuentra, el pecho se le desgrana y no obedece a un freno y nada lo detiene..." 


Basada en una historia real. Inspirada en la canción: Caballo viejo, de: Don Simón Díaz.







You can do magic


Puedes hacer magia en mi
solamente tienes que verme y sonreír
¿ves como haces magia en mi?
me has convertido de hombre infeliz en feliz.

Simplemente con una mágica sonrisa
produces en mi existencia mágicas sensaciones.

Como el enrojecimiento en mi piel,
un vacío delicioso en mi abdomen,
cambias de ritmo mi respiracion 
y a mi corazón lo pones a latir a mil.

No lo sabes pero haces magia en mi 
me ves, me sonríes, eso ya es suficiente 
para cambiar mi forma de ver la vida,
pero ademas, si te acercas un poco 
y de ti escucho la mejor de las melodías de amor (tu voz)
te aseguro que en ese momento me elevo al cielo 
y navego entre ríos de aterciopeladas nubes 
de miles de colores.

Ahora que me ves y ademas me sonríes 
y ¿cómo te atreves?, a acercarte unos metros a mi,
sin saberlo me haces sucumbir, pero no puedo morir.

Porque lo que siento en mi cuerpo 
y mi alma es solamente la magia 
que produces en todo mi ser.

No des un paso más, 
porque corro riesgo de no sobrevivir.

Una droga es tu presencia para mi 
y si te pruebo tendré que seguir probando 
a tu rica piel por el resto de mi vida. 
¡Sí que puedes hacer magia en mi!

Ahora estas frente a mi 
y no siento a mi cuerpo, soy alma flotante,
has hecho de nuevo magia en mi.

Maravillado estoy y tú sin saberlo
que puedes hacer magia conmigo 
que pronto seré un conejo y tu mi encantadora 
que me llevará a un lugar de maravillas mil.

Un día llegaste y te vi, 
lo supe, lo presentí, me dije: 
Esa chica puede hacer magia en mi y no lo sabe. 

Hoy que estas a centímetros de mi 
presta a besar mis labios y yo aun alma flotante.

Pero sigo fiel aquí, de cuerpo presente para ti, 
pero la realidad, es que yo sigo aquí arriba
flotando entre ríos de nubes de mil colores. 

Besas mis labios 
y me transportas hasta la estratosfera 
ahora viajo entre ríos de estrellas. 
¡Mira que linda la luna llena! 
¿Será de queso o será de plata?

Puedo sentir en mi 
toda la magia que viene de ti
y la siento entrar en mi, 
cambias mi color de rojo por azul
y mis venas llevan hasta mi corazón 
ese raro color de la realeza.

Al sentir un diástole y luego un sístole, 
me siento como un rey y tú mi princesa eres, 
pero pronto mi reina que me acompañará 
en mi trono, es mi deseo. 

Pero sigo aquí, levitando 
y tú me sigues aun besando.

Puedes hacer magia 
y aun no lo sabes, me tienes hechizado, 
viajo entre nubes de mil colores, 
entre estrellas de mil colores 
y ahora se que la luna es de queso 
y que tambien esta bañada en plata.

Puedes hacer magia en mi, 
has hecho magia en mi.

Y, tú sigues besándome aún sin saberlo.
¿Te lo digo...? ¡No! Mejor sigo flotando aquí.

Me encanta tu magia, 
sigue haciendo magia en mi 
haz de mi vida la mejor, 
solamente no dejes de besar mis labios
y nunca pares de amarme, 
que yo no lo haré. ¡Lo prometo!

Guardaré para siempre tu secreto 
y tú sigue sin saberlo haciendo magia en mi.






El Amor es Magico


El amor es mágico, esa es la verdad.
Verdad que antes no creí, pero era verdad.
Tuvo un costo el no creer esa verdad
y es que nada es más mágico que el amor, 
esa es la pura verdad.

El amor es mágico, esa es la verdad.
Es, como cuando vas por la calle
y ves parado en un parque a un tipo
con indumentaria especial, 
la curiosidad te llama la atención 
y te lleva hasta él, lo que ves en él es:
Una agradable sonrisa, manos habilidosas 
y una facilidad verbal; quedas atrapada en él,
en ese tipo de magia y presencias como publico
la magia del mago.

El amor es mágico, es la verdad.
Te cautiva su sonrisa, te intriga su mirada,
te atraen sus palabras, 
has quedado atrapada en su magia;
cuando el show termina te alejas 
pero contigo te has llevado la magia:
Su sonrisa cautivadora, su intrigante mirada, 
sus atrayentes palabras y la habilidad 
que tiene en sus manso, sus trucos, su magia.

El amor es mágico, es la verdad.
Cuando te llega la magia que tiene el amor,
esta llega a tu corazón, de igual manera
esa es la verdad:
Su atractiva sonrisa, su enigmática mirada
que no te deja ni un segundo sin mirar;
se acerca a ti y escuchas la facilidad que tiene para hablar:
Con tono sereno y pausado. 

Empiezas a caer en su magia, entonces entra a escena:
La habilidad que tiene en sus manos
y un solo roce de su piel sobre la tuya
produce una revolución en tu abdomen y una
agitación en tu respirar y taquicardia en el corazón.
Mujer, la magia entró en tí, esa es la verdad.

El amor es mágico, es la verdad.
Te llevas contigo a donde vayas su recuerdo,
su sonrisa que te encantó, su mirada que te enamoró,
su labia que en tu alma penetró y en la piel y tu corazón
la emoción que te causó un simple roce de su piel.

Brujería, encantamiento, o simplemente magia;
pues, el amor es eso, mágico. 
Es la verdad y lo sabes.

El amor es mágico, es la verdad.
Ahora que ya sabes, que es la verdad 
y que el amor si es mágico.

Que su magia vive ahora en tu corazón,
que en tu mente no hay mas alucinante droga 
que la que en ti él ya instaló, 
ahora ya no puedes dejar de pensar en él.

La vida ya no es insípida, pues te la ha llenado de miel
y si te abandona jamás volverá a serlo (insípida)
pero la miel se volverá en hiel
y en tu mente que ahora vive 
y vivirá por siempre sea bueno o infiel,
te acompañará hasta el ultimo día 
en que des el ultimo suspiro.

Todos dirán: Dio su último suspiro y murió.
Pero nadie sabrá que ese ultimo suspiro fue por él.
Dí, si eso no es magia, brujería o encantamiento.
Para mi es simplemente, que el amor es mágico 
y esa es la verdad.

El amor es mágico, esa es la verdad. 
La vida que un día fue insípida y sin sentido 
se volvió para ti de miel, esa es la verdad
y nunca regresó a serlo de nuevo (insípida)
más bien la miel se convirtió en hiel.

El amor es magia, una magia que al entrar en tu piel,
llegará hasta tu corazón y se aloja en tus pensamientos 
y con él o sin él, vivirás el resto de tu existencia, 
solamente pensando en él, siempre habrá un lugar 
para cada truco de magia que dejo en ti.

Me refiero a que, para cada quien que te dio miel por hiel 
y a tu vida la cambio de insípida a ricos sabores 
y miles de colores, esa es la magia del amor.

