jueves, 29 de diciembre de 2016

My Friend


Mi amigo. 
Hoy quiero decirte,
que amo al amor, a la mujer,
que amo la vida y amo vivirla,
que amo a la gente sin importar que ella me odie,
que amo amar y amo que me amen,
que amo ser quien soy, quien fui y quien seré.

Amigo.
Hoy quiero confesarte,
que he vivido y mucho, pero no lo suficiente,
que quiero vivir más, compartir contigo mis triunfos y mis fracasos, que desearía regresar el tiempo para no volver a ofenderte, pedir perdón a todos los que humillé y traicioné,a las mujeres que engañé y les robe lo mejor de ellas, pedirles perdón.

Mi querido amigo escucha bien.
Pues no lo repetiré, por ser tan vergonzoso y tambien hermoso, todo lo que hice fue a mi modo, a mi manera diría el poeta,si me equivoqué o acertado fui ahora ya no importa, lo que realmente importa es que lo que haré será honesto, ya no habrá trampas, no habrá engaños, honesto seré y quiero seas así tambien.

Amigo mío.
El hermano que la vida me dio eres quien siempre ha estado a mi lado, pues mi hermano de carne y sangre no sé donde estará si vivirá o muerto está, mi cómplice has sido en mi camino, tambien he sido alcahueta contigo, por eso te digo hermano mío, gracias por estar siempre conmigo.

Amigo. 
Fiel amigo de toda la vida, la pasamos bien, no es así, disfrutamos y tambien lloramos, casi un día perdemos la vida por incautos, después nos reímos tanto, pero la vimos cerca, juntos sentimos muy cerca la muerte.

Amigo, mi amigo.
Quiero agradecerte por presentarme a la que es mi mujer, mis hijos sobrinos tuyos eso son,
aunque no llevan tu sangre, pero te admiran y te respetan, tambien te admiro y te respeto, creo tú tambien sientes lo mismo, pues me lo has demostrado.

Amigo. 
Hoy recuerdo cuando te conocí, podría decir que me salvaste de aquel abusivo, aquel bravucón,
más tarde lo hice yo con aquel, quien fue tu jefe, mi subordinado llego a ser. 
Amigo, lloramos y reímos, nos emborrachamos y sufrimos la cruda juntos, valientes somos.
Amigo, eres lo mejor que me entregó la ingrata vida, pues contigo esta ha sido más llevadera,
sin ti, no la hubiera soportado y me habría, quizá, suicidado o ya habría claudicado.

Amigo. 
El tiempo ya ha pasado y a mi lado aun te encuentras, de verdad que me has amado, no se quien partirá primero, pero quien lo haga, preparará el camino para que cuando el otro llegue,
una fiesta como las de aquí tenga, para que no extrañe nada.
Amigos, los hay muchos, algunos llegaron y al rato se alejaron, otros se quedaron un poco más, pero tambien me abandonaron, pero tú, siempre a mi lado te has quedado, en las buenas y en las malas y en las regulares, en fin, tú eres el verdadero significado de la palabra amigo.

Amigo. 
Quiero que sepas, que sin ti la vida no habría sido la misma, que has sido la sal y pimienta, 
me has acompañado en todas mis aventuras y travesuras.

Amigo. 
Tus padres, mis padres, los míos, los tuyos tambien; tus hermanos, mis hermanos, los míos tambien los tuyos; mis primas, tus novias y las tuyas, tambien las mías, mil aventuras juntos y las que nos faltan por vivir, espero no sea la última de las aventuras.

Amigo. 
Todo lo hemos hecho juntos, si ganamos, si perdimos, fue juntos; nunca me dejaste abandonado ni tirado en ningún camino, siempre caminamos al mismo ritmo; si caímos fue juntos y nos levantamos tambien juntos. Vaya, qué sería de la vida sin tu amistad.
Dios es sabio, pues de mi costilla extrajo a mi compañera, pero a ti te extrajo de mi corazón.

Mi amigo, mi hermano de vida, gracias por aceptarme o más bien... Adoptarme. 
 


Quijote


Soy un ganador, eso dicen de mí, han escuchado mi historia, han escrito sobre mí, pero nada es verdad lo que hablan de mí, mi vida ha sido un caos; tal vez soy un fracaso pero he traspasado fronteras, no las que quisiera. Quisiera ser todo un ganador, un vencedor. Fantasmas me acompañan, con ellos me he bañado, con ellos he soñado, ellos me han dañado, hace mucho que me acompañan.
Sí soy un ganador, pues eso dicen de mí, lo habré sido a medias, no me gusta hablar de ello, espero lo entiendan, pero no todo lo que dicen de mí es cierto.
Todo un ganador, todo un vencedor, tal vez si un luchador, alguien que lucha por vivir, por sobrevivir, por ser feliz, por encontrar un honesto amor, una honesta amistad, he tenido que sufrir, me han usado, me han utilizado, me han engañado, me han avergonzado.
A mi cuerpo tuve que blindar, tuve de ellos que escapar, refugiarme en mi hogar, mientras ellos decían de mí, es todo un ganador me sentí todo un perdedor, por no lograr mis metas, siempre a expensas de la aceptación, de una palmadita a mi espalda, una falsa sonrisa, pero hubo tambien honestas, no hubo claridad para saber cual era bien, cual era honesta, cual era dehonesta.

Soy un ganador, porque eso dicen de mí, lo dijo mi madre, tambien mi padre, lo escuche de mi hermano y a veces de mi hermana, tambien de mi novia, más tarde lo dijo mi hijo, mi perro solo movió la cola, yo reí con su lengua en mi cara, pero nada de ello nunca por mí lo sentí, por eso se que no es verdad.
Si fuera victorioso, sería un ganador, me sentiría un ganador por haber logrado mis propias metas, por humildes que fueran, pero eran las mías, nunca las tuyas, las de otros, las que ellos colocaron para que alcanzara y de ello me regocijara. Sí lo hice y hasta lo disfruté, pero no eran mías, fueron metas de todos, menos mías, ni una sola fue mía, engañado estoy, pero con plena conciencia de que aun puedo alcanzar lo que me proponga, solo es de salir y decidir hablar conmigo mismo, escuchar lo que yo quiero, poner atención a mis pensamientos, sentir a mi corazón latir al escuchar una canción que hable de mis ideales, de mis metas, de mis amores, de mis amistades, de lo que pudo ser y no fue y de lo que realmente seré si así lo quiero, si así lo deseo, solo entonces seré ese ganador del que todos hablan y por lo que todos me adulan, esos que me aturden y me aburren con tanta melosería, con tanta mentira, solo mientras consiguen lo que de mí quieren. 

La verdad es que todo siempre va al ganador, las sobras le quedan al perdedor, pero te cuento lo que deseo hoy y es continuar con lo poco que me queda, avanzar hasta donde pueda, aunque me quede a media carrera antes de llegar a mí meta, si muero antes, eso no importará, para todos seré un perdedor, pero para mí sera la gloría y recibiré mi premio en la misma gloría, me recordarán por la eternidad, los que me conocen y los que aun no saben de mí me admirarán y me seguirán, pero nadie me adulará, pues ya no lo escucharé, todo lo que digan será la verdad, mi historia será la mía, yo la que construí sin importar mi edad.

No alcancé un solo sueño, pues primero coloqué los ajenos y eso me equivocó, me desvió y para ellos un ganador fui, pero la verdad, es que me traicioné, fracasado ahora soy, por no respetar lo que quise y anhelé, la vida se interpuso y hubo otros tambien que lo hicieron, a todos los escuché, pero a quien debí escuchar, a ese ni lo vi y ese era yo, traicionado por mi mismo; es eso un ganador, yo diría que no, un fracaso si.
Leerán mi historia y la admirarán, dirán, que hombre tan grande fue, miren lo que logró, tantas cosas nos dejó, a todos los satisfice pero nunca se lo hice a mí, mejor sería que nadie supiera de mí, mejor sería que no hubiera historias de mi vida, de mis trabajos, de mis logros, mejor si todo lo alcanzado lo hubiera solamente yo disfrutado, que diferente hubiera sido mi vida, antes de partir hubiera agradecido por alcanzar lo que siempre deseé, sin importar si fue bueno o no. 

Pero ya no quiero hablar, pensamientos como olas contra la roca hoy vienen a mí y recuerdo cosas que deje a medias, cosas importantes para mí, pero sin sentido para otros, las grandes para muchos no significaron nadad para mí, si por eso me recuerdan, digan que un fracasado fui y me entregarán la gloria, pues al menos habré hecho algo bien, que todos se den cuenta de mi inconformidad, de mi debilidad, de mi apatía, ya no quiero hablar pero debo hacerlo para que no te pase igual que a mí, para que seas un verdadero ganador, no una imitación de lo que otros nunca lograron; ellos si que fracasados fueron e intentaron encontrar sus triunfos a través de mí, debo decir, que lo lograron, pero al hacerlo un desgraciado hicieron de mí, no me permitieron vivir, tan sencillo pudo ser que aceptaran su derrota y dejaran que yo encontrara lo que entonces buscaba, yo no deseaba ser conocido en el mundo, solo deseaba vivir mi vida, pero el destino se interpuso o a lo mejor, ese fui yo, el que al complacer a quien amé por un lado deje tirada mi felicidad. 

De verdad que no quiero hablar, pero pienso que es mi deber, para que quien me lee, sea un verdadero ganador y se lo lleve todo, lo tome todo, viva con todo, encuentre su camino, caminé por él, viva en él, viaje por él, llegue por él. Y al final de su camino bajará de su caballo, colgará su armadura, mirará por donde llegó y de sus labios una sincera sonrisa, los ojos cansados y polvorientos, de sus zapatos mordeduras y agujeros, raspones en su piel, rasgaduras en sus ropas, los cabellos largos, una barba a medio cortar, un rostro delgado pero un corazón vigoroso, su vista se nublará y de ellos lagrimas brotarán, pero de alegría serán, tambien de nostalgia por haber regresado deseando iniciarlo de nuevo, salir en busca de otra aventura, pelear mil batallas más, besar mil labios más, amar a mil mujeres más, recordar a mil amigos fieles. 

Ahora si quiero hablar, no quiero detenerme, quiero seguir, quiero sigas conmigo, no mates tus sueños, tus anhelos, sé su cómplice no su prisionero. Mi caballo viejo está al igual que yo, se le ve cansado pero muy satisfecho, alimentándose está, la libertad de una pradera le espera. A mi, una mesa y mil hojas por escribir, pues debo dejar huella escrita de lo que viví, lo que logré. Quijote me llamarán y la verdad dirán, pues fui un caballero con armadura y todo, y a un fiel amigo que lo llevo en mi corazón, tantas cosas por contar y tan poco tiempo, pero lo importante será, que alguien, aunque sea solo uno, siga mi ejemplo y rompa los paradigmas, no viva vidas ajenas, no desperdicie el tiempo haciendo maldades, embruteciéndose, enajenándose,  
envejeciendo sin ejemplo por dar, pues un desperdició su vida será, no merecerá le digan hombre, pues nunca lo fue, ni será, imitación solamente eso es y será.

Lastima que yo no seré quien de su viaje volvió, eso bien lo sé, es otro sueño más que no pude vivir, tal vez solo lo leí, alguien antes lo escribió y antes de él hubo muchos más, pero nadie entendió, ni sobrevivió para iniciar ese largo camino que se llama vida. 
Y es qué, alguien sabe realmente qué es la vida, la verdadera vida, una sin cadenas, ni obligaciones, ni reglas, ni poder, ni ambición, sin restricciones, sin avisos de no se puede, sin avisos de prohibido, sin otras etcéteras, pues claro lo he descrito. 

