lunes, 30 de abril de 2018

Whatsappeando con mi hijo


[26/4 6:58 PM] Sj:

UN NOBLE ARREPENTIDO

Soy un hombre algo normal y corriente
un pobre pecador de cuerpo y de mente
que sabe que cometió mil errores 
y ahora se arrepiente.
Y que por no saber elegir bien
puede que le llegue la muerte.

No sé si me entiendes;
que ahora me arrepiento,
que ahora no soporto 
ni el soplido del viento,
que ahora me critican 
porque sienten que solo miento.

Cuando simplemente les comentó:
"Solo quiero una moneda
eso es lo que yo pido; 
que allá afuera, aunque muera
sabré que no me habré rendido".

Ahora no me lo creo, que preferí 
ser hoja envuelta en un papel 
que el abrazo de mi madre 
todos los días al anochecer.
O las palabras de mi padre 
cuando me decía que hacer.

Ya han pasado 10 años 
desde que salí de casa.
Ahora me arrepiento 
no sé en ese momento que pensaba,
solo sé que tomé una decisión 
que dejó mi vida marcada
y que ahora no tengo 
ni un ángel de la guarda 
que cubra la espalda.

Sé que me equivoqué en mi pasado, 
lo lamento.
Pero hoy solo quiero una cobija 
que me cubra del viento,
o una moneda para comprar alimentos.
Ya no lo vuelvo a hacer, 
de verdad, lo prometo.

Y aunque no me crean lo que digo
soy un noble arrepentido
que quiere echar el tiempo atrás 
para arreglar lo acontecido
y decirme que lo que estaba pasando 
en esos momentos de mi vida,
no es motivo para hacer 
semejante tontería. (tremenda)

Si un consejo es lo que quieres 
de este pobre abandonado
"Solo vé al cielo 
y no te alejes de su lado,
porque Él, es el único 
que nunca te dejara tirado." 
Sergio Jesús.


[26/4 7:24 PM] Sergio Raga.

RESPUESTA: 

Creo en tu arrepentimiento, 
debes saber que todo llega en su momento 
que para todo hay un lugar en el tiempo, 
no pienses en la muerte, 
mejor piensa en la buena suerte 
y si sientes que nadie puede creerte 
y colocarte en el lugar correcto 
simplemente pide y se te dará, 
llama y se te abrirá, pregunta y se te responderá, 
ora y Él en sus brazos tus heridas sanará 
porqués Él es amor y verdad.

Me gustó; pero esta muy depresivo, sin embargo escribir sirve como aliciente para descargar algo del peso que ahora sientes, es buena terapia, es como ir a una sesión psicológica. 
Sigo pensando que tienes talento y creo en ti, sigue así, creando, pero escribe algo más alegre y mejor si es de amor, creo que siempre será lo mejor. 
Con amor tu mejor amigo; tu papá. 
(Sergio Raga).


La Casa Grande: Lalito y El Asalto


Cuando era aún un chico escuché un día a uno de mis hermanos contarle al otro una particular historia que hoy ha vuelto a mi mente, ese día era caluroso y ellos estaban sentados en una piedra que se encontraba entre el jardín de mi madre, ahí se aliviaban del calor, yo por mi cuenta estaba jugando a unos pocos pasos de ellos, el jardín era propicio para miles de aventuras y ese día yo era Tarzán, así que ellos continuaban hablando mientras yo seguía gritando colgando de un cordel, fue entonces que una de las lianas me llevó justo por atrás de los enormes simios sobre aquella enorme montaña y yo debería de encontrar la manera de vencerlos para traer la paz a mi selva, me acerqué hacia ellos con la sutileza de un felino y me coloqué justo por detrás de ellos sin que estas dos enormes bestias se percataran y cuando estuve justo atrás de ellos con mi filoso cuchillo entre mis manos y les daría muerte escuché lo que hablaban y esto les permitió vivir por otro tiempo.

¿Entonces les robaron toda la quincena?
_¡Sí! Pero lo más importante es que estamos con vida.
_Obvio, eso es lo más importante, que están bien y, ¿ya se lo dijiste a nuestra madre?
_Pues sí, lastimosamente esta quincena estará un poco limitada en su presupuesto al igual que yo.

Yo al escuchar esto dije para mis adentros.

_¡Diablos!

Pues los caramelos estarían limitados, debido al atraco en la quincena para mi hermano, por eso seguí escuchando antes de asesinar a las bestias.

_Pero -dijo mi hermano a mi otro hermano- lo que también me llamó mucho la atención fue lo que pasó con el Conejo.
_¿ qué pasó con el Conejo?
_Mejor te cuento toda la historia...

...Estuvimos frente a la oficina de don Güicho hasta que al viejo se le dio la gana de pagar la quincena, una vez este decidió hacerlo, salimos con el Conejo a tomar unas cervezas y entre tertulias, fumar y beber cerveza se nos llegó la noche, entonces decidimos salir con rumbo a nuestras casas, yo me guardé lo que siempre doy a la casa, el Conejo se quedó solo con los gastos para la siguiente quincena; caminamos por los lugares de siempre, pero esa noche decidimos tomar otro camino debido a una mamita que se metió por aquel lugar, eso fue una mala idea, pues cuando nos dimos cuenta la chica se había desaparecido caminamos otro tanto más y fue entonces que nos coparon unos chavos, de esas pandillas, ladrones con cuchillos y cadenas, nos rodearon y quedamos en medio, se fueron acercando hacia nosotros, y ya bien jodidos se acercó el líder y nos pidió nuestra quincena...

_¿Y qué, les robaron la quincena?
_¡No! Esto es lo raro, lo que yo ignoraba, el Conejo habló y estos nos dejaron ir con todo y nuestra quincena.
_¿Qué dijo? Esos mal paridos no dejan a nadie ir fácilmente y menos con su quincena, vaya que no los puyaron.
_Exacto.
_¿Entonces?
_Te sigo contando.

...El Conejo habló con el líder, y esto dijo_ "Tranquilo carnal, somos lobos de la misma loma" El tipo respondió: "Está bien hermano, nos vemos al cacho para aullar con lo que hagamos hoy"...

_Y como llegaron se fueron. ¿Te das cuenta?
_Pues, esta claro.

Yo dije: ¿Qué es lo claro, no creo que el Conejo sea un coyote? 

Así que seguí permitiéndoles vivir a las enormes bestias para seguir oyendo su interesante historia.

_Cuando estuvimos solos y nos regresó el color y el alma al cuerpo, le digo al Conejo; ¿cómo es que sabes su jerga?
_Es que soy muy amigo de uno que pertenece a estas pandillas y me dijo que si un día me veía en una situación de estas dijera precisamente eso.
_¿Quién es, lo conozco?
_Creo que no, -Dijo- pero yo creo que fue para que yo no lo supiera, bueno eso no importa, lo importante es que ya sabemos que decir cuando estemos en esta circunstancia, ¿no crees?

_Seguramente. pero, ¿quién los asaltó entonces?
_Te sigo contando.

...Te imaginarás que quedamos con el cuerpo todo aguado, así que no podíamos ni caminar, decidimos sentarnos en la banqueta y allí estuvimos un buen rato, nos fumamos un cigarro y cuando los encendimos se iluminó parte del lugar y vimos a un par de chontes (policías) Sentimos un gran alivio, los chontes nos dicen: ¿Qué hacen aquí? este lugar es muy peligroso, es parte del territorio de la pandilla de los Caníbales. ¿Los asaltaron? _No, gracias a Dios no nos asaltaron. -Dije yo-. Unos de los Chontes dijo: Que bueno. _Sí. -dijimos con el Conejo-, bueno ya nos vamos. Entonces el otro Chonte dice: Esperen. Y esperamos. El otro Chonte nos dice: Así que aún tienen su quincena con ustedes. _¡Sí! Pues, entonces nos la dan. _¿Quéeee? -Dijimos anonadados- los de la pandilla nos dejaron y estas lacras corruptas nos estaban pidiendo nuestras quincenas. Apurence o los llevo al bote por pertenecer a la pandilla del Caníbal y estar asaltando. _¿Pero? Ya dale tu dinero dijo el Conejo resignado, le entregamos nuestro dinero a esos malditos y desaparecieron...

_A la puta, ¿la policía los asaltó?
_Sí, dos miembros de la seguridad fueron quienes nos asaltaron.