Y es que el amor es eso, simplemente magia 
y nada más que decir. 
El amor es mágico, esa es la pura verdad.












lunes, 27 de junio de 2016

La Casa Grande: El ChinPul


Lalito se encontraba en la esquina de su casa junto a sus hermanos mayores y unos amigos de ellos, serían en aquella época unos incontrolables adolescentes y entre ellos, un niño como de seis años. Ellos hablando de sus conquistas y fumando como todos unos señores de la alta sociedad, esperando que por ahí pasará alguna de las chicas que vivían en el vecindario y como nosotros, mis hermanos y yo eramos nuevos, las chicas del sector tambien lo eran para ellos; mis hermanos y sus antiguos amigos del lugar en donde antes vivimos, quienes llegaron aquella tarde a visitar, pero no era visita social, más bien era en solidaridad por la amistad y tambien curiosidad por conocer a más de alguna hermosa fémina adolescente de los alrededores. 
Dante, dijo.

_ Ya es tarde ¿qué tal si vamos al cine? 

El resto estuvo de acuerdo, mi hermano mayor opinó que estaba bien, pero que debía de regresar a Lalito a casa, a lo que su otro hermano le dijo. 
_ ¿Por qué no lo llevamos con nosotros, así conoce una sala de cine? Lalito con el seño fruncido pregunto a sus hermanos.
_ ¿Qué es una sala de cine?
_ Ya ves, ¡a eso me refiero!
_ ¡Sí, llevémoslo! Dijo Conejo muy convencido, otro adolescente del grupo. pero el hermano mayor de Lalito seguía inseguro de que fuera buena idea.

_ Pero Lalito solo tiene 6 ¿cómo lo entraremos? 
_ ¡De eso me encargo yo! Dijo el bandido del Conejo.

Y se dirigieron a la sala de cine que quedaba como a cinco cuadras de donde nos encontrábamos del famoso cine: El ChinPul.

Ya en el lugar y con las entradas en las manos, seguía el problema de Lalito. 

- Y, ahora genio, ¿cómo entrarás a Lalito? Pregunto molesto mi hermano mayor.

_ ¡Observen al maestro! Dijo Conejo y se dirigió con el que recibía los boletos, hablo con él un para de minutos y entonces hizo la señal para que se acercaran y cuando sintieron ya estaban adentro del cine.

Se acomodaron en la galería, al otro lado de la luneta solo había una pareja y muy acaramelados. 
Luego de mas menos cinco minutos de espera se apagaron las luces, esto asustó a Lalito y mucho más cuando luego de apagarse las luces y quedar todo a oscuras se escuchó una desabarrancada, cómo si un alud hubiera ido a dar a la sala del cine; cómo si al lado mío hubieran pasado una estampida de caballos, aquello fue un tremendo relajo y entre el relajo Lalito fue cogido por Conejo entre sus brazos, el relajo fue tal, que hasta las luces del cine encendieron y al estar de nuevo la sala iluminada, la galería estaba completamente vacía -solo un grillo en una de las incómodas bancas, que al darse por aludido salto y se perdió- y la luneta repleta. 
Sí, efectivamente, como a la luneta solo la separaba de la galería un corral parecido al utilizado para los bebes, todos pagaban galería y al apagar las luces se abalanzaban como engendros endemoniados hacía las sillas mas cómodas de la luneta y Lalito hizo ese viaje en los brazos del Conejo. 
Aquello era un cementerio en cuanto al silencio y el hacerse todos los locos, me refiero a la ilustre audiencia, que al proyeccionista no le quedó de otra, más que apagar de nuevo las luces de la sala y encender el proyector y, las imágenes aparecieron sobre una enorme tela pegada en la pared del fondo. 
Lalito quedó boquiabierto al ver a tremenda tele al frente suyo y mucho más, cuando escuchó el sonido. 
De una la película dio inició; era una película en blanco y negro, del extinto y muy bueno cine Mexicano. 

No llevaría ni cinco minutos la película, quiza solo habían pasado los créditos de los artistas y el director de dicha producción, cuando uno de los asistentes al cine y que estuvo seguramente en la galería, pues no creo el chico con su novia pudiera ser, ellos siempre permanecieron pegados de sus boca. Se escuchó el sonido del más escandaloso pedo que jamás haya escuchado Lalito, que hasta dio un brinco. En el momento justo que termino de salir el aire de quien seguramente quedo flaco después de tirarse el gas, obtuvo lo que deseaba, la respuesta del respetable y culto publico...

_ ¡Culo de trompeta desafinada!
_ ¡Tu madre! ¡hijueputa! Respondio el que el pedo se tiró.
_ ¡Seguramente te cagaste cerote! Dijo otro.
_ ¡En tu boca metiche! respondió el del gas.

Y así por un buen rato, no pasaron más que otros cinco minutos, cuando se escuchó otro, pero este más amplificado; el respetable reaccionó, siendo el primero en protestar quien primero se descoció.

_ ¡Ese no fui yo! ¡cerotes!
_ ¡Por supuesto que no cerote! ¡el mio es un culo virgen!
_ ¡Virgen la más vieja de tu casa! ¡hijueputa! Dijo el aludido.
_ ¡La más vieja de mi casa es tu madre! ¡cerote!
_ ¡Ese culo no tubo madre, por eso es tan gritón el cerote! Dijo otro, por el otro extremo.
_ ¡Si tuvo! ¡y es la tuya, chute cerote!

Todo regresó a la calma, cuando Lalito dio otro brinco, pues el bandido del Conejo le dio libertad a su trasero y de este sonó tremendo pedo y la hediondez  se dejó sentir en toda la luneta.

_ ¡Puta vos, mi pedo olía delicioso, pero el tuyo, huele como si tu culo fuera cementerio y de él salieran todos los muertos ya podridos!
_ ¡Ah cerote! hasta me ardieron los ojos. Dijo otro, quien sabe y fue uno de los amigos del Conejo.
_ ¡Disfruten hijos de puta, que ese solo fue una probadita! 
Y dejo salir una chorrera, como que iban los pedos tomados de la mano; como si fuera una motocicleta en plena cuesta y se armó la de nunca acabar.

_ ¡Coche cerote, ya llenaste de mierda toda la sala!
_ ¡Disfruta hijueputa! ¡pues de estos nunca más vas a poder volver a oler!
_ ¡Que los huela tu madre cabrón!
_ ¡Mejor vení y pone tu nariz que tengo ganas de tirarme otro! 

Respondió el Conejo y el pobre de Lalito tapándose la nariz y la boca, sintiendo hasta nauseas. El tal Conejo quiza comió frijoles parados con ajo y chicharrones pasados, porque en la sala la hediondez era como si un zorrillo hubiera entrado de contrabando. 

Cuando pasaron los gases, que fueron muchos más y la calma regresó  y además nuestras narices se acostumbraron al hedor; otro culto espectador extrajo de su chaqueta unos cohetes, que seguro le sobraron de la pasada navidad y los encendió; la sala se iluminaba a cada pepitazo, aquello era como si estuviéramos en medio de una batalla campal entre Americanos y Alemanes.
Esto terminó con la función, pues junto a los cohetillos tronando, la guerra de asientos dio inicio y entonces las luces se prendieron y de la sala todos salieron huyendo; mientras que Lalito iba en los brazos del Conejo quien nunca lo abandonó, ni lo desamparó, Lalito se dio cuenta de que los únicos que en la sala se quedaron y ahí permanecieron, quiza sin darse cuenta de lo que aconteció, era la pareja que si pago boletos por la luneta y aún permanecían de la boca pegados.