Ahora di; Crees que has vivido, la vida es, como el continente negro, en donde el animal vive salvajemente y mata solo para sobrevivir, te imaginas qué adrenalina, sin armas nucleares, ni otro artefacto más que sus propias garras, a veces solo te observa y te respeta, el otro hace lo mismo, pues ambos están satisfechos; hoy no habrá muerte en ese paraje, hoy solo observar los celajes, la luna, las estrellas. Si eso no es vivir, no sé qué será, la única ley, la que Dios ordenó y en naturaleza convirtió, un mundo para vivirlo, no para destruirlo, ni contaminarlo. 

Ahora dime tú, soy o no un ganador, extiéndeme tu mano, mira en ella y di que vez, observa bien mis uñas, las ves limpias o con mugre, claro, un mundo soy para otros, mi cuerpo es un planeta para otros seres que habitan en mí. Pensarás que estoy loco, como lo estuvo aquel Quijote que un día viejo. Se asomó y pensó, debo salir por mi damisela, a defenderla de enormes monstruos y se colocó su armadura y ante la vista atónita de muchos se encaramó a su caballo y sobre él se internó por aquel camino que lo condujo por una vida por vivir y así la vivió. Ese fue todo un ganador.   Me entiendes por qué somos perdedores y cuerdos. 

Y termino con esta frase, la del poeta, quien antes de morir vio a su alrededor y dijo.

"Que lindo día y tenerme que morir"

Ojala y un día no digas eso. Si aun te quedan fuerzas, sal y pelea contra esos enormes monstruos, que nada, ni nadie te detenga, vive la vida, que ha eso llegamos a esta vida, para disfrutarla y vivirla, sin cadenas, ni patrones. Solamente y simplemente vive. 

miércoles, 28 de diciembre de 2016

La mujer con la que soñé


Alguna vez soñé con bella mujer. 

Cuerpo de maniquí.
Ojos de un profundo mar azul.
Cabellera como de fresca cascada entre montañas.
Labios carnosos, pero delicados, de donde podría beber la más embriagante y adictiva de las bebidas. 
Cejas que cubran como marco perfecto a sus ojos. 
Pestañas perfectas y curvas y alargadas para protegerlos del sol y que solo le permitan ver mi rostro. 
Mejías rosadas, pero no por vergüenza, sino de rubor al escucharme decirle mi amor. 
Brazos alargados y fuertes pero femeninos, que puedan dar calor a mi cuerpo desnudo. 
Manos con dedos delgados y alargados que hagan vibrar mi cuerpo como cuerda de violín.
Senos con un tamaño ideales para que quepan en mi boca, poder saborear de ellos la miel que trae en su cuerpo de mujer, como fruta prohibida del viejo Edén. 
Un dorso largo y plano, donde se le note disimuladamente una costilla, para recordar que me perteneces, pues eres parte mía, poder sentir ese calor que guardas para quien pueda abrir cada poro de tu piel. 
Un vientre no tan largo para encontrar de inmediato el lugar donde aplacar mi sed, agua tibia y cristalina, manantial de placer solo para mí. 
Piernas largas y muy bien torneadas, que con vestidura parezcan flacas, pero al desnudo sean perfectas maravillas, para enloquecer a cualquier mortal que desee a bella mujer.
Y que finalicen en un par de pies, bellezas que no se puedan ver en ningún otro mortal, por ser fabricados en el mismo cielo y solo por mí acariciados. 

Sí alguna vez soñé con bella mujer, estas fueron sus características físicas y me encontré con muchas así, al verlas me dije; ella es la mujer con la que soñé, pero al tratarla me desilusioné, luego vi otra y lo mismo fue, después otra, más tarde otra, hasta que comprendí que no podría ser, pues habían muchas y todas con un denominador común; la frialdad y la ambición, una que brotaba en cada poro de su linda piel. 
Entonces me senté como el pensador de Miguel Ángel*, por largo rato así quedé, que casi me convertí en esa bella estatua, seguro así fue como nació la inspiración para magna obra de arte.

Sí alguna vez soñé con bella mujer y con estás características, reconozco que me equivoqué, pues lo más bello en una lo encontré, me dije, qué tonto, tan equivocado todo este tiempo estuve, no niego que ella es bella, tal vez no como la que soñé, pero sí, la que encontré cuando me senté a meditar y mi error analicé.

Sí alguna vez soñé con bella mujer, debo decir que la encontré, porque mi rumbo redireccioné y ahora lo que en ella busqué, simple fue, solo deseé que fuera y tuviera un corazón perfecto, bello, hermoso, similar en características que alguna vez soñé, ese era el verdadero valor. 

Y ¿qué creen? Cuando en ella vi su valor como ser humano, para mis ojos fue exactamente la mujer que al inicio describí. 
Sí, la mujer con que alguna vez soñé. Así de bella la veo hoy, pero me quedaría corto, pues es mucho más bella, pues su belleza le brota por cada poro de su piel.





*Estatua del escultor: Auguste Rodin

Lo Juro


Te juro.
Por la luna que brilla en el cielo.
Por el sol que nos calienta en el día.
Que aun eres mi amor.

Te juro.
Por la lluvia que riega los campos.
Por la nieve blanca que cubre montañas.
Que aquí estaré para ti mi amor.

Te juro.
Por cada estrella en el firmamento.
Por el azul de los lagos.
Que espero solo por ti mi amor.

Te juro.
Por cada ola salada que llega a mis pies.
Por cada rosa que se baña en rocío cada mañana.
Que no dejaré de desear solo tu amor.

Te juro.
Por cada montaña, por cada volcán.
Por cada nube blanca.
Que nunca me alejaré de tu amor.

Te juro.
Por el infinito del universo.
Por la la belleza de la naturaleza.
Que puedes gritar al mundo mi amor.

Te juro.
Por cada palabra hermosa que nace del enamorado. 
Por cada verso que rima el poeta.
Que nada será jamás más bello que mi amor.

Te juro.
Por los azules de un cielo de verano.
Por el calor de un verano en la playa.
Que a ti pertenece todo mi amor.

Te juro.
Por cada hoja que en otoño se desprende.
Por cada flor que renace en primavera.
Que no habrá nada más sublime que nuestro amor.

Te juro.
Por cada dolor de una madre.
Por cada te quiero sobre el planeta.
Que me escucharás decir cada minuto mil te quieros, amor.

Te juro, que cada momento que no estemos juntos te los habré de pagar con mil besos, con mil palabras hermosas que nacen de un corazón enamorado, un corazón que no sabe de traición, que solo late para y por ti. 
Te juro, que por cada error recibirás una flor y un chocolate, por cada olvido de nuestro aniversario recibirás mil caricias en tu cuerpo al momento de amarlo, por cada lagrima que gasten tus ojos los compensare con otras igual pero serán de felicidad. 
Te juro, por el amor más grande sobre este planeta que no habrá uno más grande que el mío por ti. 
Te juro, que si amé tanto a sido solamente a ti, que si alguna vez soñé con la más bella mujer en ti la encontré y la amé. 
Te juro, que nada habrá que me haga dar un paso atrás, porque no me podría arrepentir nunca de amarte. 
Te juro, que no encontrarás palabras más bellas, ni versos que rimen mejor que nuestros cuerpos al hacer el amor, que nada será nunca mejor que nuestro amor, eso te lo juro mi amor. Te juro que no hay mejores colores sobre una paleta, ni un arco iris que los que veo cuando estás a mi lado, que no hay tiempo cuando estamos juntos, porque cada segundo será eterno y cada minuto será insignificante para quien ama como yo te amo. 

Por eso mi amor, hoy te juro, con la mano en el corazón y si Dios lo exige, sobre la Biblia lo haré tambien, que nadie nació para entregar a otro ser tanto amor, como el que conmigo aquí llegó, si vino era solo para ti, solo para entregarlo a quien tengo ahora conmigo, pues eres recipiente que recibe como agua, gota a gota cada pedazo de amor que siento por ti. 
Te juro que es verdad, pues nadie que ame tanto podría mentir, sacrilegio sería y en el acto moriría. 

Por eso: Te Juro... Que te amo con todo mi ser bella mujer. 

28/12/16



Te juro

Te juro.
Por la luna que brilla en el cielo.
Por el sol que nos calienta en el día. Que aún eres el amor de mi vida.

Te juro.
Por la lluvia que riega los campos.
Por la nieve blanca que cubre montañas. Que aquí estaré para ti mi amor cada mañana.

Te juro.
Por cada estrella en el firmamento.
Por el azul de los lagos. Que espero solo por tu amor y tus halagos.

Te juro.
Por cada ola salada que baña mis pies.
Por cada rosa que se baña en rocío cada mañana. Que no dejaré de desear solo tu amor como al sol que entra por mi ventana.

Te juro.
Por cada montaña, por cada volcán. Por cada nube blanca. Que nunca me alejaré de tu amor, por ser la luz que me ilumina.

Te juro.
Por el infinito del universo.
Por la la belleza de la naturaleza. Que puedes gritar al mundo mi amor con certeza.

Te juro.
Por cada palabra hermosa que nace del enamorado. 
Por cada verso que rima el poeta. Que nada será jamás más bello que mi amor por ti mi princesa.

Te juro.
Por los azules de un cielo de verano.
Por el calor de un verano en la playa. Que a ti pertenece todo mi amor y alma.

Te juro.
Por cada hoja que en otoño se desprende.
Por cada flor que renace en primavera. Que no habrá nada más sublime que nuestro amor como lo es una quimera.

Te juro.
Por cada dolor de una madre.
Por cada te quiero sobre el planeta.
Que me escucharás decir cada minuto mil te quieros con insistencia.

Por eso y más te juro que te amo con todo mi ser bella mujer. 

SergioRaga
9/12/2022 




martes, 27 de diciembre de 2016

NATALIA


Natalí.
Tus ojos y labios 
de colibrí.

Natalí.
De ellos siempre bebí,
el mejor néctar 
que la flor nunca a nadie le ofreció.

Natalí.
Recuerdo cuando llegaste a mí,
con lindos colores abanicabas
tu delicadas alas
que un colibrí te creí. 

Natalí.
Mujer inquieta y dificil de atrapar,
pues la rapidez con que te mueves
solo se compara con un colibrí.

Natalí.
Enamoras con solo ver tus lindos ojos
y tu especial sonrisa casi me mata,
agita tus alas y vuela hasta mí.

Natalí.
Piensa en mí, 
cómo la ansiada y buscada flor 
que tiene el mejor néctar para ti.

Natalí.
Desde que te vi
solo puedo pensar en tí,
nada en mí me pertenece ya, 
todo lo que tengo es para ti
mi bella Natalí.

Natalí,
La naturaleza colocó en ti
los colores de ágil ave.
La gracias de sus movimientos.
El olfato para encontrar entre mil flores la mejor.
La velocidad para definir a quien deseas amar.
Vuela a mí, mi bella Natalí.

Natalia. 
Es tu nombre real,
pero para mí, 
eres un bello colibrí.
Esa eres y serás 
mi hermosa Natalí.





Goodbye


Siento que no puedo más.
La música muere, las flores se marchitan, los colores pálidos son.

No hay más palabras, la comunicación se rompe,
solo se logra escuchar, un goodbye.

Mis dedos no sueltan a los tuyos,
mientras los tuyos desean alejarse de los míos,
ahora ya no te causan más sensaciones.

La ciudad solitaria para mi a quedado,
las playas ahora son témpanos 
flotando sobre el agua salada.

En mi pecho una herida grave
a la cual tanto silencio 
es como si le llegara una tonelada de sal.

Ya no más susurros con palabras de amor en mis enamorados oídos.
Solo quedo grabado aquel frío goodbye.
Es como si la música hubiera muerto, las flores se marchitan, los colores palidecieran.

Despues de aquel frío goodbye,
mi piel en cementerio se convirtió,
tumbas frías son el paisaje.
Cómo la frialdad que en mi corazón dejaste.