Mis hermanos quedaron callados, uno asimilando lo que le sucedió a su hermano y el otro recordando con cólera y el increíble asalto. Entonces decidí que era justo el momento para matar a las enormes bestias y les introduje mi filoso y enorme cuchillo por la espalda.

_¡Ayyyyyy! Gritaron.
_¡Hijo de perraaaaa! Gritó el otro. Y yo grité mientras me pegaban y ellos sangraban.
_¡Mamáaaaaaaaaa!


martes, 24 de abril de 2018

Te extraño tanto


Te extraño tanto
y no logro olvidar nuestro ayer
todo era diferente, 
era emocionante estar a tu lado.

Cada día 
una nueva aventura
y todo la cordura 
se convertía en linda locura.

Nada es más difícil 
que solamente seas 
un recuerdo, un lindo recuerdo 
que no puedo evitar llorar.

Regreso a aquel lugar 
que nos dio un sitio para amar
las personas pasan a mi lado 
pero nada es igual.

Te extraño tanto
y todo lo veo diferente.

No hay nada más difícil 
que querer verte llegar 
pero solo te puedo recordar
y no puedo evitar llorar.

No hay nada más difícil 
que querer revivir 
lo que ya es parte de un pasado.

No hay nada más difícil 
que querer encontrarte 
en aquel lugar, nuestro lugar.

No hay nada más difícil 
que querer volver llegar 
a ese nuestro lugar 
y encontrarte sonriendo
esperándome.

No hay nada más difícil 
que querer volverte a besar  
y no poderlo hacer.

Todo era tan diferente, 
todo era tan emocionante, 
una nueva aventura
y mil travesuras.

Te extraño tanto
y no te logro olvidar, 
trato de encontrar 
a alguien que me haga olvidarte
pero nadie puede sustituir 
a quien te enseñó 
lo que es el verdadero amor.

Te extraño tanto
y no logro olvidar nuestro ayer
todo era diferente, todo era emocionante
estar a tu lado cada día era una nueva aventura
todo la cordura se convertía en linda locura.

Todo era tan diferente, 
todo era tan emocionante,
todo era una nueva aventura, 
era tan bello dejar de lado a la cordura
para dejar salir de nuestros cuerpos 
a una linda locura.

Todo era tan diferente, 
todo era una nueva aventura, 
una inolvidable locura,
una emocionante locura 
que solo te puede regalar 
el verdadero amor.


Te sigo amando


Si te pudiera de nuevo ver,
te diría que no he dejado
de pensarte y de amarte.

Me duele mucho
no poder verte,
no poder abrazarte
y a tus labios besarlos.

Estas tardes
tan negras y frías
me asustan y tú lo sabías bien
me refugiabas entre tus brazos
y con tu calor se alejaban
el frío y el miedo
y terminábamos
amándonos en el sofá.

Si pudiera hacerte saber
qué ha sido imposible
dejarte de amar
y lograrte olvidar,
como deseo que tu corazón
sienta lo mismo que yo.

Que triste no poder
encontrar la fórmula
para disimular
que no he logrado olvidarte,
que sigo amando a la que un día
el destino alejó de mí,
lejos te llevó de aquí.

Y aunque desde ese día
imploro que vuelvas a mí,
eso no sucedió
y mi castigo es no poder
olvidarme de ti.

Imagino que si te vuelvo a ver,
no creo poder reconocerte
porque mucho hemos cambiado,
pero sin duda
mi corazón se agitará y esa será la señal
de que de nuevo te encontré.

Eso seguro sucedería,
porque habremos cambiado
pero nuestro amor sigue intacto
y sé que como yo aún te amo
tu también me sigues amando.


No me extrañes


En trozo de papel 
mi prosa escribiré 
y a tus manos 
como rosas llegarán.

Los días pasarán 
y tú me extrañarás más 
y también al sabor 
de de mi piel.

Y todos dirán 
que se te nota, 
que te hago falta
y mucha,
se ve que no te va bien 
la soledad.

Puedes leer 
lo que mis ojos 
te quieren hablar,
logras escuchar
lo que siempre quisiste 
escuchar,
puedes confiar otra vez
en mí o prefieres dudar
de mi amor.

En trozo de papel 
mi prosa escribiré 
y a tus manos 
como rosas llegarán.

Tú gritarás que faltan horas
para otra vez amar
pues ya me extrañas
y sientes fuego en las entrañas.

De mi prosa leerás
bésame suavemente 
y despacito,
y de las flores oleras
mi aroma, 
el mismo que olías
cuando me ambas.

Bésame suavemente y despacito
siente en mis prosas 
el amor que en trozo de papel
escribí para ti,
para que me eches en falta
y no busques un sustituto
pues nadie podrá encontrar 
en tu cuerpo ese lugar
que te hace explotar al amar.


lunes, 23 de abril de 2018

La Isla Maldita 2


Después de horas de luchar por mantener a la embarcación a flote, esto no fue posible, por más que hicieron todas las maniobras antes realizadas con éxito en otras tormentas no tan violentas como esta, la tripulación y oficiales se hicieron al mar para salvar sus vidas, las aguas aún violentas, frías, oscuras en medio de una extraña y espesa bruma, el Capitán gritaba a sus hombres para saber si estaban con vida y para que al escuchar su voz se acercaran lo más posible hasta él, pero con la aún tormentosa ahora noche, los gritos del Capitán eran casi imposibles de ser escuchados, cuando ante los ojos de los sobre vivientes la embarcación se iba sumergiendo entre el océano la tormenta fue menguando y mientras este desaparecía ante la mirada y desconsuelo de ellos, la tormenta también iba alejándose tal cual como llegó, una cortina de muerte y naufragio, como si esta fuere un monstruo marino cuya intención era hundir a la nave que se atreviera a navegar por ella, entre los hombres sobrevivientes los escombros flotando entre ellos, el Número Dos, logró alcanzar la única balsa que sobre vivió al feroz embate, como le fue posible se encaramó en ella, una vez sobre ella se dio a la tarea de navegar entre lo que flotaba, de ellos tomaba lo que le serviría para sobrevivir, y entre tantas cosas flotando, se encontró con su Capitán, al cual lo ayudó a entrar en la pequeña embarcación.

_Gracias Número Dos, que suerte que esta nave soportara a esa infernal tormenta. Pero vamos en busca de otros posibles sobrevivientes.
_Sí mi Capitán.

Respondió el Número Dos y ambos buscaron a sobrevivientes, mientras lo hacían subían a la nave lo necesario y útil. Luego de un par de horas ya cuando amanecía lograron encontrar a los 11 restantes de la tripulación.

_Gracias a Dios todos sobrevivimos.

Dijo el contramaestre, pero en la nave solo cabían ahora, diez, por las cosas que habían recogido y lo pequeña de la balsa, así que por orden del Capitán se turnaban y rotaban los hombres para por el termino de cierto tiempo subían los tres que ahora se sujetaban de la orilla de la balsa y una vez la rotación se lanzaban al mar otros para que los que estaban en agua subirán y descansaran.

_Extraña tormenta ¿no?
_Maldita diría yo.

Esto se decían tanto Número Dos como contramaestre. Mientras que el Capitán de nuevo estaba como ido, observando a un punto fijo, en sus ojos azules como el mar que los desafiaba a sobrevivir, seguían fijos en un lugar al cual veía el otro día cuando de pronto les llegó la endiablada tormenta, sus hombres en silencio y respeto simplemente observaban a su líder, nadie se atrevió a decir nada, simplemente observaban hacia donde este veía sin parpadear, meditabundo y alejado de sí mismo. 

Ya llevaban unos días así, rotándose para entrar en el agua, la cual era muy fría, las noches eran largas y silenciosas y por el día el sol era inclemente, el Capitán llevaba este tiempo observando hacia el mismo lugar.

_Capitán, Capitán. Señor.
_Ah, sí, ¿qué sucede Calín?

Calín uno de los miembros de la tripulación y quien ahora se encontraba en el agua, trajo de regreso a su Capitán para hacer un par de observaciones.