Despues de seguir  afuera del cine sacándose la madre los cultos que acudieron a la función y mientras se retiraba en grupos, nosotros caminamos con rumbo a mi Casa Grande. 

Una vez ahí, mi madre estaba en la puerta de la calle muy apenada tratando de encontrarme con mis hermanos.

_ ¡Buenas doña Blanquita! Dijo el Dante y después tambien lo dijo el Conejo, los hermanos de Lalito se despidieron de sus amigos y entraron juntos todos a la casa, la madre de los tres preguntó.

_ ¿De dónde vienen con Lalito? ¡ya es tarde!

Lalito se adelantó a responder a su madre ya sin pena; mientras caminaban hacia el dormitorio.

_ ¡Fuimos al cine mami! ¡era una telota! 
_ ¿Así? y ¿cómo entraste a una función que no es para niños?
_ ¡Buenas noches madre! Dijeron los mayores y besaron a doña Blanquita.
_ ¡Momento! ¡quiero  explicaciones! 

Pero estas no llegaron de sus hijos adolescentes quienes como arte de magia desaparecieron.

_ ¡Fue el Conejo, mami! ¡quien me entró! ¡fue emocionante! 
_ ¿Si mi´jo, por qué fue emocionante?
_ ¡Sí mami! ¡fue muy emocionante cuando se empezaron a tirar unos pedotes que como yedían y después unos cohetes y las sillas tambien volaron por los aires! 
_ ¡Un momento! ¿a qué cine te llevaron estos bándalos?
_ ¿Creo que se llama: El ChinPul? Dijo Lalito muy orgulloso.
_ ¡El ChinPul? ¿qué cine es ese? Dijo la señora muy molesta, dirigiéndose a donde estaban los perpetradores. 

_ A ver, jovencitos, ¿qué cine es ese Chin... no se que jodidos? ¡jamas lo he oído!
_ Así le dicen madre. Dijo uno de los hermanos de Lalito. 
_ Por ese nombre es que todos lo conocen madre. Dijo el otro.
_ Y ¿quien jodidos le pondría ese nombre a un cine? a ver ¿qué diablos significa? ¡me lo dicen yá! 

Ordenó la madre con las manos en la cintura señal de que si en el cine no los penquearon, ahí si serían trancaseados.
_ ¡Tranquila madre! le dicen así porque ese cine tiene pulgas y tambien chinches. Dijo el otro. 

Ambos carcajeándose y Lalito simplemente viendo, esperando la reacción de la madre quien tambien rompió en risas.

_ ¡Vamos a dormir Lalito! y ustedes dos, esta platica no ha terminado, mañana seguiremos con el tema. ¡Dios los bendiga...! ¡ChinPul! ¡jajaja! 
_ Que ocurrencias. 

Decía la madre de los adolescentes, mientras caminaba con Lalito a la cama; no sin antes irle revisando la cabeza a Lalito; por aquello de las dudas. 





sábado, 25 de junio de 2016

Amor sin pasado ni futuro. Solo presente


No hay pasado, no hay futuro,
solo existe el presente.

Durante toda la noche que es mi presente
no pienso en lo que me despertó 
ni si habrá de salir mañana el sol.

No tengo pasado ni tengo futuro 
solo me interesa el presente, el ahora,
y si el presente es esta noche, mucho que mejor.

Si te tengo aquí junto a mi,
el insomnio es lo mejor;
no necesito soñar, ni desear, ni envidiar,
todo lo tengo ahora y aquí,
es momento solo para amar y ser amado.

Mi pasado y tú pasado no importan
tú futuro y el mío son inciertos 
a quien preocuparán.

Lo importante es que estás aquí y ahora
amándome y dejándote amar, nada será mejor;
mi pasado, mi experiencia es quien lleva el ritmo.

Tu pasado no me importa 
solo lo que deseas de mi aprender,
mi futuro ahora lo construyo en esta cama
y en ella, dos seres que se aman 
y se devoran la carne.

Esta noche y durante ella 
sin desear dormir ni que me despierten
pues ocupado estoy 
y lo estaré cuando llegue el amanecer.

Tu cuerpo, sin un pasado, 
ni un futuro conoceré hoy,
mi cuerpo con insignias de glorías pasadas 
que me ofrecen un excelente futuro 
el cual contigo comparto hoy.

Son quienes te habrán de llevar 
al mismo cielo y la gloría 
será nuestra nueva morada. 

Ahí estaremos, sin tiempo, 
ni espacio, ni razón.

Me dedicaré solamente a amarte y recibir de ti
todo el amor que en tu cuerpo tienes para mi.

Tu alma y tu cuerpo en conjunción, 
los míos tambien para ti.

Dormiré para recibir nuevas fuerzas,
tu velarás mi sueño y admirarás mi cuerpo desnudo
ilusionada y esperando recibir de él otra dosis igual,
pero será mejor, pues ya conozco donde rompes en placer.

Ni el pasado, ni el futuro, solo el presente;
presente que será esta noche. 

Toda una noche no bastará 
para llenar tu cuerpo con mi amor.

Ni para satisfacer el mio 
que hace mucho muere 
de hambre por el tuyo.

Por tu piel y las mieles 
las cuales presentí que eran manjares.

No me equivoqué, bien elegí 
y tú muy bien has guardado para alguien
a quien entregar las maravillas 
que toda mujer trae en si.

Su alma y mi cuerpo en concubinato y conjunción,
me hacen el más feliz hombre sin pasado, ni futuro, 
solo este presente...

Nosotros: Dos seres amándose, 
con el mejor de los insomnios 
que no desean despertar 
ni con el amanecer levantarse. 

Solo quieren seguir y seguir amándose.


jueves, 23 de junio de 2016

DARKNEES


_Hola vecino, ¿extraño verdad?
_Hola, ¡sí!, oscureció muy temprano.

Al igual que estos vecinos, muchos en otras partes del planeta se hacían la misma pregunta, el porque había oscurecido tan temprano, no era por causa de alguna tormenta, pues no era temporada para ellas, al menos no en muchos lugares del planeta, sí para otros, pero a pesar de que llovía, no era para que la tarde oscura se haya vuelto como si se tratara de una noche oscura de tormenta en la que no se le ve ni la cara a la luna. Además, las aves apenas empezaban a retornar a sus nidos, era mucho más extraño, pues las aves llevan un reloj interno que les avisa cuando ya es la hora de retornar y no encontrarse con el manto oscuro de la noche. Sin embargo, otras personas no ponían atención al fenómeno, pues ya era algo normal que en la tierra en las ultimas décadas, estuviera loqueando a causa del desmadre hecho por humano y de lo que en una conferencia el Dr. Efrén dijo: "...Que el eje terrestre se había corrido un par de grados debido a tanta explosión nuclear, medición de poderío que se hacían las naciones poderosas del planeta..."

Esa noche, en la transmisión de los noticieros la principal noticia fue, precisamente esa, la repentina llegada de la oscuridad nocturna y un significativo frío que con el paso de las horas se apoderaba del planeta...