Tu adiós, es algo que habita en mi mente.
Arruga los pliegues de mi corazón.
Arrugas que incomodan a mi alma
quien desea abandonar mi cuerpo 
para correr detrás de ti, 
luego de aquel último toque de tus dedos sobre mi piel. 

Pasará mucho tiempo para lograr enderezar mi nave,
levantar mis velas, esperar a que les llegue el viento del amor,
para que naveguen de nuevo sobre las aguas azules
de la esperanza, la ilusión y la pasión de un nuevo amor.

Aun recuerdo las últimas palabras de tu sensual boca,
las que me dieron tanta miel,
de las que bebí el mejor vino, 
de la mejor de las copas, 
labios perfectos que se amoldaban a los míos.
Y de donde salió solo el último goodbye.

Al escuchar aquella palabra en otro idioma,
hizo que mi cuerpo sintiera como las fuerzas lo abandonaban.
A mi corazón lo despedazabas.
A mi alma la intranquilizabas.
A mi piel la condenabas.
A mis labios los secabas.
A mi hombría la desechabas.
A mí, todo lo enterrabas.
Con mi vida completa terminabas.
A una bella historia de amor un final inesperado le dabas.

Y de ti...
Solo escuché antes 
de verte caminar por el camino del destierro,
aquel desgarrante Goodbye.



lunes, 26 de diciembre de 2016

Muñequita


Muñequita hace frío aquí, 
muñequita hay frío en mi corazón,
tambien oscuridad y tremenda soledad.
Muñequita no te logro hallar.

Muñequita tú quizá no lo sepas 
pero mi corazón te necesita hoy,
aplacar quiero este frío, oscuridad y soledad
pero aun no te logro encontrar.

Muñequita alegras mi corazón,
lo alejaste de la inseguridad
y en cálido lugar se convirtió,
quizá nunca lo supiste y quizá nunca lo sepas,
pero mi corazón te necesita mucho hoy.
Muñequita te busco y no te logro ver.

Muñequita hace frío hoy,
mi corazón congelado, oscuro y solitario,
sin poder lograr encontrar 
a quien alejó de mi tanta inseguridad.
Muñequita mi corazón te necesita hoy.

Muñequita lejos de ti estoy,
siento un vacío en mi corazón,
te necesito tanto y quiza no lo sepas
pero te amo mi corazón.
Ven, calienta y aleja esta soledad, 
tambien mi oscuridad y esta inseguridad.

Muñequita ven, quiero apretarte contra mi pecho,
lugar el que es tu hogar;
cálido lugar que tempano es hoy.
Con cielo de colores, los que no aprecio
si no estás Muñequita aquí a mi lado.

Muñequita tú no lo sabes y quiza nunca lo sepas,
pero te extraña mi corazón,
para alejar de mí tanto; frío, oscuridad y soledad
devuelve la seguridad a mi corazón.
Regresa mi muñequita hoy.

Muñequita hace frío aquí, hace frío hoy,
si no vuelves podría morir hoy.
Te busco con ansiedad, 
pero no logro encontrarte en mi corazón,
ese lugar, que fue tu hogar. 

Muñequita, regresa porque muero hoy. 
Indigente soy, muriendo de frío 
en una calle oscura y vacía.
La inseguridad se apoderó de mí, 
mi valor abandonó a mi corazón,
el amor se alejó de tu mano y solo me dejó.
Regresa por que si no yo muero hoy,
en mi pecho esta tú hogar.

Muñequita necesito de tu amor,
hace frío hoy, muero con tanta soledad,
esta oscuridad me ha devuelto mi inseguridad.
Cómo indigente, muriendo en la calle del desamor estoy,
regresa y salva a mi corazón.

Muñequita hace frío.
Muñequita un tempano soy.
Muñequita sumergido en soledad y oscuridad estoy.
Muñequita regresa y llena mi corazón.
Muñequita tú quizá no lo sepas, pero mi corazón esta vacío.
Muñequita muero de frío, ven y calienta a mi corazón.
Muñequita no olvides que por largo tiempo este tu hogar fue.
Muñequita ven pronto que muriendo estoy.
Muñequita hace frío en mi corazón. 
Muñequita regresa pronto, te lo ruego, porque muero sin ti estoy; de frío, oscuridad y soledad. 

Muñequita: Indigente de amor sin ti soy.  











viernes, 23 de diciembre de 2016

Hasta hoy


En estas fechas decembrinas aunque estoy con mi familia esperando a que suenen las doce campanadas, indicando que el año se muere y otro nuevo llega, por un momento me alejo de mi familia y me llegan recuerdos tuyos.

Hasta hoy. 
Sin saber en dónde estás, me invade un sentimiento que no logro explicar.

Hasta hoy. 
Que el tiempo avanzó, que tengo todo para mí, tengo a quien amar con todo mi corazón, me llegan a mi mente recuerdos tuyos y repito, ¿dónde estás?, ¿qué harás?, ¿me recordarás?

Hasta hoy. 
Te pienso y aunque trato de no recordar, no logro a mis pensamientos distraer, divagar en otros recuerdos que no sean los tuyos, siempre llegas a mí.

Hasta hoy. 
¿Por qué no he podido olvidar? Me suele suceder solo en esta fecha que es especial, tengo a la persona que amo a mi lado y veo a mi familia feliz, nada tengo por pedir, pero a mí, tú recuerdo llega hoy como instantánea. No me logró explicar por qué no logro olvidarte, enterrarte en el pasado, porque eso eres hoy.

Hasta hoy.
Sin escuchar un nombre similar al tuyo que me traiga a mi mente tu recuerdo apareces como fantasma del pasado, ahora entiendo que no será fácil olvidar. Te juro, pienso en ti y no puedo con nadie hablar de esto.

Hasta hoy.
Al llegar la media noche y escuchar la cuenta regresiva, apareces de nuevo en mi vida, en mis recuerdos, no puedo evitarlo y a penas lo puedo disimular, a veces me preguntan: ¿En dónde estás? Yo respondo: ¡Estoy aquí! Pero ambos sabemos que no es así. ¿Me recordarás cómo yo a ti? Esa duda se queda en mí guardada hasta otro fin de año, que seguro a media noche regresarás a mi mente y en ti pensaré como cada año desde el día en que terminó lo nuestro.

Hasta hoy. 
Que estoy feliz con quien compartir mi amor, no es fácil olvidarte, te juro pienso en ti, veo a mi alrededor y tengo todo para ser feliz, y así lo soy, pero aun pienso en ti. ¿Será qué a ti te pasa lo mismo?

Hasta hoy. 
Que ya no siento amor por ti, pues tengo a quien amar y de quien recibir amor, te pienso siempre, a mi mente llegas como el fantasma del pasado a revolver mi vida, en silencio te deseo felicidades, deseo que estés muy bien, como yo lo estoy, abrazos por acá y otros por allá, y sigues aquí en mi mente junto a mí. Hasta que me abraza a quien amo hoy, desapareces y mientras lo haces te digo...

¡Hasta el próximo año!...  

Ni un Roce y yo queriendo (las canciones de mi vida)


_ ¿Qué te parece el lugar? ¿Está bonito verdad? 

Le dijo su amiga, quien la invitó a salir esa noche, pues llevaba tiempo sin salir, luego de la ruptura con su pareja.

_ Está bien, no está mal.

Respondió la chica no muy convencida, mientras miraba a su alrededor, cuando lo hizo, al otro lado del lugar se encontró con unos ojos que la veían con atención, ella disimuladamente vio para atrás de ella, para verificar si no había alguien que le pudiera llamar la atención a quien miraba fijamente hacia donde ella se encontraba, pero, nada, detrás de ella no había nadie solo la salida del lugar, ella con mucho disimulo vio de nuevo y se encontró con quien la veía hacía ya un rato, él acariciaba su cabello, para llamar su atención, ella al percatarse de que él la buscaba con la mirada, bajaba la suya o hablaba con su amiga quien ya se encontraba acompañada por alguien, se repetía por adentro: -Mi amiga ya esta acompañada y tú sigues ahí mirando nada más, me confundes con tu mirada, ¿será qué te atraigo o simplemente miras por ver?, me encantas, ven a mí, siéntate a mi lado. Esto pensaba la chica, quien no lograba disimular que el chico quien la veía con interés la atraía mucho. 
Este seguía entre sus amigos haciendo cosas que le agradaban a la chica, cosas para llamar su atención, en otras ocasiones hacía como que no la veía, pero en realidad usaba un enorme espejo que había en la pared del lugar para observarla, pues su mirada le buscaba la de ella. 

Mientras este coqueteaba, ella fantaseaba con él, ella se imaginaba sudando y con la mirada perdida en el techo sentada sobre él completamente desnuda. Esto le causaba a la chica mil sensaciones, las cuales llevaba un tiempo sin sentir, se decía: -Tantas cosas por decir, pero estás como si nada, me confunden tus miradas y todo se queda en eso, simplemente en miradas seductores, haces cosas que me desconciertan, creo que deseas lo mismo que yo. Mientras mi amiga sigue a mi lado, besos y abrazos apretados, caricias elevadas de tono y yo sigo aquí, deseando aunque sea un roce de tus dedos, deseando llenarme de placer, deseando sentir en mi boca tú sabor, ni un roce y yo queriendo hacerte el amor.

El tiempo transcurría y solo eso, miradas, ahora más insinuantes, ya no eran disimuladas, ahora eran tan evidentes, pero el chico no salía del grupo de amigos. 
La chica se decía: -Uno de nosotros va a tener que rendirse, uno de nosotros va a tener que decidirse, uno de nosotros tomará la iniciativa, si no eres tú, seré yo. 
El chico la veía y ahora le saludaba con su copa, ella respondía con una picara sonrisa, pero solamente eso, nada de tomar la iniciativa. Habían muchas cosas por decir para llegar a mí. Se decía. Pero tú, no te propones por hacer nada, no vienes hacía mí, me confunden tus miradas, haces mil cosas que me agradan, mil cosas para llamar mi atención, cosas como acariciar tu cabello, ríes y me ves, mientras lo haces tengo sueños contigo, pero mientras tu mirada solamente me busca una y otra vez. Mi amiga a mi lado disfrutando del placer con un desconocido que si se atrevió, besos y abrazos apretados. 
La chica de al lado, quien la llevó a ese lugar, ya muy caliente, le dice.

_ Amiga, te va a tocar irte sola, ¿no hay problema verdad? ¿tú me entiendes verdad? lo siento, te veo mañana y te cuento como me fue, adiós.

La chica se levantó y se largó del lugar con quien se levantó en el bar, ella se quedó ahí, aun deseando un roce de la piel de quien aun la veía con insistencia pero que no se atrevía a llegar con ella a pesar de que ahora era el momento indicado pues, había quedado sola, pero el chico no se proponía acercarse hasta ahí, seguía como si nada, pero sus miradas lo confundían aún. 

_¿Será que todo quedará así, solo miradas nada más? 

Se repetía la chica ya algo inquieta y nerviosa, pues el chico le gustaba como nadie antes le atrajo.  -Uno de nosotros va a rendirse, uno de nosotros va a tener que decidirse. 

Mientras que su miradas en ella otra vez. -Y yo no puedo ya contener todo este deseo de placer por él. La chica seguía soñando con lo que podía ser esa noche llena de placer, un placer que le hacía mucha falta pues, hacía mucho no tenía una cita.

Cuando ella se resignó de que nada pasaría con ese chico, empezó a preparar sus cosas para irse, pero cuando vio por última vez al chico quien la tenía deseando un roce de su piel, soñando con lo que pudo ser esa noche, buscando el sabor de su boca en la suya, ni un roce y ella deseando llenarse de placer, ella se asustó pues, cómo era posible que pudiera enamorarse de alguien que aun no conocía.

El chico se levantó de su lugar, dejó al grupo de amigos y se encaminó hacia donde se encontraba la chica deseosa de un roce de su piel.