_Capitán no le parece extraño que no hemos visto un solo tiburón.
_Bueno debe ser que estamos en algún lugar del océano en donde estos no acostumbran venir.
_Sí, es posible y gracias a Dios, de no ser así ya uno de nosotros no tendría piernas, jejeje. -Río nerviosamente-. Otra cosa Capitán, no sé si se habrán dado cuenta pero a pesar de que remamos hacia una dirección hay una extraña marea que nos empuja hacia un lugar, hace día que he notado esta marea que nos arrastra precisamente hacia el lugar al cual usted mira con tanta insistencia y curiosidad, es como si el mar nos llevara a propósito hacia un lugar en especifico.
_Esas son tonterías marino, es la insolación la que le ha afectado. Concéntrese en su trabajo, espero que pronto alguna embarcación nos encuentre.

De nuevo hubo silencio entre la tripulación a consecuencia de las palabras de su Capitán y este de nuevo fijó su mirada al mismo de punto de hace días. Fue Rodrigo, otro miembro de la tripulación y cocinero, quien se quedó junto a su Capitán viendo hacia el mismo punto, pero este logró ver algo en el horizonte.

_Dios mío, veo una isla, sí hay algo por allá!!!
_¿Por dónde?

Dijo el contramaestre con emoción, Rodrigo señaló hacia donde el Capitán veía sin ver lo que Rodrigo veía.

_Hacia donde el Capitán miró por todo este tiempo desde que llegaron a ese lugar del océano, toda la tripulación vio para donde el Capitán veía y efectivamente se observaba una mancha sobre el océano muy difuminada, pero no podía ser posible que fuera una alucinación de Rodrigo, pues todos la veían, solo el Capitán y los tres que estaban temblando en agua no veían nada. Fue el Número Dos quien ordenó que se dirigieran en esa dirección y con el único remo que tenían y con brazadas del resto se dirigieron con ese rumbo, esto no les causaba cansancio alguno pues, la marea era la que sin ellos darse cuenta los había llevado hasta ese lugar y ahora lo seguía haciendo. Cada que pasaba el tiempo la emoción crecía entre los de la tripulación pues, ahora lo que pareció ser una alucinación se veía con claridad, el Capitán ahora quizá la veía también pero nada dijo, de él no salió ni una sola orden, sin embargo al resto no les cabía la emoción y la esperanza de haber encontrado su salvación, pues eso de estarse turnando para entra en aguas ya los tenía muy cansados y las provisiones al igual que el agua ya se estaban terminando.

Ahora los trece náufragos iban con rumbo hacia la Isla Maldita...



Continuará...


viernes, 20 de abril de 2018

Cerca, muy cerca


Tu boca, mi boca.
Tu mano, mi mano.
Tu cuerpo, mi cuerpo.
Mi piel, tu piel.
Tan cerca, muy cerca.

Tu voz, mi voz.
Tu pelo, mi mano.
Tu aliento, mi aliento.
Mi corazón por ti latiendo.
Tan cerca, muy cerca.

Tu imagen, yo pensamientos.
Tu figura, yo tentación.
Tu alma, mi alma.
Tu calor, mi calor.
Tu desnudez, mi lujuria.
Tan cerca, muy cerca.

Tu mirada, mi mirada.
Tu sonrisa, mi risa.
Tu amor, mi amor.
Tan cerca, muy cerca.

Tu geografía, yo cartografía.
Tu norte, yo brújula, 
para allá voy.
Tu sur, mi tentación, 
mi emoción, mi locura.
Tan cerca, muy cerca.

Tu cama, mi nido de amor.
Tu camino, mi piedra, 
con la que siempre tropiezo.
Tu olor, fuerte atracción 
que me conduce a ti.
Tan cerca, muy cerca.

Tu sexo, mi sexo,
locura en pareja.
Tu acaricias, yo las recibo 
agradecido.
Tu el cielo, yo el infierno,
me convierto 
para poder amarte.
Tan cerca, muy cerca.

Tú, mi gloria, yo tu gloria.
Tú, mi religión, yo la tuya.
Tú, mi barco, yo el capitán, 
quien te ordena 
no pares de amarme.
Tú, el faro, yo la luz.
Tan cerca, muy cerca.

Tu eres todo 
lo que yo quiero 
cerca de mí.
Yo lo que tu deseas 
muy cerca de ti.

Yo cerca y tú muy cerca.
Es la hora de hacer el amor.



Sálvame con tu amor


Salva mi vida, 
sálvame de la locura 
de imaginar 
poder perder tu amor. 

Sálvame de todo este dolor 
de perder tu amor. 

El amor a tu lado 
es como respirar 
para poder vivir. 

El amor a tu lado 
es como viajar entre las nubes, 
no me sueltes,
no me dejes caer al vacío. 

El amor a tu lado 
es como caminar 
sobre aguas puras.

El amor es muy delgado 
y en cualquier momento 
se podría romper. 

Tu eres la única 
que me ha hecho sentir 
tantas cosas increíbles 
que no podré repetir 
sino te tengo a mi lado.

Juntos vamos a sobrevivir 
lo que este por venir.

Tu eres el puente 
entre el infierno y el cielo, 
salva mi vida, 
llévame entre tus alas 
a la misma eternidad, 
lugar en donde te habré de amar. 

Con tu amor 
tengo la fuerza para enfrentar 
sin miedo el dolor. 

Salva mi vida 
rescátame de los brazos del dolor 
con tu amor. 

Salva mi vida 
llévame a un nuevo lugar
donde te pueda amar, 
donde pueda 
disfrutar de tu amor.

El amor es algo tan frágil
y en cualquier momento
se podría quebrar.
Salva mi vida, 
sálvame del dolor
de imaginar 
perder tu amor.


Entre Nostalgias y Recuerdos


Lavando mi rostro cogí agua entre mis manos
y por un momento privado quedé, 
pensando quien sabe qué,
cuando volví y mis manos llevé a mi rostro
me di cuenta de que el agua se había ido.

Así se nos va la vida, 
en un descuido pensando en cosas sin importancia
dejamos pasar a las importantes 
y cuando las queremos recuperar es tarde ya, 
se han ido para no regresar.

Triste realidad, pero nuestra vida tiene edad
y nada la puede frenar, nada la puede conservar
cuando esta se nos va, nada ni nadie la puede regresar;
la vida ya se nos fue.

Como aquella agua 
que entre mis dedos se me escapó,
así la vida su caminar continuó, 
conmigo y sin mí, a ella no le importó, 
nunca nadie me avisó que la vida
seguía su interminable andar.

Y yo que no me quería en ella subir
preferí mi paso andar, pero no era igual,
de niño a joven un parpadeo nada más,
de joven a adulto inmaduro menos duró,
y de joven maduro a adulto mayor 
fue mucho más aprisa, a una velocidad mayor.

Hoy solo quedan recuerdos 
del día en que mi rostro lavé sin agua, 
porque esta se me habría escurrido 
entre mis dedos como fiel ladrón.

Un descuido bastó para darme cuenta
y ver mi imagen reflejada en el espejo,
ver que ya no era el mismo,
en mi piel me encontré un par de arrugas 
y entre mi cabellera, si tengo suerte de aún tenerla 
un plateado que me asustó,
pero aunque no me gustó nada pude hacer.

Quién lo diría, pero si hubo quien me lo dijo;
disfruta de la vida, móntate en su vagón
y corre a su ritmo, pero no hice caso, 
lo mismo sucede hoy con los que les cuento 
mi trágica historia, ellos solo piensan; 
esos son cuentos de este viejo.

Pero entre momentos y pendientes 
se nos va pasando la vida;
entre nostalgias y recuerdos de ayer 
se nos va terminando el tiempo;
entre las prisas y las alegrías de una corta juventud 
se nos van los años con tanta prisa; 
la misma que ellos en energía hoy tienen.

De los cero años a los trece vas en triciclo.
De los trece años a los veinticinco vas en bicicleta.
De los veinticinco años a los cuarenta vas en motocicleta.
De los cuarenta años a los sesenta vas en auto.
Y de allí pa´delante te subes a un avión supersónico.
Y de pronto ya te vas de este lugar.

Ahora deseo regresar al día 
en que me lavaba el rostro
y que por breve momento me perdí en mí
y para cuando volví, 
ya el agua para lavar se fue por la cañería.

Cuánto hoy daría 
por recobrar esa agua y a mi rostro poder lavar,
quizá hoy otro sería, quizá hoy estaría tranquilo 
de haber sabido vivir mi vida.

Entre nostalgias y recuerdos; 
entre reproches por lo que hice y deje de hacer
hoy sigo con el mismo error, 
sigo perdiendo el tiempo que la vida me da.