Ya había transcurrido una semana y no aclaraba, es decir, el sol no aparecía y en los paises que estaban con la estación de invierno, el frío que era indicado por los termómetros daba lecturas jamás medidos por ellos, quiza desde la era de hielo; la preocupación de muchos en las regiones agrícolas era que sin sol, los cultivos morían, algunos lugares tropicales veían como escarchas de hielo aparecían en los tejados y sobre los bosques, algunos lagos se empezaban a congelar.

La preocupación era generalizada y todos, incluyendo los científicos, indicaban que ese fenómeno no era provocado por los daños ya causados al planeta, que ese fenómeno no era terrestre, por supuesto, los paises avanzados y sus gobiernos lo negaban e indicaban que eran fenómenos pasajeros causados por el mismo problema climático y que estábamos atravesando momentos difíciles, que estábamos recibiendo factura por culpa de nosotros mismos.

En la Casa Beige, el Sr. Presidente Obhima, quien llevaba varios días reunido con su gabinete, pero esta vez no de guerra, sino con personas ajenas a esa actividad.

_¡Quiero una explicación científica y creíble! pues ¡los pueblos y gobiernos me las exigen!
Ordenaba Obhima, quien se encontraba muy preocupado.
_Señor presidente, no se preocupe que ya los refugios están listos para ser usados por usted y su familia y algunas personas elegidas, para preservar la vida humana. Dijo uno de sus colaboradores.
_¡Si señor presidente! -dijo otro- y como lo manda el protocolo en estas circunstancias, tambien están siendo trasladados a los refugios, las especies terrestres, como usted mismo lo nombró: Código Arca de Noé.
_¡No señores! -golpeó la mesa el Señor Presidente- ¿y el resto del planeta qué?
_Pues, señor, usted sabe que no podemos salvarlos a todos, ¿usted conoce el protocolo?
_¡Claro que lo conozco! pero insisto: ¿y el resto del planeta qué? y ustedes señores científicos, es momento de que hagan algo para encontrar una respuesta a tanta pregunta sin respuesta hasta hoy. Esto lo dijo enérgicamente y salió de la sala muy molesto.

Por otro lado, científicos de la NAZA, buscaban respuestas a las preguntas del Señor Presidente, pero nada y el tiempo transcurría y el sol no aparecía en el firmamento, el frío y la oscuridad desesperaba a la población mundial y se reportaban millones de victimas mortales, entre humanos y animales y tambien, en recursos naturales y agropecuarios.

_¡Comuníquenme con el astronauta Johanson en el satélite Columbia Station! Ordenó el general a cargo de una de las divisiones que se encontraban en la NAZA a cargo de la operación con nombre secreto: Darken.
_Comandante johanson me copia, cambio. Shhhhh. Inició la transmisión uno de los encargados de las comunicaciones con los satélites que estaban orbitando.
_¿Aquí el comandante Johanson? ¡Qué bueno que se comunican! ¡Tenemos problemas Houston!
_¿Problemas Johanson, a que diablos se refiere con eso de que tienen problemas?
_¿Quien habla? -pregunto Johanson- pues desconocía la vos de quien le había hablado.
_Soy el Coronel Georgeton, encargado de la operación: Darken en el espacio. ¡Responda a mi pregunta es una orden!
_Bueno señor, me disculpo, el problema que tenemos es que estamos perdiendo la energía, ahora precisamente estamos utilizando un 80% de energía fósil Señor. Pero no queda mucha y en cualquier momento sosobraremos, mi preocupación es que podríamos perder las estaciones y caer al planeta o salir de nuestra órbita y perdernos en el espacio. Espero ordenes Señor, cambio. Shhhh. Se escuchaba en cada cambio el sonido de los radios.
_¡Enterado Johanson!, ¡abandonen las estaciones y regresen a tierra!, repito, ¡regresen a tierra! y comuníquelo al resto de las estaciones que están ahora en órbita con oficiales sean del país que sean. ¡Cambio! Shhhh.
_Enterado Señor y gracias, sigo las ordenes y retornamos a casa, ¿algo más señor? Cambio. Shhhh.
_¡Ah! sí Johanson, el motivo de mi llamada es para preguntar lo siguiente: ¿Desde ahí ven algo inusual, para que no le veamos la cara al sol acá en el planeta? Cambio. Shhhhh.
_Ya me lo decía Señor; ¿por qué nunca apagaban las luces ahí abajo?, respecto a su pregunta Señor, lo ignoramos, recuerde que a causa de lo mismo estamos por perder nuestros estaciones y satélites. Cambio. Shhhh.
_Esta bien Johanson, buen retorno a casa. Cambio y fuera. 
_¡Diablos! ¿qué esta sucediendo con el maldito sol? Dijo muy molesto el Coronel Georgeton y se dirigió a su despacho para comunicarse con su comandante y jefe en la casa blanca. 

Mientras caminaba con rumbo a su despacho, se repetía.
_Esto no le gustará al Señor Presidente.

Ya habían pasado 15 días de la ultima aparición del sol y nadie tenía una respuesta a dicho fenómeno. Mientras, las cadenas noticiosas ponían más nerviosa a la opinión publica, con sus entrevistas; algunos indicaban que el fin del mundo había llegado y con Biblia en mano respaldaban sus aseveraciones, mientras que otros menos eclesiásticos daban sus opiniones, pero ninguna era esperanzadora, tambien las cadenas transmitían imágenes de las muertes entre humanos y animales y además de las perdidas de todo tipo, pero especialmente de alimentos. Las poblaciones en todo el mundo abarrotaban los supermercados, quienes no lentos ni babosos habían elevado los precios y ya sus bodegas estaban casi vacías y no había forma de que fueran abastecidas. Las redes sociales fueron interrumpidas para evitar el pánico, algo que causó más desgracias en muchos jóvenes y otros no tan jóvenes, pues eran tan adictos a esa droga del siglo 21 y muchos prefirieron quitarse la vida ante tal desgracia.

_¿Señor Presidente?; el Dr. Efrén pide una audiencia con usted, él cree tener una teoría. 
Esto le indicaba su secretaria por el intercomunicador, mientras tanto el Dr. Efrén esperaba en una sala muy bien protegida, a pesar de ser un científico de renombre, el Dr. Efrén lo consideraban un poco excéntrico en sus teorías, por lo que no era muy respetado por el circulo de científicos, pero de momento era el único quien tenía una teoría al respecto.
_¡Hágalo pasar, Lolys!
_Como usted diga Señor Presidente. 

Luego de varios minutos, debido a las requisas y otras protocolos de seguridad, se reunieron por fin, el Señor Presidente Obhima y sus colaboradores más cercanos, los que estaban al tanto de todo lo referente con la Operación Darken.