_ Al fin, ahí viene, me haré la desentendida.

Se dijo y así lo hizo, pero el chico siguió de largo, paso a su lado y ni un solo intento por acercarse a ella, lo vio alejarse de ella, se dirigió hacia afuera del lugar, ella desepcionada tomó sus cosas y pidió la cuenta, la pagó y salió de aquel lugar en donde por unas horas soñó con lo que pudo ser, soñó con llenarse de placer, soñó con el sabor de los labios de quien la vio y no dejó de llamar su atención toda la noche, haciéndo cosas agradables para llamar su atención. 

Así, muy desalentada llegó hasta la bocacalle pues, llegaba por la calle un taxi, ella levantó su brazo y le hizo la parada, pero este iba ya ocupado y siguió su camino, la chica bajó la mirada pues, se iba de aquel lugar muy desilucionada, desepcionada, se sentía que no era deseada por nadie, iba tan deprimida que juró no volver a un lugar como al que ahora dejaba. 
Pero en ese momento de depresión y meditación, se detuvo ante ella un auto lujoso, último modelo, de color rojo y sillones blancos, descapotado pues, la noche era fresca, cuando el auto se detuvo ante ella, quien lo conducía le pregunto con sonrisa en sus labios.

_ ¿Te llevo a algún lugar?

Ella exaltada y emocionada con sonrisa en sus labios, respondió de inmediato.

_ Sí, claro, gracias.

Abrió la puerta del auto y entró en él, se acomodó, dejando a los ojos del conductor dos preciosas piernas bronceadas, la minifalda le llagaba hasta donde iniciaba el blanco de su ropa interior.

_ Soy Javier y no he dejado de fantasear contigo toda la noche, esperaba el momento indicado para acercarme a ti, pues no quería me dieras un no.
_ Yo soy Alice y esperé toda la noche por ti, pero pensé que no te gustaba, pues nuca que llegabas a mí y cuando te vi salir, me asusté y me desilucioné, ya me iba sin ti, pero te llevaba en mi mente y en mi corazón.
_ Perdona que pase por tu lado y no dije nada, pero el mesonero me avisó que alguien deseaba salir y mi auto se lo impedía, así que me tocó salir a mover mi auto, pero llevaba en mente, que al entrar de nuevo al bar, no pasaría de tu mesa, me quedaría contigo, pero cuando iba a acomodar mi auto vi que detenias un taxi el cual, gracias a Dios no se detuvo, entonces me dije, esta es la oportunidad que he esperado toda la noche.

El auto rojo y los chicos deseosos de un roce de su piel, de conocer el sabor de sus labios, deseosos de llenarse de placer, ambos se perdieron por la calle soñando con lo que más tarde sería...




Inspirado en la canción del mismo nombre: Ni un Roce de: A. Gabriel, P. Massadas y M. Sullivan
Historia de: A. Gabriel, P. Massadas, M. Sullivan y S. Raga

miércoles, 21 de diciembre de 2016

Honestidad


Intentando ser honesto, alguien con sinceridad, en esa encrucijada estoy hoy, no deseo hacerte sufrir, no quiero verte llorar, me duele el corazón ver en tu carita un puchero. 
Pero quiero ser honesto, ser sincero con quien me dio tanto de ella, pero ya no te quiero, te deje de amar, hace mucho que mi corazón dejó de hacerlo, desde entonces estoy solamente con una mascara de amor, pero me cansé, no te lo mereces, mejor es un dolor y luego rehacer tu vida con alguien que sí te amé, pues ya no puedo yo.

¿Cómo hacer? para encarar a quien tanto amé pero que el hastío pudo más, a nuestro amor aniquiló, lo mató, se muy bien que tú aun estás ahí, en la parada del amor, lugar en donde no pasa el autobús para quienes se aman, nadie te lo ha dicho, lugar en donde hubo amor, hoy solo lo abordará el dolor. 
Honestidad es lo que tengo en el corazón, es dificil, pues causa tanto dolor, pero tal vez es lo mejo, seré un lindo recuerdo aunque hoy me odiarás por ser quien dejó de amarte mientra que tú aun me amas. Pero si fueras tú, quien ya no me ama seguro me lo dirías, honesta serías. 

Cómo duele la verdad, cómo duele ser honesto, cómo duele la honestidad, pero duele más esta careta que llevó en mi rostro y mi corazón, besos sin sabor ni razón, caricias hipócritas llenas de un mal sabor, palabras que ya no volverás a oír de mí, cómo un te amo mi cielo, cosas como estás, las que me reprochas por quedar en silencio, esperando la respuesta a tus frases llenas de amor y ternura para mí, pero de mi parte nada para ti, eso no es justo. 
Honesto siempre fui, cuando dije amar te amé y felices fuimos, pero ahora cada quien debe seguir su camino, lamento que no coincidan más, autopista con dos vías hay enfrente a nosotros una para ti, la otra para mí, hasta aquí llegó nuestra historia de amor. 

Seguro que querrás que siga engañándote para no sufrir, pero eso no es vivir. Difícil es para mí, tener que entregarte tanto dolor, llorarás y sufrirás, pero es lo mejor, alguien te encontrará y sola ya no estarás, el verdadero amor esta a unas cuadras de aquí, para ti y para mí, pues errados hoy estamos y si no soy honesto, ambos infelices seremos, yo detrás de esta mentira y tú esperando de mí lo mejor, las mejores caricias, los más dulces besos, algo que ya murió en mí y pronto pasará en ti. 
Quizá es lo mejor, un momento de duro dolor, si lo deseas seré tu mejor amigo, pues es el único sentimiento que despiertas ahora en mí, aunque parezca absurdo, pero quien lo siente más ese soy yo, porque sé el amor que mataré en ti, ese amor que aun vive en ti para mí, de los mejores lo reconozco, pero en esto, la razón no tiene nada de importancia, pues quien manda en cosas de amor es el corazón. 

Tanto por decir, pues no sé cuando hacerlo, cómo empezar para acribillar tu corazón, asesino ese día seré, uno al cual la justicia no le tocará o tal vez si, pero honesto seré, acaso esa será mi defensa, lo entenderás, espero que sí, honesta quiero seas, al igual que yo, sabes que te amé y fue hermoso pero ni cuenta me dí cuando mi amor llegó a su final una carrera desigual. Recuerdo lo que me consto para que me amarás, quien me diría que el que se marcharía sería yo, parecía que esa serías tú. 
Honesto soy, pero cómo no herir a quien aun me duele hacerle daño, será lo mejor, tienes tanto amor para compartir, injusto sería que no lo des a quien ansiado esta por él, yo encontraré a alguien con quien compartir lo que ya no puedo darte a ti; honesto soy, al decir que te di siempre lo mejor, lo debes de reconocer, pues felices fuimos y que duró lo que debió, pero todo en esta vida tiene un principio y un final, dichosos son los que los separa la muerte.

El verdugo está vez seré yo, la guadaña del desamor la tengo en mi mano yo, prometo ser certero para que tú amor muera sin agonía, sin dolor, será por los viejos y buenos tiempos. Quizá alguien más adelante piense todo esto que ahora pienso yo y ella sea la que me acribille a mí, yo sea quien sufra, yo sea quien lloré y en mi cara vea ese puchero, honesta quiero que sea, no quiero amor de caretas, por ser tan frías, tan insensibles, amor de engaño por pena o lastima, no.

Al patíbulo me dirijo, caminaré la media milla, con rumbo a cumplir tu sentencia, ahora voy, en mi mano el arma mortal, la que te dejará moribundo el corazón, en mí, ahora el verdugo verás, alguien que te amó y con ternura te cuidó ahora será quien acabe contigo, duro es para mí, como lo será para ti. Honestidad, maldita honestidad, sinceridad malvada eres; justo, eso no existe o ciega dicen que es, pero en mi caso, mi justicia solo ve con un ojo, pues el tuyo sigue tapado, un punto ciego, por no querer ver lo que tengo que hacer, debería de ser más sencillo pero dificil es, fue mucho más fácil conquistar a corazón inconquistable que ahora abandonarlo. 

Pero soy hombre, al menos de eso me jacto y hoy lo seré, te veré a tus bellos ojos, en ellos un mar de ilusiones, un mar de sensaciones, un paraíso del que deseo huir, si eso no es doloroso no sé que lo será, dejar a maravilloso lugar por uno desértico en busca de otro que me de lo que ya no encuentro en ti. 
Las horas pasan tan rápido para mí, lentas para ti y así será de ahora hasta que un día llegué otro caballero a rescatarte del dolor que te heredaré, quisiera que mientras hacia ti voy con malas noticias algo me hiciera cambiar, cambiara nuestra suerte, nuestro futuro, pero honesto hoy seré y la honestidad con el amor terminará, dificil situación la que me tocó vivir, tan fácil sería solo desaparecer, pero eso no sería honesto, pues estarías con la esperanza puesta en que volvería y esperando, tu juventud se marchitaría, mientras yo feliz en otro lugar y otros brazos. 
Debo cerrar este circulo para iniciar otro, como será eso no lo sé, tal vez un día me encuentre contigo y al verte el amor reviva en mí y en ti no muera, pero eso no lo sé, lo que sé es que debo ser sincero. 

Ya estoy aquí, te logro ver a pocos metros de mí, como depredador me llega tu olor y confieso que ese olor es de amor, tu ojos faros son, los que me salvan de naufragar, pero un buque de guerra hoy soy, un portaaviones con misiles mortales, mi objetivo lo tienes en el pecho, tu corazón esta por morir. 
Ya me acercó a ti, Dios dame el valor, que bella mujer que eres, pero tu belleza ya no tiene importancia, lo que importa lo llevo por dentro de mí y por dentro de ti.
Ya estoy aquí, te saludo y me dices: Hola mi amor. ¿Para que me has citado hoy aquí? Bello lugar, no lo conocía, gracias te doy por tenerme aquí. 
En sus ojos la ilusión de una maravillosa tarde, me duele tanto el corazón, no puedo hablar, la careta ya la quité de mí. ¿No ves mi rostro? ya no es el mismo. Olvidé que tus ojos vendados aun están y solo puedes ver al mundo de color rosa, míralo bien por ultima vez, pues negro pronto para ti será y para mí tambien. 
La separo de mí, la alejo de mi lado. Ella me ve con extrañeza, no logra aun ver con claridad, pero su corazón late mucho más aprisa, él presiente que algo no anda bien y es que estas cosas son cosas del corazón, no son de la mente. 
¿Qué pasa mi amor? Fueron sus ultimas palabras, pues yo le dije.

Honestidad hoy hay en mí...  

lunes, 19 de diciembre de 2016

Una noche más


Una mirada más a la noche.
Estrellas que brillan como nunca antes,una luna que ilumina a todos en la tierra, sobre mis ojos, en mis pupilas, ellas se reflejan y como fotografías ahí quedaron quemando mi retina.

Una mirada más a la noche.
Estrellas fugaces en franca competencia por ser elegidas y solo una, la que entregue el mejor deseo, el cual seguro será, uno que involucre al amor.

Una mirada más a la noche.
Pentagrama de la mejor melodía que sin emitir sonido alguno, solo con verla la podrás escuchar, pues todas estas estrellas titilan al ritmo de ella.

Una mirada más a la noche.
Hipnosis para enamorados que las estarán ahora observando, nada mejor para estar con alguien en el mirador observando al único testigo para una noche de amor. 
Para jóvenes amantes por entregarse y estrenarse.

Una mirada más a la noche.
Aquella que dará quien se despedirá de este mundo, el que verá con nostalgia la belleza que ya no podrá ver más, porque va con rumbo hacia ellas o se dirigirá en sentido contrario, en donde jamás sabrá de ellas, lugar donde jamás vera a otra estrella brillar.

