viernes, 7 de julio de 2017

Ayudadme a cambiar mi dolor por amor


Si estoy callado no es silencio absoluto, aunque esté encerrado y asilado, siempre habrá algo que murmure en mi mente, que me recuerde que el objetivo de esta vida es el amor, y ese amor eres tú mi amor.

Si estoy en soledad, callado y aislado, sigo enamorado, pues has llegado a mi vida; iluminas mi oscuridad con tu mirada, me has dado calor con una caricia, me has demostrado que la vida es hermosa con una sencilla (simple) sonrisa. Que si me raspó aquella espina, era necesario poder disfrutar del olor de una flor.

Si a veces creo haber perdido todo y que viajo sin brújula que me indiqué cual es mi norte, eso no me impedirá que llegue hasta donde estés y así beber de tu piel para satisfacer mi hambre de amar y ser amado.

Si creo nadar sobre la nada, laguna sin agua, ni peces que se acerquen por curiosidad a mí, creo sobrevivir a esta sequía, porque tu eres mi guía y ahora que recuerdo no sé nadar, así que seguro me ahogaría, pero tú eres mi salvavidas.

Si mi mundo antes estuvo sin amor, ese fue mi dolor, mi angustia, mi molestia, creí haber perdido hasta mi nombre, pero fui rescatado por lo mejor de esta vida y es el amor, tu amor, quien de mí se compadeció y se entregó. Gracias amor.

Si cuando caminé un camino no me acompañó ni mi sombra eso no me causó ningún temor, porque ya te conocía y eso me daba valor, alegría y confianza de que no iba solo por aquel camino, que mi sombra era tu amor, mi compañía tus palabras amorosas y que mi meta sería un día, que mi compañera fueras hasta el último de mis días; por eso caminé el camino sin mi sombra y sin temor pues, ya conocía de tu amor.

Si escuché de muchas bocas mil palabras que me parecieron sinceras a ninguna le concedí valor pues, en su momento fueron palabras que me las robó el viento, que se asustaron en la primera ventisca y entre ella remolinos, pero lo que nunca me intimidó ante ese torbellino, ese fue tu amor, fue luz para mi sombra, fue sonido para mi silencio, fue alimento para mi hambre, fue lucha para luchar por mi vida, ya tenía una esperanza y ese era un (tu) gran amor.

Si un día grité ayudadme, fue solo un momento de angustia, fue un tremendo susto, pues creí que nunca llegaría a mí tu amor, pero entre la bruma, después de aquel grito de miedo y dolor apareció tu amor y a mi vida le dio sentido y valor ese amor. 

Por eso hoy digo, que el estar callado no es un silencio absoluto, que jamás estuve aislado y callado sino enamorado, si el dolor que me causó la espina, sí dolió, pero valió la pena al oler el aroma de la flor; me creí perdido, pero estaba equivocado, porque mi brújula fue tu amor y el camino que caminé en solitario y callado me condujo a ti con un grito de ayuda que se me escapó, pues mi corazón se asustó, pero eso bastó para encontrar las rosas y aprender a burlar las espinas, así fue como mi mundo y mi vida cambio con tu amor.


 

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