_Dr. Efrén, por aquí por favor. Le indicaba Lolys y unos agentes secretos.
_Señor Presidente; el Dr. Efrén.
_Adelante Dr. Dijo el Sr. Presidente y lo invito a tomar el asiento especifico para él.
_Bueno Dr. diga que novedad nos trae o, en otras palabras, ¿cuál es teoría Dr.?
_Primero que nada, un placer conocerlo Señor Presidente; segundo, gracias por la oportunidad que me da de poder compartir con ustedes mi teoría.
_Esta bien Dr. Efrén, ¡al grano! Dijo un militar en la mesa de conferencias, mientras todos los demás veían al Dr. Efrén con escepticismo y por compromiso con su jefe, el silencio fue incomodo por algunos minutos, entonces el Dr. Efrén tímidamente acomodó sus gafas y aclaró su vos, pues estaba en un lugar de privilegiados, por no decir el único en todo el planeta en tener una teoría al respecto de tan cuestionado y temido fenómeno.
_Bueno, como dice usted -se dirigió al impertinente militar- la teoría que traigo es algo muy sencillo y es la siguiente: Verán, el problema no es otro más que la obstrucción de un objeto enorme entre nuestra estrella y el planeta y cruzó sus brazos y en su rostro se dibujó una tímida sonrisa, aquel lugar siguió en silencio sepulcral, hasta que el mismo impertinente y prepotente militar dijo.
_¿Esta usted loco Dr.? ¿nos viene a decir que algo esta entre el sol y el planeta? 
Aquel silencio sepulcral fue irrumpido por una carcajada, el único que no rió fue el Señor Presidente, quien seguía viendo atentamente al Dr. Efrén y entonces entre las carcajadas se escuchó la vos del Jefe: Obhima.
_¿Podría usted explicarme su teoría Dr.? Esta oración trajo el silencio al lugar una vez más, pero el militar dio su opinión sin dejar hablar al Dr. Efrén.
_Por favor Señor Presidente, ¡no perdamos el tiempo con este viejo loco!, ¿cómo puede ser posible algo así?, ya había escuchado de sus locuras, pero esto es lo máximo en babosadas expuestas por un pseudo científico, ahora entiendo porque no lo aceptan en dicha sociedad tan prestigiosa.
_¡General por favor! -dijo Obhima, muy serio- ¡Quiero escuchar al Dr.! 
_¡Yo tambien! Dijo otro científico presente, mientras el resto volvieron a la tertulia con palabras que pudieron ofender a cualquiera, pero que al Dr. Efrén le resbalaban y fue él quien trajo el silencio a la sala poniéndose de pie y en una de sus manos su maletín y en otra una taza de café ya vacía que él mismo se bebió mientras todos se burlaban de él.
Ya en pie, solicitó que apagaran todas las luces del lugar y se dirigió ante una lampara que se encontraba en un rincón de dicha sala, a la cual encendió antes de que las luces fueran apagadas y dijo.
_Este, Sr. Presidente, es el sol -señalando al foco ya sin pantalla- y esta -la taza- es nuestra tierra, cómo usted puede ver, se ilumina una de sus caras, mientras que la otra permanece en oscuridad, ¿acaso no pasa esto día a día a lo largo de la historia de nuestro planeta?, pero mi teoría dice esto... -Efrén no dijo nada, simplemente atravesó su portafolios entre el foco y la taza y esta oscureció por completo, tal cual sucedía ya casi un mes en el planeta. Efrén dejo los objetos en el lugar, simplemente volteó su cara y la dirigió hacia Obhima, y en su rostro su típica sonrisa tímida y satisfactoria. El Sr. Presidente se extrajo sus lentes y pidió las luces fueran encendidas y mientras limpiaba sus lentes con su corbata, dijo.
_Es una excelente teoría Dr. Efrén y tiene mucho sentido -al ver al Dr. aun parado deteniendo los objetos, le dijo- Siéntese por favor Dr. 
Y Efrén se acercó a su lugar y se sentó, el Señor Presidente dijo no muy convencido. 
_Y, según usted ¿qué sería tan grande, como para interrumpir los rayos solares?
_¡Sí! -dijo uno de los científicos quien había hecho un diagrama en una hoja de papel- pues vean esto, si este es el sol y esta es la tierra y ella fuera el punto de fuga de nuestra perspectiva y trazando las lineas de fuga desde la tierra con dirección al sol, vemos claramente que lo que obstruiría los rayos solares tendría un diámetro bastante considerable y nada, ni un asteroide fue visto por nuestros aparatos y radares en la NAZA o sí. El diagrama era más que evidente y efectivamente el objeto entre la tierra y el sol debería de ser enorme, todos vieron el rostro sonriente del Dr. Efrén, quien dijo al respecto.
_¡Exactamente!, su diagrama ilustra perfectamente lo que he dicho, gracias colega, pero dada la distancia entre la tierra y el planeta, ese objeto que ignoro que será, no debería de ser tan grande como usted lo quiere hacer ver, estoy de acuerdo que es enorme pero no como usted quiere hacerlo ver colega.
_¡Esta bien, esta bien! -dijo Obhima- supongamos que su teoría tiene fundamento, ¿qué cree Dr. que podría ser eso que tapa el sol, impidiéndole calentar e iluminar al planeta. 

Ahora Efrén se encontraba sirviéndose otra taza de café y mientras volvía a su lugar y se sentaba y luego de beber un sorbo de su caliente café, se extrajo tambien sus lentes para limpiarlos con una corbata de los años setentas, mientras, todos en el lugar desesperaban esperando la respuesta del teórico científico.
_Bueno Señor Presidente, eso es algo más que obvio y me extraña que mis colegas, quienes me difaman y sus militares que se burlan y me ven con cara de pocos amigos no lo hayan resuelto ya. (suspiro). 
_Pues, la respuesta es: ¡Sencillamente una nave alienígena Señor Presidente, una nave nodriza, ¿creo le llaman ustedes? -se refirió a los militares y científicos- y bebió otro sorbo de su taza, para luego quedar con la vista hacia el Señor Presidente y su característica sonrisa en sus labios.
El resto que acompañaban al Señor Presidente, se rascaban la cabeza, otros bostezaban como rechazo a lo que les decía el Dr. y todas las muestras de desagrado posibles, pero Obhima dijo algo que sorprendió hasta el mismo Efrén.

_Bueno señores, siendo esta la única teoría que tenemos y la cual no me suena tan descabellada, no nos queda más, ¡que investigar y darle a la teoría del señor Efrén fundamento científico.
_¡¿Qué?! Dijo el militar, quien ahora odiaba más al científico loco.     Obhima ya de pie dijo a su militar.
_¡Tiene usted alguna otra teoría general? 

Despues de un breve silencio y mientras salía de la oficina dijo el Señor Presidente: ¡Eso pensé!... 




Continuará...



martes, 21 de junio de 2016

Historias de Taxi 2


_El día no había sido bueno a penas lleve a doña Norilia al IGSS, pero de ahí ya no hubo más clientes. Pensaba, descansando en mi cama pues me dolía algo la espalda, luego de terminar mi cigarrillo me levante y tomé una tasa de café con un pan, de esos que vende don Chus, a porquería de pan ya no lo hacen como los que comía de niño, (Suspiro) Cuando terminé mi café con pan, lo único que tenía para cenar, tomé un par de cubetas, trapos y una esponja y me puse a lavar mi cucarachita del año 68, mientras lo lavaba escuchaba musica de mi canta-autor preferido: Arjona, casualmente su éxito que tanto me gusta pues creo la escribió para mi, "Historias de un taxista", aunque nunca se a subido a mi taxi una canche con ganas de engañar a su marido para revolcarme con ella en la alfombra, aunque sea las de mi cucarachita, ¡jejejeje! 
Bueno, ya listo, con mi cucarachita brillante por unos lados y otros ya no, los asientos siliconados y oliendo a pino, me dirigí hasta mi cuarto y me encomendé a mi Diosito, que me guardara de los malditos mareros, que no me extorsionaran y que no se fuera a subir otro engringado local y loco desgraciado, aunque con mi San Juan no había ningún problema, me persigne y salí a la calle donde esperaba por mí; mi volkswagen, cerré la puerta y le eché llave, olí mi sobaco, revise mi plantón por el retrovisor, llené las palmas de mis manos con mi aliento. Todo perfecto, pero siempre abrí la guantera y de ahí saqué mi Hugo Boss, loción chafa que compre en la tienda "Exclusivos de Mujer". Si que venden barato los de esa tienda. 
Me embadurné con ella en mi rostro y por mi dorso, ¡ah que rico huele esta porquería!, arranque el volks y este ronroneaba, bajé mi vidrio y vi por los retrovisores, me santigüé de nuevo y ahí iba ya por la San Juan con rumbo a la zona diez. 