Podría hoy disfrutar esta edad, 
pero pierdo mi tiempo recordando 
aquella edad que jamás volverá, 
que tristeza me da, no haber aprendido la lección,
pero fue mi elección y esa es la traición 
que yo mismo me cometí, no comprender 
lo que es, fue y será por siempre 
y para siempre una vida.



Eterno amor


Hasta aquí llegó mi amor,
aburrido de tanto reproche estoy,
de escucharte llorar a escondidas,
de no recibir una sonrisa más.

Hasta aquí llegó mi amor,
todo terminó, nada quedó
de lo que un día ambos creímos
serían un amor eterno, eterno amor.

Reproches y más reproches,
de que si llego tarde 
o temprano me voy,
de que si ya no te beso igual,
de que mis caricias 
ya no son las de ayer,
si de ti solo reproches recibo,
ya no escucho un te necesito 
y un te amo como lo juramos, 
sería un amor eterno, eterno amor.

Amor eterno, eterno amor
eso creí cuando te conocí 
y te empecé a amar, en ti vi
la mujer que me haría feliz
pero no fue así, 
con el tiempo todo cambió
de nuestro amor nada quedó.
Sería un amor eterno, eterno amor.

Me reprochas que te hago llorar
pero yo lo único que hago es amar,
sigues reprochando 
que si ya no te llevo flores
pero te entrego todos mis amores,
juré que serías y aún lo eres 
un eterno amor, amor eterno.

Juro que no te entiendo
antes eras más comprensiva 
pero hoy todo cambió,
nuestra cama lugar de paz y amor
en un campo de batalla se convirtió
hoy solo reproches
ya no más amor por las noches.

Hasta aquí llegó mi amor,
no mientas que te hago llorar
que nada quedo en nuestro hogar,
que de nuestro eterno amor nada quedó,
todo se transformó, 
que ya no recibes una flor
que lo único que te regalo 
son espinas,
pero bien sabes que no es verdad,
de nuestro amor eterno, eterno amor,
nada quedó 
todo con tus reproches lo terminas hoy.

Hasta aquí llegó mi amor,
ya me voy, 
tienes la oportunidad en tus manos
de que se haga realidad 
lo de amor eterno, eterno amor,
pero tú lo que quieres 
es una flor sin espinas, 
pero de esas es imposible hallar,
pues si quieres una flor 
debes conocer el dolor 
que provocan las espinas.
Asi es el verdadero amor,
amor eterno, eterno amor. 


jueves, 19 de abril de 2018

Extraños


Dos extraños que una mañana salieron de su casa, arreglados para la ocasión, 
se dirigieron hacia la estación y entre la multitud se perdieron, 
a pesar de que a pocos metros el uno del otro se encontraban sin saberlo, 
ni conocerse, pero algo les unía y era un corazón apasionado, 
ilusionado y enamorado y que hasta el día de hoy no habían aun encontrado 
por lo exigente de su corazón. 

Se escuchó que el tren se acercaba y su silbato hizo sonar como advirtiendo 

que estuvieran listos a abordar, pues no había tiempo para por otros esperar, 
la multitud se hizo hacia el anden y entre la multitud como marea 
de aguas saladas los hizo sus hombros tocar, ellos se vieron 
y simplemente sonrieron como diciendo; disculpe usted.

De los durmientes se escuchó el crujir y de ellos 
salió una especie de humo blanco que por un momento 
los dejó sin poder ver y los que apenas se sonrieron 
se perdieron de nuevo entre aquel mar de personas, ansiosas por entrar 
a cada vagón del viejo tren y de entre aquella multitud que sin ellos desearlo 
los hizo en el mismo vagón entrar, ella se sentó a la diestra y él a la siniestra 
un poco más adelante, dos asientos para ser exacto, él sintió sobre su nuca 
la fuerza de una mirada que le hizo voltear, al hacerlo se encontró 
con aquellos ojos verdes de extraña mirada en una extraña, 
ella al verlo verla, sintió que su piel se enchinó y su piel se ruborizó, 
esto la hizo agachar su linda cara y a él con disimulo 
regresar a la lectura de su periódico, pero aquello fue una señal, 
señal para dos extraños con las mismas metas, encontrar el verdadero amor.

Al buen rato de viajar de la estación central a la que les corresponde 
de nuevo se escuchó el rugir sobre los durmientes 
y se dejó ver la niebla blanca que de abajo del tren ascendía 
hacia la parte de arriba y entre el mar de personajes, 
ellos hombro a hombro salían del vagón, como espuma 
que lleva el caudaloso río, sintieron el roce de sus humanidades, 
pero no hubo oportunidad de nada más porque era tanta la agitación 
de todo el mundo por llegar a su lugar de trabajo 
y la verdad que ya era un poco tarde.

Así que, a paso rápido todos salieron del subterráneo, 
de la dicha estación del tren y el mar de personajes se fue diluyendo 
y dividiendo como si fueran ríos en la desembocadura del mar. 

Los extraños caminaron con rumbo a su edificio y en ellos entraron, 
esta vez no hubo casualidad, uno entró en uno de los edificios de la gran ciudad, 
mientras que el otro entró en otro de los edificios, la rutina diaria de trabajo dio inicio.

A las horas de trabajo y más trabajo, llegó la hora del break 
y cada uno de los dos extraños tomo su refacción y salió por una taza de café, 
regresaron a su oficina, la que casualmente se encuentra en el piso cien, 
con la humeante taza de café en sus manos, soplaron y se asomaron 
a una de las ventanas.

Los dos extraños por esas cosas inexplicables, estaban frente a frente 
sin lograr verse uno al otro, a una distancia el uno del otro soñaba 
con el extraño del tren, recordaban la sonrisa tan cálida, 
como la habían deseado, recordaron el roce de sus cuerpos 
y al verse sintieron que algo de ellos les abandono sus cuerpos. 

Eso pensaban con la mirada perdida, según ellos en la nada, 
pero la verdad, era que los extraños se veían sin saberlo a la distancia, 
pero el smog de la enorme urbe no les permitía visualizar que frente a ellos 
estaba el otro extraño con el que ahora mismo pensaban y ambos con él soñaban.

La rutina diaria terminó y ambos salieron de sus edificios, 
esta vez atentos caminaron hasta el subterráneo y estación del tren, 
pero no se lograron ver, y como dos extraños regresaron a sus casas 
pero con la ilusión de saber que allí afuera hay un extraño 
que podría dejar de serlo, para pasar a ser el amor de sus vidas, 
con el que siempre soñaron encontrar, pero que por lo exigente 
de sus corazones aún no lo encuentran.

Y siguen siendo lo que hasta ahora son, dos extraños nada más.


Farolito (las canciones de mi vida)


Caminando con rumbo a su casa, esperando que hoy si me atiendas, 
que hoy si me des la oportunidad de explicar lo que nos separó, 
creo que fue una vil equivocación, una mala jugada 
de personas ajenas a las cosas del amor. 

_Abre la puerta mi amor, 
escucha lo que vengo a decir con mi corazón.

Dije sin recibir respuesta alguna, ni un sonido que le diera esperanza a mi corazón, 
solo el silencio recibí por respuesta y a mi lado la soledad en aquel callejón, 
intenté por tres veces llamar a su puerta y recibir su perdón, 
pero como antes no hubo respuesta alguna.

Decidí regresar al lugar de siempre, con la esperanza 
de que ella creyendo que me fui se asome al balcón, 
me encaminé y al Farolito que alumbra a penas la calle desierta 
al igual que otras tantas noches, esta noche de nuevo testigo fue 
de la canción que compuse para ella y en silencio le canté, 
testigo de verme llorando llamar a su puerta, 
testigo cuando he dejado pedazos de mi corazón 
y aquellos besos que siempre dejé en la puerta 
friolentos, traviesos, amargos cuando debieron ser dulzones.

Farolito, tu que alumbras apenas este callejón olvidado por el tiempo 
como ahora esta mi corazón, con esa llama tan débil 
que parece por momentos se puede extinguir, 
caminando hacia su puerta haces que me acompañen a mi lado 
sombras borrachas en su andar.

Solo espero que un día no se apague para siempre tu luz 
y con ella se extinga este amor que aún tengo por ella en mi corazón. 

Farolito tu me comprendes y sé que de alguna manera 
la has visto por tu lado pasar; cuando la vuelvas a ver, 
dile susurrándole al oído que me has visto llorando llamar a su puerta, 
que le he traído una linda canción y con ella le he dejado un pedazo de mi corazón, 
y que con él, además, un beso friolento, travieso, amargo y dulzón, 
que he pasado cada noche por esta calle desierta 
como desierta hoy es mi vida sin ella. 