Una mirada más a la noche.
Nostalgia, para quienes se enamoraron con este marco tan bello y particular.
Nostalgia, para quienes se despidieron con ella como testigo.
Nostalgia, para quienes se entregaron por vez primera su amor.
Nostalgia, para quienes una noche como esta al mundo llegaron y su signo les fue asignado.
Nostalgia, para quienes como yo, suspiran enamorados cada vez que ven un cielo con tantas estrellas, joyas brillantes y como dije, cuelga de ellas una enorme, bella y plateada luna llena.

One more look at the night


Tomándome un trago, me vino a la mente recuerdos que me hacen llorar, momentos que me hicieron feliz, sentimientos afloraron a mi piel, una que hace mucho acaricié, me levanté y me dirigí al balcón, solo una mirada más a la noche. 
Eso bastó para que me entrarán deseos de ver tu cara, admirar tu cuerpo, oír tu voz, bebí mi trago de un solo sorbo y le di otra mirada más a la noche, la que me entregó el valor de correr hasta donde estarías, pagué la cuenta, salí del bar, el que a pesar de estar lleno para mi estaba igual que mi corazón, completamente vacío. El valet llevó mi auto, le di la propina, me subí en él y conduje, mientras lo hice un semáforo se colocó en rojo y me detuvo, impaciente estaba y de mis ojos, lagrimas. Era el licor o cada remembranza, no limpie mis lagrimas lo que hice fue recostarme en el volante y de nuevo, solo otra mirada más a la noche, la que me invitaba a buscar a quien creí olvidar, pero ahora comprendo que no pude, la luz dio verde y yo seguía perdido en la oscuridad de la noche, la cual me presentaba escenas con tu lindo rostro, pero un auto me bocinó y entonces di marcha y continué mi viaje con rumbo hasta donde estarías, de ahí en adelante, los semáforos solo parpadeaban sus luces amarillas, me daban el paso, el cual tome sin precaución, ignorando lo que la luz me indicaba. 
Mientras conducía de vez en cuando veía una vez más a la noche, en ella miles de estrellas y entre nubes alargadas y blancas se escondía una luna llena, esa que cada noche que podíamos admirábamos abrazados y así a veces nos amaneció observando la noche. Esos cielos estrellados que ahora por la contaminación es raro lograr apreciar, pero para mí, esta noche era como una de ellas, clara y muy iluminada, hasta una estrella fugaz se a travesó en mi camino, aproveche y pedí un deseo, el cual no debo de explicar pues era obvio cual este fue. 

Por fin abandone la gran ciudad y cogí una avenida, una freeway, aumente la velocidad para evitar una remisión, conduje por más o menos 45 minutos y por fin llegué al lugar, detuve mi auto y me acerqué a la garita, el guarda me dijo. 

_Buenas noches señor, ahora le abro.

Además agregó mientras levantaba la talanquera y se quitaba el sombrero.

_Ya ha pasado mucho tiempo sin verlo, seguro la señorita se llevará una tremenda sorpresa. _¿Desea lo anuncie? 
_No, por favor no, quiero sorprenderla. Además mire que bella noche la que está haciendo. 

Ambos dimos una mirada al cielo y este seguía hermoso, nos vimos el rostro y solamente sonreímos, me deseó buena noche y seguí, conduje hacía arriba del vecindario y cuando estuve en lo más alto, vi su casa, detuve la marcha del auto, lo parqué y de mi auto bajé, me encaminé hasta la puerta principal, busqué debajo de una vieja estatua que está al costado izquierdo de la entrada principal, un adorno que a ambos nos gustó y lo compramos, recuerdo que convergimos que este sería su lugar, como señal de nuestro protector, ahora recuerdo como reímos por esa tontería, creo escuchar su risa, si que fue hermoso. 
Muy suave introduje la llave en el cerrojo, me dije, suerte aun está esta llave, ella olvidó cambiarla de lugar o la dejó ahí por si un día regresaría, sin hacer ruido, entre en la que fue mi hogar por mucho tiempo y que por esas cosas tontas de la vida un día de ella con maleta de ahí salí, hoy me arrepiento, espero no sea tarde. 
A mi encuentro salió nuestra mascota, vaya como esta crecido, él me lamía el rostro de emoción, me alegró no me olvidará, le dije mientras le acariciaba debajo de la oreja algo que siempre le gustó y eso lo volcaba boca arriba para seguir con su barriga y así se quedaba dormido cómo se quedó hoy. Sin hacer ruido seguí por la sala y subí como si fuera un profesional amigo de lo ajeno, me extraje los zapatos para no hacer ninguna clase de ruido, un rechinido sería mi ruina y la sorpresa se echaría a perder, mientras subía por las escaleras suplicaba al cielo, quien me hizo volver que no me encontrara con penosa sorpresa, ya saben, otro en su cama, el que me haría olvidar y sacaría de su mente y de su corazón, pero gracias a Dios entre en el que fue nuestro cuarto y nada, solamente las cortinas que dan al patio trasero cómo fantasmas ingresaban en la que fue nuestra habitación, la cama estaba aun ordenada, señal de que aun no se había dormido y que estaría despierta, caminé hasta donde levitaban los fantasmas de las ventanas, por ella entraba un fresco delicioso y la vista era maravillosa, una grama que brillaba con la luz de una luna plateada, luego más allá, casi en la bajada, el declive del terreno se observaban una constelación de luces artificiales, las de la ciudad, del lugar de donde acababa de llegar, y mucho más al fondo por detrás de la cordillera de montañas que rodeaban a la enorme ciudad y arriba de ellas, miles de piedras preciosas que decoraban la garganta oscura del cielo, di una mirada más al cielo, la imagen era demasiado hermosa, pero en ella faltaba lo mas bello, lo que me había hecho volver a mi hogar. Salí de la casa, no sin antes colocar mis zapatos, me caminé por entre los rosales y sobre la delicada y suave alfombra natural, en la cual me hundía, recordé cuantas veces no fue nuestro tapete de amor, caminé otro poco entre aquellos ricos aromas, cuando una ola de fresca brisa me dijo donde se encontraba a quien con ansias buscaba; a mí llegó delicioso aroma de un perfume que le di en nuestro primer aniversario y que desde entonces ya no cambio nunca más ese aroma, fue fácil, pues solo seguí la deliciosa fragancia y justo detrás del único árbol del enorme jardín de la parte trasera de nuestro hogar, un paso frente a él, me encontré con la mujer que tanto amé y aun amo, estaba de brazos cruzados, ella tambien le daba una mirada al cielo, su mirada melancólica, perdida entre las estrellas y el firmamento oscuro, su vestimenta larga, era otro fantasma que deseaba abandonar su cuerpo para dejar a la vista a espectacular figura femenina, yo me detuve para observarla, pues la vista era la mejor, ni las estrellas, ni las luces de la enorme ciudad podrían opacar a tan magnificente imagen, la de mi mujer; lentamente me acerqué, me coloqué por detrás del árbol y en ese instante, mi perro me agarró del pantalón, me tocó que rascarle la oreja de nuevo y este cayó boca arriba y seguí con su barriga y de nuevo se quedó dormido, vaya guardián el que teníamos, ella no escuchó, y si lo hizo no se volteó, siguió sumergida en la bella noche, ella veía al cielo, el que brillaba como hace mucho no lo hacía, me dije, esto lo planeó el cielo y sus estrellas, pues él me trajo hasta aquí, me dio valor para regresar y a ella la tiene atrapada, como despistada para que yo pueda sorprenderla; abrazando el árbol seguía pues, no tomaba el valor de abordar a mi amor quien parecía esperaba con ansias a que lo hiciera, lo único que se me ocurrió para tomar el valor necesario, fue dar una mirada más al cielo, de él, miles de ojos me guiñaron sus ojos, ellas eran mis cómplices y me dijeron; es ahora o nunca. 
Salí de mi escondite y por la espalda abrace a mi amada, a mi gran amor, ella sintió mis brazos rodear su delgada y delicada figura, ella su cabeza inclinó un poco hacia atrás como sabiendo que era yo, nada se sorprendió, ni me reclamo, por el contrario, al recostar su cabeza y quedar nuestras mejías sintiendo el calor deseado de tan delicada y recordada piel, ella me susurró...

_¿Por qué tardaste tanto, te esperaba?

Eso me sorprendió, pensé, qué pasó, qué clase de embrujo fue el que me trajo hasta aquí, pareciera que ella sabía que vendría y esperaba por mí. 
No dije nada, simplemente junto a ella le di una mirada más al cielo y repetí gracias amigo. 
Ella solamente sonrió, y eso más me intrigó, pero antes de que dijera otra tontería más mis labios los cerró con un cálido y tierno beso y así abrazados, solamente observando a quien nos unió de nuevo nos quedamos hasta que nos amaneció, estuvimos ahí acurrucados, abrazados, dando una mirada más al cielo y a nuestro lado con la barriga al cielo, nuestra mascota, los tres de nuevo unidos y esta vez para siempre. 
Pero antes de que el solo relevara a la oscura noche, ambos con suspiro en pecho, dimos una mirada más al cielo y a la noche. 

domingo, 18 de diciembre de 2016

Cada vez que te alejas de mí


Cada vez que te vas, siento que muero por dentro, mi corazón se rompe en mil pedazos, pues mi corazón, de cristal es cuando me enamoro.

Cada vez que te vas, veo con nostalgia alejarte de mi lado y cada paso que das, el cual te aleja de mí, es como puñalada para mi corazón.

Cada vez que te vas, imagino que te perdí, que otra como tú nunca encontraré, por eso cuando veo que a mí regresas, de alegría muero entre tus brazos.

Cada vez que te vas, sobre ti mi sol viaja, dejando sobre mí una oscuridad que me atrapa y congela a mi piel, necesito que la calientes, vuelve por favor, que muero de frío.

Cada vez que te vas, de mis ojos brotan ríos salados, mi pecho se encoge, mi corazón late apresurado, es de miedo, de saber que te he perdido.

Cada vez que te vas, tomas de mi lo mejor, eso te llevas contigo, me dejas sin nada para ofrecer a quien podría sustituir tu vacío en mí, tu amor, el motor que le da vida y energía a mi cuerpo.

Cada vez que te vas, cómo muerto viviente quedó, sin parpadear pues no puedo, mis ojos se han quedado perdidos, por mis venas no circula sangre, lo que hay en él es vinagre, creo que estoy vivo, pero la verdad es que estoy muerto.

Cada vez que te vas, al cielo desesperado grito y pido que vuelvas, la vida sin ti no es vida, me acostumbre a llamarte mi vida y al irte contigo te la llevas... ¡Regresa mi vida!

Cada vez que te vas, parado ahí quedo con el desconsuelo en mi rostro, soy inocente cachorro que su amo dejó abandonado en solitario camino, muriendo y gimiendo, perdido por verse lejos de a quien tanto amó.

Cada vez que te vas, me pregunto: ¿Se irá para siempre o un día volverá? Vaya melancolía, esa será mi compañía, mientras decidas que haces con mi vida.

Cada vez que te vas, cada vez que de mí te alejas, que de mi lado te vas molesta por algo que ni yo entiendo que pudo ser te causo tal enojo, que te volvió indiferente a mis suplicas, te amo pero no te entiendo y aun así te mantengo a mi lado, creo que es amor lo que hace que cada vez que te vas sin dar explicación ni razón, me sienta mal y a la vez confuso preguntándome: ¿Qué hice? para que molesta de mi te alejes, sin aparente motivo. 

Aguanto de ti cada desplante, pues te acepto con tus virtudes y tus defectos, pero tú no me das oportunidad de enojarme ni de broma, creo que no me amas como yo a ti; debo trabajar mejor en la manera de entregarte mi amor. 

Divergencias que se dan en parejas disparejas, pero que en el fondo sabemos que nos une un enorme amor, por eso debo soportar y debes soportar mis errores, perdonar mis diferencias, pues para mi son cosas buenas, sin relevancia, pero par ti parecen ser, decisiones que podrían atraer catástrofes. 