Iría por el Trébol cuando me hicieron la parada, me le atravesé a un carrito nuevo de color celeste, un Picanto; solo escuché que la que lo conducía me saco la madre, yo le dije; -pase usted señora y luego me reí, ella solo me enseño su dedo medio y dije; a que cabrona.

_¿Perdón? Me dijo quien me hizo la parada.
_Nada seño, pase adelante. Ella subió y se sentó. 
Me dije, es rubia y mira que pantorrilla será la del revolcón.
_¿A donde señorita?
_Lléveme al Cortijo Reforma por favor.
_Con mucho gusto (...) ¿va en busca de su marido, acaso la traiciona?
_No señor, soy soltera, ¿qué se cree el de la canción de Arjona. Dijo y reímos los dos. 

Así seguimos por media hora pues ya el transito empezaba a ser un poco denso.
_¿Cuanto le debo? me pregunto y me pagó.
Di gracias a Dios, pues ya había entrado algo esa tarde noche. Ya que estoy por aquí, me dije, me parqueo, pues de pronto y sale alguien de trabajar y quiere mis servicios y así fue, salió un catrín con todo y maletín, se veía fino el condenado.
_Buenas, por favor a la carretera de El Salvador.
_Con gusto mi Lic. Le dije y ya no dijo nada, simplemente extrajo un periódico y se dedicó a leer. Me dije, debe de ser uno importante, espero no verlo mañana entre los implicados en el caso: TCQ,  ¡jejeje! me reí, él solo me vió como diciendo; -este pendejo de que se ríe. Yo le respondí viendo por el retrovisor.
_Me acorde de un chiste, ¿quiere oírlo? Pero el pendejo no dijo nada, siguió con su lectura. 
Cuando íbamos entrando al lugar en donde viven los fichudos, le pregunté. 
_¿Por aquí está su casa? sin responderme, solo movió su cabeza todo pesado el pizado.
Cuando sentí ya íbamos llegando a San José Pinula, vaya catrín desgraciado si no era fichudo, era un pobretón que vive por este sector, uno de esos que se compran ropa de diseñador, pero no son más que conserjes, seguro en su ataché solo llevaba su almuerzo como si fuera el mensajero de la telenovela de "Bety la Fea" el tal Fredy Contreras
Me pagó y se apeó de mi auto, cuando ya estaba solo en mi cucarachita le dije.
_¡Por lo menos yo tengo carro pendejo! ¡jajajaja! Riéndome del presumido sin pisto. 
Cuando sonó mi celular.
_¡Puta que suerte, es Seño Heidy, esa seño si tiene sus centavitos, querrá la llevé a la Departamental, pero a estas horas, ya casi son la ocho, bueno según me ha contado esos del Ministerio de Educación son una porquería a cada rato cambian y chingan mucho.
_¡Aló Seño Heidy! Ahora la recojo con mucho gusto, espere ahí, no se mueva voy para allá estoy a la vuelta de la esquina, me tardo unos diez minutos pues hay trafico. Luego de colgar mi celular pensé; ojala me haya creído, pues si le digo que voy por el mirador ya no me espera ¡jajajaja!

Ya era media noche, me dije; ya me voy a descansar, esta noche estuvo muy buena, así que entré en la Roosevelt con destino: Mi camita.
_¡Mirá que suerte un cliente! me dije yo mismo y paré.
_Adelante señora, buena noche, ¿a donde la llevo? le pregunte a la señora.
_¡Que tal David! 
Volví a ver por el retrovisor y se trataba de una vieja clienta.
_¿Ya me desconoció?
_Perdone, es por lo oscuro y ya voy algo cansado, a su casa supongo ¿verdad?
_Si. 
_¡Le tocó entregar turno seño? 
_Sí. 

Viajábamos por la calzada Roosevelt ya eran algo tarde cuando me dijo 
_¡Mire David! unas clientas, por mi no hay problema si las sube. 
_Gracias seño. pero como le digo ya voy cansado. 
_Pero le están haciendo la parada. 
_Pero están del otro lado, mejor cuando la deje en su casita regreso y si aun están las subo.
_Bueno, yo para que se eche otros lenes. 
_Gracias seño. Le dije.
_Muchas gracias David, siempre lo llamo cuando lo necesite. 
_¡Gracias Seño! le respondí y me dirigí para mi casa pensando en las dos chicas que un poco más atrás me hicieron la parada. Que chingados, vamos por ellas, si son para mi ahí estarán y sino me voy directo a mi camita. 
Cuando regresé me percaté de que ya no estaban ahí, bueno me dije, no eran para mi y estaban bien buenas las condenadas, pero bueno. Viré en U en el primer retorno y como a un par de cuadras dos señoritas me hicieron la parada, me dije; vaya si eran para mi solo que se cruzaron la calzada. Llegué hasta donde se encontraban y les di las buenas, además si que estaban buenas las condenadas. 
_Hola chero, ¿nos llevas a la Cotió?
_Claro, suban, ¿si quiere se viene usted acá y su amiga atrás? Les dije, pues no me gusta llevar pasaje atrás de mi, fuera de mi vista en el retrovisor y más cuando se trata de señoritas de la vida alegre o de cualquier otro tipo, pues fácil me asaltan y ni en cuenta.
_Está bueno guapo. Dijo la más alta y se sentó a mi lado, vaya piernas de la condena, estaba riquísima, cuando vi por el retrovisor la más chaparrita no se veía ahí atrás.
_¿Oye y tu amiga, no se subió? 
Pues mientras veía sus piernotas y las pantorrillas y un poco más, la otra se subió y se sentó justo a mi espalda
_Acá voy pendejo. Dijo; se enonctraba justo atrás de mi, pensé; mala seña.
_¿Por qué no te corres al otro lado?
_¿Para que cabrón, para ver mi culo?
_No seño, para ver con quien platico. 
Pero para esto ya mi corazón me hacia un hueco en el estómago, como indicándome, algo no anda bien, vi que la grandota, la piernuda vio a la chaparra y se hicieron una mueca, me dije; esta es la señal. Busqué a mi San Juan, pero como había lavado mi cucarachita baje a mi San Juan. Y en ese momento mentalmente me fui volando hasta mi casa y vi a mi San Juan sobre el sofá de la sala; pues cuando entré a orar, no iba a entrar con el San Juan y fue ahí cuando lo olvidé... ¡Maldita sea! terminando de maldecir estaba cuando sentí que me halaron el pelo hacia el respaldo y con la otra mano me colocó un cuchillo en mi garganta. Entonces dijo la chaparra desgraciada.
_¡Seguí manejando y muy lentamente le das a mi compañera el pisto de la noche! 