Si un día tu tenue luz se extingue, con ella se extinguirá 
la esperanza que aún guardo en mi corazón 
por reconquistar su amor.

No olvides recordarle que he llorado mientras toco a su puerta, 
que me has escuchado cantar una linda canción 
y que me has visto dejar un beso friolento y travieso, amargo y dulzón, 
que he dejado mil pedazos de mi corazón. 

Tal vez te escuche y se doblegue su corazón, su coraje
y el orgullo que un día nos separó.


Inspirado en la canción: Farolito de Agustín Lara.
Historia de: A. Lara y S. Raga



Mejores Noches


Ahora las noches son mejores,
en el cielo una estrella fugaz,
la luna en su esplendor
y tú dueña de mi amor.

Ahora las noches son mejores,
el frío de mi piel se ausentó con tu calor,
tu aroma invadió todo mi ser
y se alojó en mi corazón,
llegas a mi vida con tanto amor.

Ahora las noches son mejores,
las agujas del reloj
se detienen al hacer el amor
y su tic tac 
lo escucho en tu corazón
y se agitan las ganas, 
eres la dueña de mi amor.

Ahora las noches son mejores,
ata mis manos a la pata de la cama,
hazme esclavo de tu amor,
no me castigues dejándome en libertad
mejor ámame otra vez.

Ahora las noches son mejores,
el cielo es despejado, 
una estrella fugaz 
disfruta de nuestro amor
y la luna en todo su esplendor
envidia nuestro amor.

Ahora las noches son mejores,

no me des libertad,
no castigues a quien desea ser 
esclavo de tu amor.

Ahora las noches son mejores,
no siente frío en mi piel 
y mi corazón disfruta 
del calor de tu amor.

Las noches nunca fueron mejores.
Las noches nunca fueron mejores
con otros amores.
Las noches son las mejores
si a mi lado te tengo acariciándome. 
Hasta la más fría y oscura noche
será la mejor
 si siento tu calor y tu amor.



Palabras


Palabras,
buscando palabras de amor
para formar 
la más bella oración de amor
pero solo encuentro sustantivos, 
no he podido hallar 
el verbo que le de vida 
a lo que siente mi corazón.

Palabras,
busco y busco,
a mi lado una pila de papel arrugado
al igual que mi corazón,
busco las palabras 
que le den sentido a mis sentimientos
que expliquen 
en una bella oración de amor
lo que siente mi corazón.

Palabras,
son ya mil, 
pero solo son sustantivos,
adjetivos, que explican 
lo bella que eres para mí,
sigo estrujando papel 
pues no encuentro
el verbo que transmita 
lo que siente mi corazón,
una bella oración de amor.

Palabras,
eso son para mí,
palabras 
que no cobran sentido ni vida,
sustantivos y adjetivos sin vida, 
sin sentido para expresar mi amor.

Quiero formar 
la más bella oración de amor
que explique 
lo que tengo para ti en mi corazón.

Es una linda canción,
palabras 
que no logro que rimen 
con el amor que nació 
en mí para ti.

Palabras, 
busco palabras 
que rimen y le den sentido
a mi oración,
busco el verbo 
que le de la acción y la emoción
a lo que tengo por ti 
en mi corazón.

Palabras que hablen de amor.
Palabras que expresen 
la emoción de tan bello sentimiento
que nació en mi corazón 
cuando te conocí.

Palabras,
son las que no encuentro 
para declararte mi amor,
pues si no fuera verdadero amor
me habría inventado 
una linda oración pero sin amor,
yo quiero encontrar 
el verbo que te diga 
exactamente lo que siente mi corazón,
porque el amor que siento por ti
es real y verdadero.

Palabras,
busco palabras para formar 
la mas bella oración de amor.


Desearía que estuvieras aquí


A medias de mi vida 
me encuentro deseando 
a otra como tú, 
deseando que estuvieras aquí. 

Detener el tiempo 
y regresar a ese día 
cuando te conocí 
y te empecé a amar,
deseando que estuvieras aquí.

En medio de mi vida 
justo en la nada 
me gustaría detener el tiempo 
y regresar a ese momento 
cuando te conocí, 
desearía que estuvieras aquí.

Sin nada ni nadie a mi lado
solo ver pasar el tiempo 
frente a mí, 
deseando estuvieras aquí,
justo a mi lado para amarte 
igual como te amé un día.

Desearía que estuvieras aquí 
en medio de una vida, mi vida, 
deseando se detenga el tiempo
vivir de nuevo contigo
el tiempo perdido, 
pero no es posible, 
solo me queda desear 
que estuvieras aquí, 
no haberte perdido.

Hoy solo me queda 
desear lo imposible, 
detener el tiempo, 
volver a ese momento
cuando te conocí 
y me dices que sí.

Amarte otra vez 
pero me encuentro aquí en solitario 
viendo pasar la vida frente a mi, 
pensando en ti 
y deseando estuvieras aquí.

En medio de mi vida 
sin nadie a mi lado 
llorando recuerdos 
que fueron y ya no son, 
deseando que estuvieras aquí.

El paso del tiempo 
marchitó mi piel
deseando que estuvieras aquí.



Almohada


Escuchando tus promesas de amor 
ahora estoy 
las escucho en mi almohada, 
siento tu olor y tus caricias 
recorrer todo mi cuerpo, 
qué raro, 
pues tú ya no estás aquí.

A quién ahora mentirás, 
a quién ahora le prometes 
lo mismo que ayer a mí.

Otras mentiras 
que grabadas quedarán en otra almohada, 
con tu olor y recuerdos inolvidables 
de manos tiernas y expertas 
recorriendo un nuevo cuerpo.

Mañana ella como yo estará, 
simplemente recordando y soñando. 
Extrañándote.

Escuché un susurro 
y fue en mi almohada 
que me dijo cuanto te amo, 
me llegó tu olor 
y las más delicadas, deliciosas 
y estudiadas caricias sobre mi cuerpo, 
qué raro, 
pues tú ya no estás aquí.

Aquí estuvo el amor o eso creí, 
me engañó y supo que decir 
para enamorar a mi corazón, 
tomó de mí lo mejor 
y después se marchó.

Me abrazo contra mi almohada 
y pienso que eres tú, 
aquí hubo amor o eso creí.

Acaricia con palabras de amor mi corazón.
Pero lo que escucho 
solo quedó grabado en mi almohada
con tu olor.




martes, 17 de abril de 2018

La Isla Maldita


Perdida en algún lugar del océano, lejos de la ruta marítima, sin que nadie sepa que existe, se encuentra una pequeña isla de algunos pocos kilómetros cuadrados, justo ahí, en ella un lugar inhóspito, rodeada de aguas muy feroces y fuertes a toda hora, las oleadas son muy fuertes y se adentran mucho en la playa una que pareciera esta formada no de arena común como en cualquier playa sino de sal, debido a la espaciosidad de esas oleadas, estas arenas reflejan como fiel espejo a un sol que inclemente alumbra a la misteriosa isla, el sol es mucho más incandescente en este lugar que en cualquier otra parte del mundo, sus aguas muy frías contrastan con el intenso calor que asola a todo el terreno de la isla, en ella unas montañas que se levantan hacía el mismo sol, pero sin una sola parte verde, todo en ellas es de un color negro y grisáceo, sobre las costas de la isla se aprecian unas rocas volcánicas, muy raro debido a que en la isla no hay uno solo, quizá esta variedad de piedras se llegaron a formar por el intenso calor solar, sobre el terreno no hay vida, más que insectos de regular tamaño que sobreviven de lo que el mar les lleva en cada oleada, compiten entre ellos para hacerse de algún alimento, el cual escasea, en el lugar, solo el sonido de las coléricas y espumosas olas, la soledad es la que habita la isla, no se logra ver en el aíre una sola ave, cómo gaviotas u otro tipo de ave que su hábitat son las playas por encontrar en el mar su dieta diaria, a lo largo de las playas de la isla se ven en perspectiva las olas golpeando la costa de la isla como intentando aniquilar ese maldito lugar, pero esta a formado una muralla protectora hecha de rocas, apiladas de singular manera, como si alguien lo hizo a propósito personal, a unos cuantos kilómetros de este lugar se nota erguida una especie de torre o faro, pero natural, o tal vez construido en el tiempo de rocas volcánicas queriendo tocar el sol, el cual al atardecer y este caer un fenómeno particular se forma entre estos dos colosos.