Sin embrago, cuando algo grave nos separa, entonces emerge el iceberg de amor que llevamos bajo nuestro océano de amor y que vive por debajo de nuestra piel y en ese instante, me abrazas y me reconfortas. 

Entonces nos entendemos a la perfección, por eso sabemos que nos amamos y por ello, cada vez que te vas, se que volverás, pues tanto tú como yo, sabemos que no sobreviviríamos uno sin el otro.  Esas tonterías son las que unen a dos que realmente se aman.

Cada vez que te vas, se que volverás, porque conmigo se queda parte de tu alma y contigo se va la otra que es mía y esta no te dejará alejarte, pues para eso te la entregué, para asegurarte y que sientas la misma angustia por mí.

Ya te las enumeré y sé que sientes lo mismo por mí... Cada vez que te vas.

La herencia del niño (otro cuento de navidad)


El niño llegó a un lugar cuando la tarde caía y la noche casi le llegaba, a su encuentro le sale un hombre con las ropas tradicionales del lugar, pero en un tono muy oscuro, telas casi negras.

__¿A dónde vas niño?

Preguntó el tipo con mucha autoridad, el niño quiso evadirlo pasando por un lado y continuar su camino, pero este no se lo permitió y de nuevo le lanzó la pregunta.

__¿Qué haces aquí tu solo niño?, ¿estás lejos de tu casa? 

El niño lo observó desde sus sandalias hasta su rostro, el tipo en sus labios tenía una cordial sonrisa, parecía alguien muy amigable, el niño entonces se sintió un poco aliviado y al desconocido le preguntó.

__Disculpe señor ¿qué pueblo es el que me queda por este camino?
__Este camino te conduce a un pueblucho de nombre Belén. ¿Para qué vas para ahí?
__Busco una ciudad cualquiera para vender algo, pues tengo a mi padre muy enfermo y necesito dinero para un médico y medicinas.
__Y eso qué deseas vender ¿lo llevas en ese morral? eso me imagino.

El niño asustado, pues podría ser un ladrón, tomó con muchas fuerzas su morral y casi tartamudeando respondió a la pregunta del desconocido.

__No señor, acá llevó mis alimentos y cosas personales ¿verdad Manchitas?

Manchitas, quien era un perro de color blanco y pecas cafés, gruñó al desconocido, quien seguía enfrente de ellos interrumpiendo su camino, el desconocido al notar el enojo del perro con pecas cafés lo acarició, pero este sintió el paso de una fea corriente en su cuerpo que lo hizo hasta llorar y se colocó por detrás del niño con la cola metida entre sus patas traseras, el tipo vio directo a los ojos del niño con la misma cordial sonrisa en sus labios y con voz apaciguante le dijo, mientras se hacía a un lado.

__Sigue por acá recto y a dos millas encuentras ese maldito pueblo.
__Gracias señor.

Dijo un temeroso niño y siguió su camino, pero la noche ya casi llegaba, Manchitas observó cuando por debajo de las ropas del desconocido algo se movió y se metió en la ropa negra del hombre, el perro se angustió al ver esa cosa que parecía una serpiente con vida a la que solo le alcanzó ver la parte final de su cola.
El niño y su mascota ascendieron por unas dunas del desértico lugar, por el cual la temperatura empezaba a descender, el niño sabía que si seguía avanzando la noche lo atraparía, por lo que debía pernoctar muy cerca de ese lugar en donde se encontraba ahora, así lo hizo y la noche oscureció todo a su alrededor, su único consuelo eran los brillantes que en el cielo brillaban, pero entre tanta joya natural, había una que al niño le llamó la atención, se trataba de una estrella enorme, la cual pareciera que alumbraba en rumbo hacia donde él debía de dirigirse. Viendo la estrella se quedó dormido.
Unas horas más tarde, bajo un sueño profundo, el niño en su sueño, soñaba que retomaba el camino que el desconocido le había indicado, pero cuando lo hacía, otro desconocido de ropas blancas y sin rostro se le colocaba justo enfrente, pero él no sintió miedo, solo sintió una enorme paz y escuchó lo que este le dijo.

__No tomes esta ruta, camina por esta otra, Belén te quedará media milla más lejos pero estarás seguro en tu viaje.

Cuando el desconocido del sueño dijo esta frase, el niño se despertó sobresaltado y sudando, su perro estaba enrollado y bien pegado a él, para que sus cuerpos se dieran calor, el niño de nuevo vió al cielo y se encontró con la enorme y brillante estrella, lo cual le durmió de nuevo.
El día nació y el sol alumbró lo que hace unos minutos era oscuridad total, el niño recogió sus cosas y le ordenó a Manchitas que avanzaran, el niño caminó por el camino que el señor de sonrisa agradable le indicó, pues no recordaba su sueño, pero Manchitas le ladró, él se encontraba justo en el lugar donde el hombre del sueño le indicó al niño que sería seguro para ellos, al ver a Manchitas ladrándole por aquel lugar, este recordó el sueño y tomó ese rumbo.

__¿Cómo sabías de este camino, pues yo lo soñé, pero tú como lo sabes?

El perro solo movió la cola y continuaron su camino. Mientras en el otro sendero, entre unas dunas arenosas, escondido esperaba por el niño el señor de sonrisa agradable. Al darse cuenta de que el niño no aparecía, este se encolerizó y maldijo al pequeño, era tanta su rabia que hasta la arena del lugar se levantó como un remolino y entre ella el individuo se desapareció.
Despues de varias horas de camino bajo un agotador sol, el niño logró ver a la pequeña ciudad, el perro con su lengua colgando de su hocico movió su cola, ambos se alegraron de ver el lugar, descansaron por un momento en un lugar que parecía un oasis en el desierto, bebieron de las aguas del lugar y comieron algo, pues aun les faltaba un buen tramo para llegar al lugar.

__Veo que no seguiste mi consejo niño.

Dijo el hombre de negro, con la misma sonrisa y rostro amable, este llegó hasta el lugar y se sentó frente a ellos, el perro de nuevo gruñó, pero al encontrarse con el rostro del individuo. este lloró de nuevo y se hizo por atrás del pequeño.

__Yo puedo ayudarte con la enfermedad de tu padre niño.
__¿A cambio de qué?

Dijo el niño cogiendo su morral con sus dos manos, pero este le dijo al niño.

__Tranquilo, lo que llevas en ese morral no me interesa, me interesas tú.

El niño se asustó al escuchar lo que el desconocido le decía.

__¿Qué podría interesarle de mí a usted señor?

El hombre río muy feliz, creyendo que el niño estaba por hacer un trato con él.

__Disculpe señor, pero no tengo nada que le pueda interesar a usted, además no haré tratos con quien no conozco.
__Pero si me conoces, soy yo quien tiene a tu padre moribundo y la única opción que él tiene para sobrevivir soy yo y claro, ahora tú, la vida de tu padre esta en tus manos pequeño.

El niño no entendió y en sus adentros se cuestionó; cómo podría aquel desconocido tener enfermo a su padre.
El perro observo de nuevo a la rara serpiente que se introducía en el traje de color negro del hombre cuando este se puso de pie para dirigirse hacia donde el pequeño estaba, pero este no vio nada, pues en ese momento se encontraba orando por su alma y su seguridad, mientras lo hacía sintió cómo una mano sobó su cabeza y sin abrir los ojos escuchó que un viento en forma de remolino llegó al oasis y al tipo lo escuchó maldecir, luego de las maldiciones del desconocido la calma llegó y el niño abrió sus ojos de nuevo y en el lugar, solo la nada, no había oasis ni nada más que las dunas del desértico lugar, para ahora ya era tarde, sin darse cuenta, él había estado casi todo el día en aquel lugar y la noche le sorprendió de nuevo. 
El niño dijo; pero qué pasó con el día, no puedo esperar a otro día más, pues mi padre morirá si espero.

__Vamos Manchitas, dirijámonos con dirección a esa estrellas que tanto brilla y parece que alumbra para la ciudad de Belén.

Tomó sus cosas y se dirigió con rumbo hacia donde la estrella parecía alumbrar, mientras se dirigía con rumbo hacia ese lugar, le dieron alcance unos señores que se veían muy elegantes y finos, los cuales al encontrarse con el niño se detuvieron y al niño se acercaron.

__Qué haces aquí pequeño, no es muy tarde para que andes lejos de tu casa, o ¿acaso viajas con tus padres?
__No señor, viajo solo, voy para Belén, a vender una joya de mi padre, una que deberá ser mía cuando mi padre muera, pues él la recibió de su padre y su padre del suyo.
__Ah, es una herencia de generación en generación. Y ¿por qué quieres venderla hijo? 

Preguntó otro de los viajeros nocturnos mientras avanzaban, el niño y el perro iban sobre una bestia.

__Para pagar a un médico y comprar medicinas para que no muera mi padre.
__Eres valiente niño, estoy seguro que tu padre no morirá, ya verás.

El niño sonrió y a los desconocidos les preguntó.

__Y ustedes ¿a dónde se dirigen, por qué viajan de noche?
__Pues ya que vienes con nosotros, lo verás con tus ojos niño, pues ya hemos llegado a nuestro destino.

Los Reyes bajaron de sus bestias y con sus regalos se dirigieron hacia un corral, lugar en donde insidia la luz de aquella estrella, el niño y Manchitas observaron como esos señores con ropas de ricos y muy elegantes se postraban ante un pesebre, lugar en donde se encontraba un niño rodeado de sus padres y animales de corral, el niño pensó. ¿Por qué estos señores tan elegantes le obsequian a este niño tan pobre y le hacen reverencia como si fuera un Rey. El niño al observar lo que en el lugar acontecía, se acercó con la curiosidad de todo niño y vio al bebe recien nacido sobre aquel misero pesebre, el cual le servía de cuna y al verlo, sintió una enorme paz en su interior, vio que Manchitas se encontraba agitando su cola de una manera cómo si quien estuviera ahí lo conociera de toda la vida y después de mucho tiempo lo encontró de nuevo, el niño sin saber por qué, abrió su morral y extrajo de él su herencia, de la que dependía la saludo de su padre y sin pensar en su enfermo padre, sintió la necesidad de regalarle al niño quien era mucho más pobre que él, lo que salvaría a su moribundo padre.

__Esto es para ti niño. 

Dijo el niño, y colocó su obsequió entre los de los señores que lo condujeron hasta ahí. Despues de ello, los señores elegantes regresaron por donde vinieron, no sin antes decirle al niño.

__¿Vienes con nosotros niño?, te llevaremos de regreso con tu padre enfermo, de todas maneras ya no tienes nada que vender ¿qué dices?

El niño aceptó la invitación y subió a la bestia que lo condujo hasta allí, mientras viajaban, el niño se durmió y de nuevo soñó con el mismo personaje que le advirtió de que camino debía de tomar, en el sueño Este le dijo.

__Gracias hijo, tienes un gran corazón, no te importó la salud de tu amado padre y con amor le regalaste al niño tu herencia. De verdad te digo, que tu padre está bien, lo has sanado con tu nobleza de corazón.

El niño se despertó sobresaltado de nuevo y los señores que lo llevaban de vuelta a su hogar sonrieron.

__¿Un mal sueño?

Dijo otro de ellos sonriendo, el niño dijo.

__No, otro bello sueño. Y sonrió.

Cuando la noche dio paso al día, habían llegado a la humilde casa del niño, la caravana llamaba la atención y de la humilde vivienda, salieron su madre y hermanos, tambien unos primos, la familia completa.

__¿Dónde estabas hijo? 

Dijo la madre angustiada, pero el niño llorando y pensando que su padre habría muerto preguntó.

__¿Y mi padre, madre? ¿Murió?
__No hijo, justo a la media noche me sentí bien y me levanté de mi lecho de muerte, estoy sano, me siento muy bien.

