sábado, 17 de septiembre de 2016

Luna de Miel


Un río de amor,
que nace aquí y desemboca en la luna
así fluye entre los dos la maravilla del amor
lo ves fluir, sin detenerse, la única contaminación 
es la de nuestro amor.

El sonido que produce es sinfónico 
pues carece de rocas, su color es de plata
con destellos de color carmín.

Peces de colores brillantes y los de plata
que se reflejan de la misma luna en plenilunio,
los arcoiris que se forman son los arcos a su camino.

Mientras viaja de aquí hasta nuestro satélite plateado
como un día lo será el vestido
que habrás de usar para tan bella ocasión;
asegurada tendremos nuestra luna de miel.

Alguien que nos ve con envidia en lo profundidad del mar,
pues este río no llegará nunca a él
y no lo hará, porque no le pertenece a él,
lo sabe, igual que lo sé yo y lo sabes tú.

Pero no hay tiempo por perder a malo sentimiento,
desde aquí lo único que yo veo 
es el reflejo plateado de nuestra luna en plenilunio,
es bello y él lo sabe.

Recuerdo cuando te dije intentando conquistarme;
¡llévame hasta la misma luna!
en otras palabras, te dije ámame y así lo hiciste,
en otras palabras, te amo.

Al hacerlo nació ese río que hoy nos conecta con 
bello lugar plateado.

Que maravilla de mundo es nuestro amor;
lugares tan verdes, otros tan azules 
como el mar que con recelo nos ve,
niños llorando pidiendo amor, 
colores que hace la lluvia, el mejor de los prismas, 
todo esto y más son cosas del amor.

Ella esta ahí,
viéndome reír, viéndome a mí,
la felicidad vive adentro de mí y de ti
ya nadie de ahí la extraerá,
se siente bien viviendo ahí, en ti y en mí.

Llegar navegando hasta ese lugar plateado
en las vías de un amor
que son los ríos que nacen en nuestro corazón
y desembocan en lo que será nuestra luna de miel.
Nuestra luna de plata.




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