El sonido producido por las olas es ensordecedor, y en las alturas el brillante sol brilla en una intensidad que no permite apreciar el azul del cielo, pues este solo se logra ver de un color blanco, así de intensa es la luz del astro en lo alto y desde este mismo lugar y cualquier otro punto en la isla no se a apreciado nunca una sola nube y si la hay no se aprecia por el color del cielo. Entre tantas piedras volcánica, rocas y terrenos se atreven a nacer algún tipo de vegetación la cual nunca llegará a sobre pasar más de unos pocos y cortos centímetros antes de morir y estos restos también servirán de alimento para lo único que ha logrado sobrevivir en esta maldita isla, insectos y todo tipo de alimañas.

En una de las playas de la isla yace moribunda una cría de ballena desesperada y desconsolada llama a su madre, la cual se encuentra a unos largos metros del lugar respondiéndole y entregando amor y su misericordiosa compañía a sabiendas de que ya no tiene posibilidad alguna ahí estará hasta ya no recibir de su cría sonido alguno, entonces se alejará para no regresar por las cercanías de ese maldito lugar y evitar que a ella le suceda lo mismo.

Mientras la pequeña ballena muere a kilómetros de la nunca vista isla maldita una embarcación se abre paso entre las aguas del océano con rumbo desconocido, sobre la embarcación se encuentra recostado en una de las barandas un hombre fortachón, de gran envergadura, con la vista perdida justo para el lugar en donde se encuentra perdida la isla, por debajo de su gorro que le da el rango de capitán del barco sus ojos azules se inmersan en la nada del horizonte y siente la agonía de la pequeña ballena, el enorme hombre de cabellera y barba canosa no se da cuenta de que el número dos se a colocado a su diestra mirando con curiosidad hacia donde este ve sin pestañar, sin lograr darse por enterado lo que acontece a su rededor.

_¿Qué piensa Señor?

Dice el Número Dos, pero el Capitán sigue sin percatarse de que alguien esta a su lado y hablándole, la única respuesta que recibe del Capitán el Número Dos, es una bocanada de humo la cual fue aspirada de su vieja pipa.

_Señor, ¿sucede algo, ve algo?
_¡Ah! número dos, es usted, ¿qué quiere, pasa algo en el barco?
_Nada Señor, solo que llevo un buen rato a su lado y usted ni enterado, es por eso que le pregunto si le pasa algo.
_Nada número dos, solo que presentí que algo malo pasaba por allá.
_Pero por allá no hay nada, Señor.
_Lo sé. ¿Linda tarde no Número Dos?, pero presiento que algo anda mal por allá. No me haga caso Número Dos.

Número Dos sonríe mientras que el Capitán deja salir de su boca otra bocana de humo, en eso...

_¡Capitán, Capitán!

Gritaba el contramaestre a su Capitán, en su rostro la angustia.

_¿Qué sucede Contramaestre?
_Los instrumentos se han vuelto locos Señor.
_¿De qué habla Contramaestre, los instrumentos no pueden volverse locos, en todo caso el loco sería usted.
_Solo es una manera de hablar Señor. Mejor es que venga a ver.
_Vamos Número Dos, veamos que sucede con los instrumentos.

Los tres caminaron hacia el puente, lugar en donde está el timón y los instrumentos locos, según el Contramaestre, entraron en el puente y al hacerlo el Capitán y Número Dos, entendieron lo que el Contramaestre quería decir.

_¿Lo ve Señor?
_Es algo extraño, ¿por qué se comportarán de esta manera los instrumentos? No entiendo. ¿Qué opina Número Dos.

El Número Dos iba a dar su opinión, pero este fue interrumpido por uno de los marineros, el cual entró en el puente con el rostro aterrado.

_¡Señor, mi Capitán, se acerca una extraña y monstruosa tormenta!
_Pero, ¿acaso todos se han vuelto locos?, afuera hace una linda tarde.
_No Señor esta es una horrible tormenta que viene hacia nosotros o nos atrae hacia ella, Señor.

Un aire frío que lo llevó los vientos violentos que estaban al frente de ellos entró en el puente y les erizó la piel a todos, estos se asomaron por las ventanas del puente y observaron que una extraña tormenta nunca antes vista por ellos en alta mar los atraía hacia ella, era como si una nube negra se posara sobre ellos y por debajo de esta la más cruel y asesina de las tormentas, la oscuridad se apoderó de la embarcación, esta comenzó con los movimientos abruptos y violentos, las olas eran enormes y casi eran como unas bocas que lo tragaban y luego lo escupían, los marineros en la embarcación no tenían nada que hacer, la orden del Capitán a sus hombres fue de que se encerraran en sus camarotes y esperaran a que la tormenta pasara, en el puente solo quedaron: Capitán, Número Dos y el contramaestre, intentarían que este no naufragara bajo los violentos embates de esa extraña tormenta que apareció de la nada.




Continuará...



jueves, 12 de abril de 2018

Ahora el amor es mejor


No logro disimular 
tanta felicidad
llegas a mi vida 
y con tu amor 
logras remendar 
a mi corazón.

Corazón que un día creí 
que nadie lo podría reparar.

Duro fue ver a la mujer 
que tanto amé 
romper mi corazón.

Pero eso quedó en el ayer
te conocí y con tu amor
sanas tanto dolor
y remiendas mi corazón
con puntadas llenas de amor.

A pesar de todo
me llegan a la mente
momentos de aquel 
traumático día.

En ese entonce
no creí que alguien 
me salvaría a la desgracia
del abandono 
y el desamor,
al tremendo dolor.

Bendita mujer
que me vio sufriendo
y me amó,
me consoló y con puntadas
de amor 
mi corazón lo remendó.

No quedó como nuevo
pero sí como para volver
a confiar y lo mejor,
volver a amar, 
que era mi mayor 
preocupación,
nunca poder 
volver a amar.

Como tú 
hay muchas mujeres.
que aprovechan 
cuando son bien amadas
para hacer de las suyas,
desquitar su amargura 
que otro antes les heredó
y creen que provocando
dolor a quien ahora las ama
se desvanecerá 
su desgracia de ayer,
la que otro les heredó.

Que bueno que hay mujeres
como la que un día
con paciencia y mucho amor
en cada puntada, 
con hilos de ternura 
mi maltrecho corazón 
con amor lo remendó
y mi dolor remedió.

Ahora mis días
son mejores, 
son más dulces,
ahora las noches 
son cortas,
nos faltan horas 
para entregarnos
el amor que nos sobra
porque no son sobras,
son caricias nuevas 
cada vez que nos encontramos 
para amarnos.

12/4/18


Ahora el amor es mejor. 

No logro disimular tanta felicidad has llegado a mi vida y con tu amor lograste remendar a mi corazón.
Corazón que un día creí que nadie lo podría reparar. Duro fue ver a la mujer que tanto amé romper mi corazón de esa manera tan cruel. Pero eso ya quedó en el ayer, te conocí y con tu amor sanas tanto dolor y remiendas mi corazón con puntadas llenas de amor. A pesar de todo me llegan a la mente aquellos momentos de aquel traumático día.
En ese entonce no creí que alguien me salvaría de la desgracia del abandono y el desamor, al tremendo dolor que causa una despedida así. 
Bendita mujer que me vio sufriendo
y me amó, me consoló y con puntadas de amor a mi corazón lo remendó. No quedó como nuevo, pero sí como para volver a confiar, y lo mejor, volver a amar, que era mi mayor preocupación, nunca poder 
volver a amar. Como tú hay muchas mujeres que aprovechan cuando son bien amadas para hacer de las suyas, desquitar su amargura que otro antes les heredó y creen que provocando dolor a quien ahora las ama se desvanecer el propio, su desgracia de ayer, la que otro les heredó. Que bueno que hay mujeres
como la que un día con paciencia y mucho amor en cada puntada, con hilos de ternura mi maltrecho corazón con amor lo remendó y mi dolor remedió. Ahora mis días son mejores, son más dulces, ahora las noches más son cortas, nos faltan horas para entregarnos el amor que nos sobra, porque no son sobras, son caricias nuevas, las estrenamos cada vez que nos encontramos para amarnos. 