Respondió el padre moribundo, completamente sano. El niño corrió con su padre y ambos se abrazaron.
Uno de los caballeros llamo al niño y le dijo.

__Quizá no sea tan valioso, sentimentalmente como el tuyo, pero quiero lo conserves y lo entregues a tu hijo y este al suyo y así por siempre. Toma.

Los señores se fueron y al desaparecer de la humilde casa, su familia le dijo al niño.

__¿No abrirás tu regalo?, ábrelo, ¿qué es?

El niño lo abrió y en él encontró la joya de la familia, la que él había obsequiado, ¿quien la cambió por el obsequió del Señor? 
Eso nadie lo supo, pues cuando el padre lo vio este dijo.

__¿Por qué ese fino señor te regalo nuestra joya familiar, la que heredarás de mí cuando muera?

El niño solamente sonrió y le dijo a su padre.

__Vamos a pastorear a nuestras ovejas y te contaré todo lo que me pasó, quizá juntos encontremos la respuesta padre.

El niño y su padre y con ellos el perro de manchas cafés, se dirigieron al lugar en donde ya se encontraban el resto de sus hermanos y primos pastoreando sus ovejas; mientras caminaban abrazados, el niño le contaba todo a su padre, con todos los detalles, no se guardó nada, todo se lo contó a su señor padre.


SergioRaga 18.12.16



sábado, 17 de diciembre de 2016

Un profundo amor


Justo con los primeros rayos del sol yo me acerco y te toco, saber que estas a mi lado amor, en ese momento abres tus lindos ojos y estiras tus brazos, ¿haz dormido bien? ¿te encuentras descansada? ¡di que sí! Solamente me sonríes, yo se que eso es un si y de nuevo un profundo amor nace entre nosotros, yo me sumerjo entre tu abismo de placer, tu me sientes entrar en ti y me repites al oído en un susurro, mi amor es tan profundo como el mismo cielo y yo te respondo mientras aun te amo, el mío es tan profundo como el mismo océano, ambos sonreímos sin dejar de amarnos, sabemos que tanto el cielo como el océano en el horizonte se vuelven uno solo, como somos ahora tú y yo; yo en ti y tú en mí. 

El sol ahora brilla más, será nuestro sudor, el que espejo es, yo me veo en ti y tú te encuentras adentro de mí, creo no poder sobrevivir, vienen como olas a mí, me dices, entrégame lo que has guardado parar mí, preparado estoy para degustar y oírte decir, qué profundo es el amor que siento por tí.

Terminamos de amarnos y seguimos uno en el otro, como el cielo y el océano en el horizonte, eso ahora somos, escuchó de ti un profundo suspiro eso me hace feliz, pues me dice que sientes lo mismo que yo por ti, ¿tan profundo puede ser nuestro amor que no logramos separarnos aún? 

Por fin, te veo caminar hasta la tina del baño y al estar a punto de entrar en ella, las burbujas se agitan por limpiar tu cuerpo, pero me ves y con esa sonrisa que tanto admiro me invitas a seguir bajo las aguas tibias, sobre las cuales hay mil rosas rojas igual que nuestra pasión, te digo ahora voy, pues no quiero dejar de ver a maravillosa mujer, enamorado estoy de ella, ella lo esta de mí.

Ahora de ella solo veo unas largas piernas que salen de la bañera eso me enciende el profundo amor que siento por ella y casi corro a su lado, ella se corre y me recibe con sus brazos abiertos y tambien me sujeta de la cintura con sus extremidades y a mis labios apasionada los besa, recibo deliciosa caricia de todas las mejores, pues el beso es el mejor sexo, eso lo dijo el poeta y tenía razón, pues es el umbral para tal excitación, siento como me acaricia y me conduce por el lugar que con ansías me espera y de nuevo me susurra al oído algo que yo ya sé y es que, siente por mí un profundo amor, como yo siento por ella ese sentimiento que nos tiene ahora de nuevo en las mismas que en la cama, no me cansaré de hacer el amor contigo, ni yo contigo le digo.

Quedamos profundamente dormidos pero sin separarnos, yo descanso sobre su piel, húmeda pero cálida, ella cuida de mí, de mi sueño, en él la amo tambien; ella lo sabe y me acaricia mi cabeza y besa mi frente, suspiros salen de su pecho, siente celos de mí, por estar con ella amándola en sueños y ella solo imaginando esa faena, ¿será tan buena? esperaré a que despierte y le diré que me cuente lo que soñó.

Me despierto y ella me ve, sonríe, yo siento que la traicioné por haber disfrutado de ella en mis sueños, ella que me entiende y me dice, no te preocupes que tambien yo lo disfruté, mi mente me ayudó y nos besamos otra vez, en el baño se siente toda la pasión.

Salimos del baño completamente desnudos yo le pido que se adelante, ella me complace, pues ya me conoce y al caminar hacia nuestro cuarto me permite la observe, sabe que me enamora ver su linda figura, se recuesta sobre nuestra cama y desnuda me espera hasta que aparezco y ella me ve llegar pero esta vez solo admiro tanta belleza, ella me ve con ternura y me repite ilusionada tan profundo es mi amor por ti, yo le repito lo mismo que acabo de oír.

Me recuesto a su lado, dos cuerpos completamente desnudos, dos amantes solamente viéndose a los ojos, sin emitir una sola palabra, creo que es hora de que nuestras almas se amén con locura, les permitimos sientan esa ternura, mientras esas almas se aman con ternura y franca locura solo necesito perderme en esos ojos de un verde profundo, tan profundo como el amor que ambos sentimos uno por el otro.

Así transcurren las horas, solamente viéndonos, pues nuestras almas no quieren ni piden descanso, siguen amándose y nosotros seguimos observando lo bello que para cada quien somos, es el amor el que nos hace tener esta locura, yo me pierdo en el verde profundo de sus bellos ojos y ella se introduce en mí y conoce mis sentimientos a través de los míos, se nos escapa un suspiro, al ver como quien nos despertó en el horizonte muere, le damos la despedida, seguros de que mañana será quien nos devuelva la vida y nos invite a preguntar: ¿Haz dormido bien? ¿te encuentras descansada? ¡di que sí! y con tu sonrisa iniciará otro día más de un profundo amor que no morirá mientras cada mañana el solo nos despierte y ella me consienta con linda sonrisa que me dice que sí. 

For so long


Todo el tiempo tu y yo compartiendo nuestro amor, tu amándome, yo amándote, ese era nuestro trabajo, nuestra religión, sentimos nada nos hace falta para encontrar la felicidad porque mi felicidad lo eras tú y tu felicidad lo era yo. 

Todo el tiempo recorrimos cada centímetro de nuestros cuerpos conocíamos el sabor de nuestra piel, lugar donde encontrar los yacimientos de ricas aguas mezcladas con la miel, que de cada poro nos brotaba, eso era por el amor mio y el tuyo.

Todo el tiempo no fue tiempo, fue comunión, almas que encontraron su complemento, una conjunción, otra constelación, las estrellas del norte, ese eras tú, mientras las del sur, esas me pertenecían, el que nos veía nos envidiaba nuestro amor.

Todo el tiempo tu y yo, disfrutando uno del otro, tu me comías, mientras yo me alimentaba de ti, hambre nunca hubo, pero satisfechos tampoco estábamos, siempre queríamos más y más, pecamos con la gula de las mieles del amor.

Todo el tiempo, ni un segundo separados, pues no podríamos sobrevivir lejos uno del otro, yo respiraba a través de ti y tu corazón palpitaba por mi, complemento éramos para lograr sobrevivir en un mundo lleno de engaños y desamores, solo nuestros amores fueron fieles y sinceros todo el tiempo. 

Todo el tiempo cerca, casi siameses, no lograron separarnos ni en el quirófano de la vida, no hubo cirujano que se atrevió a intentar separarme de ti, pues si lo hacía, sabía que moriríamos lejos uno del otro, pues tu respirabas a través de mí y mi corazón bombeaba sangre por tí.

Todo el tiempo desde que te vi y que llegué a ti, supimos que nos pertenecíamos, que si no estábamos juntos la vida perdía sentido y no lograríamos sobrevivir, por eso todo este tiempo siempre juntos uno a la par del otro, como dos gemelos en el mismo útero.

Todo el tiempo no nos alcanzó para entregarnos amor, nos hará falta tiempo para amarnos, pero Dios es tan bello que nos permitirá seguir amándonos en el cielo.

Todo el tiempo, las agujas del reloj son como nosotros, si falta una no podría dar la hora, yo seré el minutero y tú la que da la hora, cada tic tac será el de nuestro corazón, el que dará el tiempo, el que nos dará la vida y la eternidad para que nuestro amor nunca pueda terminar, ni el tiempo logre separar a dos que como nadie se amaron y se amaran.

Todo el tiempo no alcanzará, para demostrarte lo que siento por ti mi amor, lo mismo digo y es con mi corazón.



Continuará... (Porque el amor no tiene final)

Cosas raras del amor


El amor es una plataforma llena de rosas sin espinas.
Salva mi vida. 
Aparece flotando sobre las aguas de la amargura
cuando siento que me atrapa la locura de la desesperanza.
Llegas tú. 
Cómo esa plataforma llena de rosas sin espinas
y salvas mi vida.

El amor es un baile sobre las sombras que otro dejó.
Dichoso el que ahora baila mientras que el otro llora.
Baila conmigo toda la noche sobre estas sombras, 
disfruta del movimiento erótico que se permite bajo la oscuridad.
Olvidemos la pobreza que en mi alma dejaron las otras.
Hagamos de esa oscuridad un río de estrellas 
que iluminaran nuestro firmamento.

El amor fue por mucho tiempo lo mejor de lo mejor,
hasta que llegaste tú a mi vida y la convertiste en lo peor de lo peor.
Ahora lloro sobre tus recuerdos, trato de olvidar tanta traición que sufrió mi corazón.
Sobreviviendo de ti, trato de encontrar a alguien que me saque de esta temible oscuridad,
una oscuridad que me da tanto frío y miedo debido a la soledad.

El amor es algo que no comprendo, 
me hace reír y disfrutar, pero tambien me hace sufrir y llorar,
quizá sea eso lo que lo hace tan especial,
pero junto a ti todo será solo felicidad, espero no confundir 
el amor con la costumbre, pues eso sería mas grave que sufrir otra decepción,
moriría pensando que había encontrado el amor verdadero.
Pero te conocí y ahora creo que sí.

El amor por largo tiempo será quien domine a todo ser,
sea este quien sea, le dará sentido a su vida,
lo transformará para su bien o para su mal,
pero otra criatura el amor hará de él, seguro que sí.

El amor cuando se aleja te hace gritar regresa, mi corazón te espera.
El amor cuando se aleja te hace un tonto, un desecho, alguien sin autoestima. 
El amor cuando se aleja te hace un agujero en el centro del pecho, pues tu corazón se fue con él/ella.
El amor cuando se aleja te hace suplicar y perder la vergüenza, al mismo tiempo te deja sin autoestima.
El amor cuando se aleja te hace sobreviviente si tienes suerte.
El amor cuando se aleja te hace suspirara y soñar con el que se alejó y el corazón te robó, si no lo recuperas pronto no volverás a saber de él. (me refiero al amor).
El amor cuando se aleja te hace perder la mente y te hace suplicar que regreses pronto, sin importar lo cruel que fue, eres un perdido y sin brújula, ni nave para navegar, el capitán fue quien te abandonó en la isla sin alimento ni bebida, pensaría no sobrevivirías, así que si lo logras, por favor no pienses más en quien deseó tu muerte, busca vengarte encontrando alguien que te ame y que se de cuenta de lo que perdió dejándote sola/o y a tu suerte.