Dios mio ayúdame por favor; me dije, pues si hubiera llevado mi San Juan, ya no tendría brazo la desgraciada; pero Diosito escuchó mis plegarias y les dije.
_¿Qué pasó, mis solcialités no me reconocen? soy David y ya otras veces las he llevado hasta Cotió, ¿no van a chingar a su taxista preferido?, es más, ni les voy a cobrar el viaje pues supongo que hoy les fue como la chingada igual que a mi y entre pobres no nos jodemos ¿verdad?
_Ya decía que me era familiar la cara de este pendejo, dijo la altona que seguía muy buena.
_¡Bobosadas del hueco este! Dijo la chilindrina 
_Vamos, si ustedes viven por aquí, miren ya casi llegamos, es en esta cuadra ¿o no? 
Me la jugué y casualmente si era ahí. 
_Es cierto vos chaparra, sino ¿cómo sabría que vivimos en esta cuadra? 
_Pero no nos cobras el viaje ¿verdad cabrón? 
_Pues como, ¡si son mis cuatas, las más bonitas que he subido a mi cucarachita! 
_¡Pendejo! te estas pasando de nuestra casa! Dijo la altonn y buenota. 
_Y, ¿cómo no se va a pasar pendeja si aun lo traigo con el verduguillo en el cuello? 
Lentamente me quitó el arma blanca de mi cuello. Yo le dije.
_Lentamente por favor, no quiero me rasguees ni con tus hermosas uñas.
_Tranquilo mi chavo, ¿cómo dijiste que era tu nombre? 
_David ¿ya lo olvidaron? para que no me vuelvan a olvidar la iré a visitar la próxima semana a su lugar de trabajo, espero me hagan un descuento ¿no?
_Yo no te haré un descuento mi amor. Dijo la altona y muy buena, pero ¡te llevaré hasta el mismo cielo!
_Y yo cabrón, por huevudo te llevaré hasta le mismo infierno. 
Me besaron; una la mejía, la altona buenota, mientras que la chaparra hasta la lengua me metió y me llegó hasta la campanilla. A cabrona, casi me hace vomitar.
_¡Eres buena con esa lengua! ¿no?
_Es para que veas lo que te espera guapo.
_Entonces te esperamos la otra semana en: Le Chic de la Roosevelt, no vayas a ir a la de la zona 9. 
_¡No!, las veo entonces, comparé unas azulitas para aguantarles, jejeje. ¿Adiós hermosas!

¡Puta! de la que me salvé, dije, mientras las veía aun por el retrovisor; pero esa grandota ¡sí esta bien buena! yo creo que de pronto y le cumplo.

Las pendejas, dijeron: -¡Sacamos pasaje gratis otra vez! ¡pendejo, cree que nos baboseo! ¡jajajaja! 

Eso dijeron las condenadas, se besaron y abrazadas caminaron como dos cuadras más y llegaron a su cantón. 

Ya en mi cuarto, no podía sacar de mi mente esas piernotas; me tocó que relajarme para poder dormir, jejejeje, estuvo bueno el día y la noche no se diga... Y con mi mano sobre mi armamento me quedé dormido.

lunes, 20 de junio de 2016

Man in white


Las calles las iluminaba la luna que se reflejaba sobre el agua cristalina de los charcos, agua recien caída por una tormenta eléctrica que habría durado una media hora, las calles ahora vacías y frías, en las aceras de entre cada unión de las lajas de concreto, de la tierra húmeda salían en desfile militar una ordenada cuadrilla de hormigas de color rojizo, sobre ellas pedazos de hojas, las cuales por la tormenta y los aires habían sido arrancadas de los pocos árboles que rodeaban las orillas de la ciudad en los barrancos que la coronaban. De los tragantes tapados por las porquerías de los vecinos, sobresalían empapadas ratas buscando sus alimentos, en otros rastreras cucarachas de color rojizas por estar bien lavadas por las correntadas tambien hacian acto de presencia, todos atraídos por los alimentos. 
Era evidente, que lo que para unos dicha tormenta eléctrica había sido una desgracia para otros, era una enorme bendición. Para los pobres desgraciados, sus hogares inundados, autos dañados por algunos despistados que olvidaron subir los cristales, pero esta desgracia no era de carácter natural, aunque los que viven de los chismes y me refiero a los noticieros, jugaban al teléfono descompuesto alterando la veracidad de las novedades, indicando que todo era a consecuencia de un invierno desmesurado e inclemente, mentiras, pues la realidad era otra; vecindarios con inquilinos coches que arrojan sus porquerías a las calles obstruyendo las planificaciones municipales, quienes años antes realizaron los respectivos trabajos para que la tierra se tragara las aguas de los inviernos, pero ellos, los vecinos cerdos, habían ahogado las gargantas de la ciudad, provocando en ellas, alergias que obstruían sus fosas respiratorias y gargantas profundas que conducirían por sus intestinos hasta defecar en los vertientes de los ríos de los barrancos vecinales de la ciudad. 
Mientras los inteligentes se lamentaban de sus desgracias, para otros menos privilegiados, en cuanto a materia gris, aprovechaban de las mieles y abundancias que la tormenta les dejó. 