SergioRaga
9/9/22


Besa mi boca


Besa mi boca 
y sentirás 
la dulzura de mi amor.

Besa mis sueños 
y acompáñame 
a contemplar la luna.

Besa mi piel 
y sentirás la pasión 
que todo este tiempo 
guardé para ti.

Besa mi amanecer 
y de nuevo te haré el amor.

Besa mi espíritu 
y de mi cuerpo escapará 
en busca de su hogar, 
pero regresará 
porque nunca 
te pudo olvidar,
porque nuca
te logró dejar de amar.

Besa mi pasado 
y entierra toda desilusión.

Besa mi futuro 
y envejeceremos juntos 
tomados de la mano 
observando el horizonte
y entonces, mírame 
y vuelve a besar mi boca, 
descubrirás que aún me amas,
que aún nos queda 
mucha dulzura por compartir,
que aun me queda mucha miel 
de amor por ti.

Bésame y bésame mucho,
que nunca te canses 
de besar mi boca
y yo te prometo 
que siempre tendré 
miel para ti.



miércoles, 11 de abril de 2018

Mi vecino el pastor


Cada cierto tiempo llegaba del interior a la casa de mi vecina su señor padre, un personaje con la educación y el don de gente sobre su persona. Por la ventana lo vi pasar con rumbo a la vecindad, entonces le grité a mi madre.

_¡Mamá llegó el papá de Conchita!
_¡Dios mío! 

Dijo mi madre y con seguridad todo el vecindario y es que no era una mala persona como para expresarse así al enterarse de que llegó. Al rato de que seguramente saludó a nuestros vecinos salieron a la calle y bajaron su equipaje del taxi. En cosa de media hora sonaba el timbre de la casa, yo me hice el quite e hice el que no escuchó sonar el timbre, creo que todos fingieron no escucharlo, pero este sonaba con insistencia, que seguro mi madre dijo; al mal paso darle prisa, así que llegó a la puerta y al abrirla mi madre como toda una gran actriz hizo su actuación, y para eso no había quien fuera mejor que ella, si dieran un Oscar por esto seguro mi madre tendría para tirar al cielo. Don Cipriano entró a la casa invitado por mi madre y él se acomodó, luego de saludarse y todo ese ritual, ya acomodado dio inicio la plática; el resto de la familia no salía de sus habitaciones, don Cipriano dio inicio a evangelizar a mi madre, resulta que don Cipriano era un pastor de hueso colorado y su única finalidad en esta tierra y en su vida era convertir a cualquier criatura sobre la tierra: mi madre lo escuchó pacientemente por largo y tendido tiempo, hasta que la sacó de sus casillas y muy educadamente lo detuvo y sin él darse cuenta lo levó hasta la puerta y en un santiamén e cerró la puerta, escuché cuando mi mamá exhaló un suspiro de aliento y descanso, fue entonces que todos salimos de nuestro resguardo riendo y burlándonos de mi madre. 

_¡Vayan a la mierda cabrones!

Dijo muy molesta y regresó a la cocina, nosotros seguimos riendo, pero cada que alguien se asomaba a la puerta se nos agitaba el pulso y primero verificábamos por la mirilla o la ventana quien era el que llamaba a la puerta, evitando toparnos con él, para así no tener que escuchar sus discursos bíblicos y es que no es que no quisiéramos escucharlos pero son tan insistentes en que aceptes al Señor como si uno no la hecho ya, pero si no es con él (en este caso) no es valido.

Al tiempo de sus visitas personales al vecindario y de que todos exhalaran un suspiro de alivio cada que se iba, se escuchó en toda la cuadra.

_¡Probando, probando, uno, dos, tres... Probando, probando, uno, dos tres...!

Cuando yo escuché aquello muy amplificado eran como las siete de la mañana y casi me caigo de la cama, se trataba de don Cipriano que para esta ocasión a su visita a sus familiares se había comprado un amplificador y el alto parlante lo colocó en la terraza y una vez realizadas sus pruebas de audio dio inicio su predica. Lo que le dijo a cada quien en persona ahora lo gritaba prácticamente a través de su aparato, la cuadra era un templo evangélico y cada hogar veníamos siento sus feligreses, solo faltaba que nos cobrara el diezmo (chascarrillo). lo bueno para mí era que yo me iba a vagar con mis amigos y nos evitábamos unas horas del santo evangelio, pero para los que se quedaban en casa y deseaban ver su telenovela esto era imposible. 

Ya había transcurrido una semana de aquello nuevo para el vecindario y nada lo detenía, los vecinos estaban cansados y muy molestos, pero esto a ellos les valía madre, decían que el enojo de los vecinos era una treta del enemigo, del demonio; pero lo soportaban porque en realidad era una excelente persona y nuestros vecinos también al fin de cuentas ya solo faltaban tres semanas para que se fuera y sería hasta el año próximo, jajajaja.

Una mañana, como siempre muy puntual a las siete de la madrugada yo cuasi en el suelo, por no acostumbrarme se escuchó el...

_Probando, probando, uno dos... Puc...  

Y el silencio invadió todo nuestro vecindario, disimuladamente y tímidamente todos nos acercamos a nuestras ventanas pues el puc había sido muy sonoro y luego la nada, el deseado y ansiado silencio; yo en lo personal me metí entre mis calientitas sábanas pues para ser honesto era el único que sabía que había pasado y me dormí plácidamente. A eso de una media hora de esa paz sonó el timbre de la casa, yo desde adentro de mis chamarras escuché cuando preguntaron por mí.

_¿Está Sergio?

Mi madre le dijo a don Cipriano y Conchita, que sí, pero que aún estaba dormido y con sarcasmo agregó.

_Pobre mi hijo, lo que pasa es que ya lleva una semana desvelándose y ahora que logró dormir no lo voy a despertar. ¿Para que lo quieren? 
_Ah, pobre muchacho, si es cosa de desvelos que siga durmiendo, yo regreso al rato. 

Dijo don Cipriano, y junto a su hija se regresaron a su casa, cada media hora se escuchaba el puc. y solo eso, y luego sonaba el timbre, mi madre repetía.

_Todavía no se despierta.

Y yo gozando bajo mis sábanas, disimulando que seguía durmiendo, pero ya cuando era como medio día mi mamá entró en mi cuarto.

_Sergio. ¿Estas enfermo, por qué no te has levantado?
_Madre no me he levantado para evitar a don Cipriano.
_¿Pero por qué? en eso se escuchó otra vez el puc.
_Por eso madre, ¿sabes qué significa?
_¿Ese puc, no no sé?
_Ese puc madre, es el sonido de un milagro, el sonido del cielo.
_No te entiendo, ¿te drogaste ayer desgraciado?
_No madre, ya me conoces, jajaja.
_Entonces me explicas pues ya me estoy encabronando. 

Era obvio el sistema nervioso del vecindario no estaba del todo normal.

_Lo que pasa madre es que el amplificador de don Cipriano se quemó, jajajajaja.
_Ahora entiendo porque está ansioso de hablara contigo.
_Exacto y ahora ya sabes el por qué sigo dormido, jajajajaja.
_Pero hijo no vas a estar dormido hasta que se vaya, te levantas y lo atiendes.

Dijo mi madre muy seria mientras salia de mi cuarto, yo no tuve de otra que levantarme, bañarme y después comer un pan en seco pues ya era hora del almuerzo, al cabo de lo que me llevó todo lo antes expuesto de nuevo sonó el timbre y mi madre desde adentro gritó.

_¡Sergio, ve y abrís que debe ser don Cipriano!

Y sí, era don Cipriano.

_Hola patojo, cómo seguís de tu desvelo, debes tener cuidado con eso de desvelarte pues te vas a envejecer en plena juventud, además es un pecado estar de huevón, eh.
_Gracias don Cipriano, ¿en qué le puedo servir?
_Ah sí, es cierto, quiero que me acompañes a revisar el aparato que solo hace puc al encenderlo y me urge hablar de la Palabra.
_Qué raro don Cipriano, pero vamos.

Mientras viajábamos con rumbo a la casa de Conchita, yo iba maquinando que escusa dar para no reparar el bendito aparato.

_Entrá, pasa adelante Sergio. 

Dijo Conchita con mucha amabilidad, yo seguí para donde me indicaban y llegué al comedor, lugar en donde ya don Cipriano tenía el aparato arruinado.