La Sal y Pimienta de una vida


Algunas veces me siento un poco desafortunado, por lo que me ha tocado vivir, lo que me ha tocado sufrir, por lo que he tenido que aguantar para sobrevivir, me he sentido un tin man, dura ha sido la vida para mí, cargar tremenda cruz, que para otros, seguro estoy ni la podrían levantar un centímetro del suelo. Empero, seguro estoy, que lo mismo me dirías hoy y yo lo entendería, pues creo que en determinado momento todos hemos sido un tin man, una tin woman. Todos tenemos nuestra historia, una parte oscura en nuestras vidas. Haciendo un recuento de los daños que me ocasiona aun mi problema, me digo, pudo ser peor. }

Todos venimos a este mundo a sufrir en por lo menos alguna ocasión y eso es la sal de la vida y la pimienta sería, el superar esos obstáculos, salir adelante, recoger la cruz, colocarla sobre tu espalda y empezar a caminar ese camino que se llama: Vida; en tú camino encontrarás a miles, millones o a todo los que habitamos en este enorme hogar, tratando de negociar sus cruces, tratando de hacer un trueque, pero al rato nos vemos al rostro con quien hicimos el trato, reímos y cancelamos la transacción y seguimos con nuestra pesada cruz. 

También nos encontraremos con quienes ya no se levantaron, ahí quedaron sentados y a su lado la cruz con las que les tocó lidiar. Yo no fui uno de ellos, aunque hubo alguna vez que tal vez lo pensé, gracias a Dios que hubo personas que a mi lado estuvieron para alentarme y darme la mano, esa que hasta el día de hoy agradezco, la mejor ayuda que recibí y sin darme cuenta como muchos de ustedes no lo sabrán hasta hoy, pero esa mano fue la que Dios me dio, el aliento que me confortó, pues, lo hizo de una manera tan sutil que no me percaté de que fue Él quien me tendió la mano y me dijo: Hijo levántate y sigue tú camino, en él nos encontraremos de nuevo. Fui otro Lázaro, quien escuchó a su maestro ordenarle que se levantará y caminara y así lo hice, no fue nada fácil, pero aquí estoy, aun siento su peso sobre mi espalda pero la soporto, porque ya han sido muchos años con ella que si un día ya no la sintiera, seguro la extrañaría. 

A veces, nos creemos que esas personas afortunadas, las que admiramos, las que viven una vida de ensueño no sufren, pero tambien tienen su cruz y a de ser muy pesada, creo y me atrevo a pensar, que mucho más que la mía, pues a pesar de sus fortunas y esa vida tan increíble que llevan, ¿por qué se suicidan? Bendito Dios, yo nunca lo he pensado y vaya que he estado en situaciones que quienes me conocen y han vivido conmigo mi calvario lo entenderían, pero la mano de Dios me a reconfortado, le ha dado unos granos de pimienta a mi vida, no solo sal, aunque algunos tragos que han pasado por mi garganta han sido muy salados. 

Siguiendo con la misma ruta de este pensamiento, se me cruzó otra idea y es, que no solo al ser humano le a tocado levantar y cargar su cruz, una pesada, pues la de ellos no ha sido menos pesada, nunca ha sido liviana y me refiero a los animales, pobres, pues algunas especies ya ni existen, ellos si que están mucho más fregados. Y los que han contribuido a esto, esos son unos... 

Otra cosa a la que me lleva este pensamiento es cuando escucho decir que los políticos toman unas decisiones absurdas en cuanto a, por ejemplo, si hablamos del medio ambiente, supongo que ellos dirán: ... Qué me importa, me darán unos millones con los que viviré como rey, para cuando la catástrofe llegue ya me habré muerto...  Pobres idiotas, no se imaginan que si existe y creo que sí, la reencarnación y vuelven a nacer, bajo cualquier circunstancia; en la opulencia o la pobreza, a los incautos e idiotas, les tocará vivir en un mundo increíblemente descompuesto, inhabitable y para entonces, todo los millones que recibieron ya no les servirán para nada, pues podría ser que ahora fueran y vivieran en la extrema pobreza y maldecirán al que él un día fue. 

Pues la historia estará ahí para recordarnos quienes fueron los que nos jodieron el planeta y en primera fila, él, protestando el muy hijo de ... Sin recordar que fue él quien inicio un día todo este desmadre por su ambición desmedida y al que le valió madre su descendencia a la cual junto con el resto de la humanidad la condenó y al mismo tiempo él se auto condenó. 

La verdad no se por qué escribo todo esto, me sucede a menudo, muchas veces me encuentro escribiendo, en esté medio y otras solo para mí, pues hay escritos que no comparto, son de mi intimidad y me detengo cuando lo hago y digo: ¿Por qué escribo esto? ¿Quién puso estas ideas en mi cabeza? ¿Por qué, estas las comparto y estás otras no? ¿No les parece extraño?

La verdad, ni idea, lo que sé y se me ocurre escribir ahora es que somos y seremos en algún momento hombres y mujeres tal cuales; Tim Man. 

Hasta la próxima reflexión, mientras, sigo viendo a mi alrededor, buscando quien me dictó esto que tú acabas de leer.  Será que está dirigido a TI, si a TI...?

viernes, 16 de diciembre de 2016

La Serenata


Cantaba al pie de tu ventana pero nunca salías, te hacías la de rogar, yo impaciente ya iba por la tercera de mis canciones y de mi repertorio no sabía más de seis, las otras seis, de ellas solo me sabía un poco, los Mariachis se veían entre ellos y se hacían ojitos de burla para quien cantaba enamorado e ilusionado, pero en la ventana solo un viejo grillo que al escuchar mis notas me hizo la segunda, parecía otro violinista del Mariachis o igual al del tejado. 
La luna ahora brillaba como nunca, así que la cara todos me la vieron, pero tu lindo rostro yo no pude nunca verlo, seguro estarías con otro, eso decían los malintencionados, algo que me cayó como balde de agua frío u otro liquido menos transparente pero si bastante viscoso. 
Ya empezaba la sexta y con esa me llevaba la tristeza, pues otra ya no podría cantarle a la que aun no salía, fue cuando del cielo escucharon mi suplicas y al iniciar la última de mi repertorio de sus labios escuché un buenas noches. 
Los Mariachis, todos al unisono respondieron, yo voltee algo aturdido al escuchar ese saludo en coro y lo que vi, hizo me olvidara de la que no aparecía en escena. 
Cuando los Mariachis iniciaron sus notas, con los ojos vieron a la que educada nos dio las buenas noches, era bella la criatura y con su andar me invitaba a que la siguiera, entonces a los Mariachis les dije, vamos con ella muchachos, ellos los sombreros se quitaron y un Ujá dijeron. Fue cuando salió a la ventana con lagañas en los ojos y un traslucido camison de seda, ella como reina de Miss Universo con enorme sonrisa y caminar de pasarela, pero ahí ya ni el grillo quedó, solo se escucharon las trompetas cuando doblábamos la esquina más próxima a su casa, la que da al sur de su calle. 
La que se burló de la haragana con sueño pesado, esa fue la luna, quien también se largó conmigo, pues como reflector de teatro me alumbraba el paso, la chica que nos salvó la noche entró a su cantón, una casa muy humilde, no tenía segundo piso para aparecer sobre su balcón. Lugar en donde seguía la de los ojos lagañosos y dormilones, pues escuchando las trompetas se quedó de nuevo dormida sobre su balcón; su madre malhumorada salió y como pudo la entró para depositarla sobre su fina cama. 
Mientras los Mariachis y el grillo detrás mío, muy entusiasmados esperando saliera la bella y educada dama, la que nos rescató del mal rato y de los malos tratos que en sus mentes de mi los Mariachis decían. 
Por fin rechinó la puerta y en ella apareció la educada y hermosa dama, quien se recostó sobre el marco de su puerta con enorme, bella y honesta sonrisa, yo sentí que bajó del cielo, era como un  ángel en cuerpo de mujer, sus humildes ropas no la desmerecían, por el contrario, le daban un belleza mucho mejor que la que seguía metida en sus sueños. 
Ella ahora soñaba que alguien le llevaba un gallo y era ella la que recibía tremenda serenata, pero seguirá engañada, pues después del desplante ya nunca me acercaré a ella, la chica al terminar mi última canción de mi repertorio me dijo: Gracias caballero, ¿pero no estaba usted en el balcón de mi vecina? Yo le dije: Sí, pero fue mi equivocación, le pido perdón, pero me equivoqué. 
Los Mariachis gritaron Ujá y al grillo escuchamos al lado del bandolón, el Mariachis tenía nuevo miembro, el cantante al ver su entusiasmo, pues no había cantado una sola copla en toda la noche lo levantó del suelo y lo colocó en su solapa, lugar donde desde esa noche sería su lugar como nuevo ranchero. 
Yo, al escuchar a la bonita señorita dar las gracias y lo hizo con mucha gracia, pues, mientras acariciaba su pelo, me dije, me aviento la próxima aunque no tengo más dinero, los Mariachis dijeron de nuevo Uja, eso me dio la pauta de que podría cantar la del estribo y me animé con la siguiente rola, una que solo me conocía dos o tres coplas, pero vaya sorpresa, me la eché completa y eso que mi reflector, la luna, me iluminaba. 
Quizá fue quien me dio la inspiración, pero yo creo que fue cuando la señorita bonita me guiñó unos de sus castaños ojos, los Mariachis al verlo repitieron y gritaron otro Ujá. 
Le dije, va la otra aunque sea de fiado, los mariachis ya estaban entusiasmados y dijeron dale compañero, esta corre por nuestra cuenta, la canción inició con un solo del nuevo miembro del Mariachi este frotó sus patas y los mariachis al escucharlo tan afinado gritaron otra Ujá. 
Yo seguí con la segunda y luego la tercera, par entonces ya estaba cerca de la morena, quien su rostro cubría con la mitad de su pelo, mientras cantaba la tercera rola, en una que dio un solo mi amigo el grillo a la morena me acerqué y le dije al oído.
Oye morena, creo que ya te quiero. Ella me dijo. 
Vaya al fin te diste cuenta. Pues yo por ti me muero y al verte frente al pie balcón de la desabrida y peliteñido de tu novia me moría de celos.  
Ahora quien dijo Ujá, ese fui yo, le cante aquella que dice algo de bajarle las estrellas y la luna, la que me seguía alumbrando como reflector de teatro, ella retiro su cabellera, me dejo ver todo su lindo rostro y si que era bello, con disimulo me acerqué y a sus labios me pegue, cuando el beso nos dimos, los Mariachis sonaron las trompetas para terminar la rola y siguieron su camino. 
Ahí nos quedamos solos la educada morena y yo, quien hace un rato sentía la muerte al ver que no salia la que antes fue mi dueña, vi al cielo y de un guiño apague la luz de la luna, entré en el humilde cantón de la morena y ahí me quedé hasta que apareció el sol, este lo hizo poquito a poco.
Yo amanecí entre sus brazos, ella me quiso decir algo, pero mis besos no se lo permitieron, luego de aquel beso le dije sonriendo, si nos dejan te amaré por el resto de nuestras vidas, ella se metió entre mis brazos y nos dieron las diez, las once y las doce y así hasta que llegó la noche. 
Y afuera se escuchó un Ujá, los Mariachis habían regresado y ahora ambos recibíamos la serenata, de la mano salimos los dos a recibirlos y ahí  se armó la  fiesta, esa noche fue inolvidable, todos los vecinos nos acompañaron, menos la que seguía en su cuarto conmigo soñando y que era para ella la serenata  y en ella me besaba y me amaba. Que siga con lo que le gusta, soñar y soñar. 
Yo ahora soy feliz con mi morena, mis amigos los Mariachis, el grillo violinista y la bella luna que sigue alumbrando hasta que le guiño el ojo y nos deja a oscuras para amarnos con la misma ternura de la primera noche cuando muy educada ella me dijo. 
Buenas noches caballero.