Mientras los diversos mundos vivían sus realidades, de entre un callejón apareció un elegante catrín, vestido completamente de blanco, de sombrero y de corbata y en su rostro la sonrisa de la complacencia, mientras caminaba por las aceras, entre las basuras, insectos y charcos, él no se mojaba ni siquiera se hundía en los charcos, el agua a su paso era firme y dura como el cemento. El desfile interrumpió su inviolable majestuosidad, paso al ritmo de tambores escuchados solo por ellos y en sus lomos los alimentos que habían encontrado con rumbo a sus hogares varios metros bajo el nivel de la tierra, lugar en donde las corrientes no llegaron por alguna razón, las ratas se inclinaban como si el blanco de la ropa del misterioso y espigado individuo les provocara algún tipo de ceguera y las cucarachas alineaban y alzaban sus antenas como un fiel saludo, mientras este seguía su andar y al hacerlo observaba con complacencia a las criaturas realizar sin protestar sus actividades; mientras caminaba, en las paredes se reflejaba una luz fluorescente de color blanco, muy blanco, en los hogares se decían: _Seguirá lloviendo, pues aun se ven las luces relampagueantes en el cielo.   Y a les llegaba un frío que refrescaba a los hogares de buen corazón y que cumplían con ayudar a la naturaleza colocando sus desperdicios en lugares para el caso, sentían agradable la brisa; mientras que los sucios y coches, sentían escalofríos. Pero el hombre espigado y de un blanco inmaculado al cual no le entraba suciedad alguna, seguía su paso sin claudicar, ni por un momento pensar en retornar del misterioso lugar de donde salió, la luna utilizó un rayo especial para él, como una candileja o reflector de teatro que siempre sigue los pasos del protagonista, así era y eso le daba un color blanco mucho más especial, las palomillas y otros insectos voladores atraídos siempre por la luz artificial se alejaban del hombre de blanco, pues la luz era demasiado para ellas y podría ser fatal si se acercaban a un metro de sus blancas y pulcras ropas, su caminar era a zancadas y cada una, era aproximadamente de un metro y no había detalle que se le pasara por alto. 
Los perros callejeros que dormitaban empapados en las aceras con sus cuerpos unidos, muy unidos para lograr conseguir un poco de calor, se habían olvidado del que por la mañana fue mortal enemigo a causa de un hueso que uno de los vecinos cochinos arrojó a la alcantarilla desde su lujoso auto ultimo modelo; ellos, los perros mojados, habían olvidado sus diferencias cegados por el hambre y ahora se daban calor, compartían un poco de calor de sus cuerpos pues, sus cueros en algunas partes ya sin pelaje y el resto empapado como si fuera toalla de fregador de hotel de lujo, pero cuando el de traje blanco pasó por su lado, sus cuerpos se secaron y de sus partes calvas los ilusionó la aparición de nuevo pelaje; abrieron sus tristes ojos y vieron el brillo del que pasó secando sus pellejos y le dieron las gracias, vieron que su enemigo ahora se acomodaba mejor, pues el calor les llegó y durmieron esa noche muy bien, no así los perros que se encontraban en las casas de los causantes de las desgracias, ellos al sentir la presencia del que secó a los callejeros aullaron y ladraron y como endemoniados se lanzaron contra las mallas que indicaban que la propiedad era privada y le enseñaban sus fieros colmillos y sus ojos brillaban con un color enrojecido, el escándalo era para no dejar dormir a nadie, los gatos por su parte, que se lamían bajo los tejados, ignoraron por completo lo que pasaba a su alrededor, pues su actividad era más que importante, había que lamer rápido para secar su pelaje y estar listos para perseguir en manada a la hembra embramada. 
Unas cuadras más adelante se encontraban otras especies callejeras no menos jodidas que las anteriores, pero si mucho más jodidas que las que pernoctaban con sábanas de seda y edredones enguatados, algunos hasta importados, estas especies acomodaban sus cajas de cartón mojadas que ahora se deshacían por lo mojado que estaban, algunos de ellos lograron hacerse de un trozo de plástico, el cual lo usaban en los días de invierno y con andrajos se tapaban lo que lograban, mientras rascaban sus pieles sucias y hediondas, pues tambien en ellos residían otros seres, de otros mundos mas diminutos propios de otras razas, pero que en ellos habían encontrado lo que en los otros por mojados y otros por sus grooming y shampoo anti pulgas, estas habían buscado asilo en los pobres y harapientos pordioseros, cuyas colonias y viviendas eran cada día removidas para no ser por su vecino aventajado y despojados de un trozo de tela o un pedazo de plástico para la intemperie de las torrenciales lluvias, ellos dejaban sus actividades y veían con asombro al joven espigado y bien trajeado que por la banqueta y a paso de a metro y con sonrisa complaciente en su rostro, por el otro lado sin detenerse circulaba, no había tiempo para preguntarse quien era ese chico tan bien trajeado y tan bien combinado, pero lo que si sintieron fue una calidez, que en sus hogares les cambio el clima, como si tuvieran termostato; ahora estaban listos para dormir con calidez y comodidad, pero ellos no le dieron las gracias, estaban tan cansados de rascarse la piel por picadura de tanta pulga y de tanto bicho que residían en el interior de su cuerpo que se dispusieron a dormir; aquellos bichos que vivían en su piel, estomago e intestinos, esas eran criaturas de otros mundos.      Se acostaron ya sin tanto aspaviento y como nunca durmieron, hasta soñaron que eran elegantes y de ropas blancas como su benefactor sin nombre ni presencia. 

Mientras avanzaba se acercaba a la enorme ciudad, lugar en donde siempre es de día, como el antiguo correo que sin importar si llueve o hace sol, si es de día o si es de noche, la entrega es inmediata. Pero al pasar por aquellos lugares los autos parqueados en las calles encendían sus luces y las alarmas intentaban sonar, pero al no más empezar se callaban, pues su  caminar si que era rápido y no daba tiempo para continuar el ciclo programado de fabrica. Mientras pasó al lado de un auto que se abalanzaba rítmicamente y cuyos vidrios eran blancos como su traje pero por el vaho que expulsan los cuerpos en movimiento, cuando el chico del auto acalorado explotaba adentro de su hembra, quien estaba en día extremadamente fértil y seguro sería que en nueve meses estaría reprochando a quien ahora la satisfacía, sin ella saberlo, era protegida de una futura vida no deseada y otro tiempo más adelante, el que inhalaba a través de un dollar enrollado su linea blanca, la que le hubiera causado su muerte por excederse en una sobre dosis; lo que inhaló solo fue bicarbonato, otra para el hombre de blanco.     Como veinte pasos más al frente, una desavenencia por culpa de una trampa en juegos de azar, extrajeron los insultados y los que se creyeron engañados de sus bolsillos sus armas blancas y quedaron asombrados pues hoy día ya no se usan, solo se utilizan armas de fuego, al ver en sus manos simples navajas, las cuales no sabían usar, pues estaban acostumbrados al gatillo halar; dispusieron arrojar las porquerías que de sus bolsos extrajeron y se dijeron: Nos echamos otra, pero esta vez nadie hará trampa, pues el que trate de engañar al otro, vapuleado por nuestros miembros será...    Me parece parcero y échame las cartas. Dijo el otro.     El resto de ovejas que simplemente siguen a su arriero, se vieron las caras preguntándose: _¿De dónde salieron esas viejas navajas? 
En la discoteca se encontraba un tipo tieso para el baile, cuya actividad dependía de que la chica con la que soñaba se desdiera a darle el ansiado si,  ella lo invitó a bailar y en su mente se dijo: _Me gusta algo, pero si no sabe bailar lo mando al carajo. Pero si me resulta un excelente bailarín, en seguida le doy el si. El chico tieso se puso de pie y en su mente se repetía: _En mi vida habré bailado ni un trompo, no se diga mis pies y mi torpe cuerpo.         
Pero al escuchar el bajo y luego las trompetas sonar, sin saber como él empezó a danzar y sin saber nuevos paso inventó que uno de Mtv se le acercó y una tarjeta le entregó y le dijo: 
_Te necesito para mi próximo videoclip, no faltes y si quieres lleva a tu novia. 
_¿Mi novia? Se cuestionó  asombrado el bailarín.
_¡Sí! Dijo la chica, se le abalanzó y su boca con frenesí besó, mientras sus piernas seguían temblando como si fuere Elvis. 

El hombre de blanco seguía con sonrisa complaciente en su rostro, pero aun así nunca se detuvo y su andar mantuvo y a pesar de que el lugar estaba abarrotado nadie lo vió, ni se percató de que por ahí pasó.

Y así como apareció, asi tambien desapareció, entró en el ultimo callejón y todo continúo su normalidad en una noche presidida de horrenda tormenta.
Al cruzar y desaparecer en el ultimo callejón, de ahí salió volando como paloma blanca su impecable sombrero y hacia el cielo ascendió y entre las nubes se acomodó. Mientras ascendía los vientos azotaron y tambien silbaron y entre la confusión se escuchó... 

"¡Hasta la próxima tormenta!"