_Acá está mira Sergio, ¿me lo podrás reparar? me urge arreglarlo.
_Pues, eso no es solo así don Cipriano, esto lleva su tiempo y tengo que revisarlo para llegar a tener un diagnostico exacto y así no hacerlo gastar de más.
_Por el dinero no te preocupes, nuestros hermanos corren con los gastos de las cosas del Señor. Además podrás donar la mano de obra, solo cobrarías los repuestos a necesitar, será una obra de caridad para la obra de nuestro Señor.
_Por lo mismo don Cipriano hay que revisarlo.
_Pues revísalo. 

Entonces ya entre la espada y la pared tocó, así que procedí a hacer una revisión de vuelo de pájaro y justo entonces encontré la excusa perfecta para quitarme tremenda pacaya de encima.

_Mire don Cipriano, por lo visto aún tiene garantía y si lo reviso yo perderá la garantía, yo le sugiero que lo lleve al lugar donde lo compró y que ahí se lo revisen, así se evita un gasto.
_Mmmmm. pero eso significa que debo esperar tres semanas mientras regreso al pueblo. Mmmmm,.

Dijo con la mano en la barbilla y observando a los cielos, como esperando una señal Divina, así estuvo un buen rato sin decir más que mmmmmm. Entonces dijo.

_Está decidido, la palabra de Dios no puede esperar así que abrelo no me importa que se pierda la garantía.

Ni modo me toca, ya no tengo otra excusa.

_Esta bien don Cipriano, me lo lleva al rato a la casa, ya sabe allá tengo mis herramientas y equipo para evaluar que daños sufrió y el por qué para que no suceda otra vez.
_Espérame patojo me voy contigo de una vez.

Dijo don Cipriano y yo decía: -Demonios no hay manera que me lo quite de encima por un rato, bueno, a esperarlo, ya en la casa veré qué hago.

Al rato llegamos a la casa y al entrar le digo a don Cipriano.

_Bueno don Cipriano déjelo yo lo reviso y le cuento.
_Yo te acompaño mi´jo.

Dijo el intenso de don  Cipriano, pero mi madrecita salió a mi rescate.

_Pero don Cipriano, es la hora del almuerzo y vamos a almorzar, Sergio le verá el aparato al rato, vaya a su casa y también almuerce.
_Yo estoy en ayuno doña Blanquita.
_Ah bueno, pero nosotros no y nos morimos del hambre, así que vaya y hace su ayuno en su casa, nos vemos al rato.

Dijo mi mamá tomando del brazo a don Cipriano quien se resistía a irse, pero mi madre lo llevó hasta la puerta y como lo hizo cuando llegó, le cerró la puerta y una vez cerrada se recostó en ella como evitando que don Cipriano entrara de nuevo. regresó hasta donde estaba yo esperando mi almuerzo y me dice con tono amenazante.

_Cuidado y reparas ese endemoniado aparato, el vecindario completo estuvieron llamando y me advirtieron que te lo dijera, ese aparato no debe funcionar por lo menos en dos semanas y si son las tres que le quedan a don Cipriano para irse mejor. Te amo hijo.

Dijo mi señora madre y soltó mi brazo el cual ya estaba morado de lo apretado que me lo tenía; y no es que mi madre fuera mala, es que estaban desesperados. Además sobre mi cabeza había una amenaza del vecindario, la consigna era; no reparar el aparato.

Más tarde llegó don Cipriano cuando él dedujo habíamos terminado de almorzar, fue mi madre quien le atendió.

_No está, salió al centro por unos repuestos.
_Caramba, que alegre, seguro ya le encontró el daño a mi aparato y fue a la busca de sus repuestos. Dios lo bendiga.

Dijo don Cipriano, pero ese día no regresé a casa sino entrada la noche, cuando lo hice, me dije un día ganado a don Cipriano, pero aún quedaba mucho tiempo más.

A la mañana siguiente, llegó temprano don Cipriano, mi madre lo atendió y le dijo.

_Está durmiendo, ayer regresó tarde y se durmió tarde revisando aparatos.
_¿Revisaría el mío?
_No sé, como tiene tantos compromisos, y cada uno tiene su tiempo, usted deberá esperar su turno.

Mi madre se las sabía todas, por lo menos con esta casaca nos ganábamos un par de días más. Así tuvimos a don Cipriano, lo bueno era que en esta misión no estaba solo, los vecinos eran mis cómplices, ellos también hacían lo suyo para evitar que yo reparara el aparato y así ganamos juntos una semana, el pobre de don Cipriano estaba desesperado, más de lo que nos tuvo esa semana que su aparato funcionaba perfectamente. Ni modo llegó el día de abrir el bendito aparato, pues ya no se podía posponer más, esta vez don Cipriano estaba justo ahí, con él mis amigos, los cuales por detrás de él hacían muecas y me empuñaban las manos en señal de que si reparaba el aparato me darían una paliza. Empecé por quitar la etiqueta de la garantía, lo hice lentamente, muy lentamente con la disculpa de lograr quitarla intacta para así siguiera con su garantía, mientras lo hacía don Cipriano oraba, y cuando estuve a punto de lograrlo el último pedazo se rompió.

_Se rompió don Cipriano, lo siento, se perdió su garantía.
_Así son los designios del Señor, no te preocupes mi´jo. Sigue con tu trabajo.
_Está bien don Cipriano.

Seguí con mi cirugía electrónica y don Cipriano seguía observando y en pensamiento orando, mientras mis amigos de toda la vida me veían amenazantes. Cada tornillo que quitaba se escuchaba un típico sonido de que nunca a sido abierto y todos cerraban los ojos como pidiendo hubiera uno que no se pudiera quitar, así seguí hasta que me quedó uno, el último tornillo que sería quien nos robaría el silencio deseado a una semana de que don Cipriano emprendiera su viaje de regreso a su hogar. Yo vi a mis amigos y don Cipriano quien se gozaba, entonces debí haber dado vuelta al aparato para abrirlo pero no, decidí hacerlo como estaba, un grave error para alguien con experiencia y cuando lo hice se escuchó el sonido pero este sonido no fue del tornillo fue otro sonido, uno diferente y más sonoro, luego de ese extraño sonido al cual todos nos acercamos para observar que sucedía, en eso sentí un tremendo dolor en la muñeca y de mi mano fue apareciendo una protuberancia y yo grité por el dolor, con la fuerza y el mal lugar había logrado que se me lastimara la mano, era como una especie de dislocación que después supe que no, todos excepto don Cipriano gritaron de emoción, pues no se podía abrir el aparato, pues el dolor era intenso y yo me dolía, don Cipriano al verme retorcer de dolor y el bulto en la muñeca de mi mano y además el relajo o mejor la algarabía de mis amigos, este se voltea y los ve con una cara de pocos amigos, estos al verlo, se hicieron los locos y fingieron orar por mí, por mi salud.

_Deja esto Sergio, ya me di cuenta de que has tenido toda la buena voluntad de ayudar al Señor, pero lamentablemente te has herido, seguro ya no se podrá reparar mi aparato, pero oraré por ti, para que sanes en el nombre del Señor.

Yo lo agradecí, pues si me dolía y la verdad no entendía qué había sucedido, los que estaban que no aguantaban eran mis amigos, don Cipriano tomó su aparato y los tornillos que logré quitar, se los colocó y luego salió con rumbo hacia la casa de su hija, en su rostro la pena, no sé si por mí o por no lograr reparar su aparato, cuando don Cipriano salió de mi casa y cerró la puerta detrás de él todos gritaron con un tremendo jubilo y hasta me cargaron en hombros: -¡Sergio el héroe! gritaban conmigo en la sala, mientras yo no aguantaba el dolor y la deformidad de mi mano.

Luego mi madre salió y les dijo hasta de que se morirían a mis amigos, los cuales me depositaron en el sofá, mi madre me revisó y me dijo.

_Esto necesita una cirugía, no es una muy invasiva pero si es necesaria. pues de no hacerse te quedará mal tu mano. 

Entonces mis amigos se acercaron a mí y me dijeron.

_Pensamos que estabas actuando. 

Se quedaron en silencio observando la deformidad de mi mano y después de hacerlo, me dicen. 

_Eres nuestro héroe, sacrificar tu mano para nuestra tranquilidad. ¡Viva Sergio!

Gritaron los desgraciados.

A los días, después de una colecta, la cual fue dada con mucho agradecimiento por mis vecinos, incluyendo a don Cipriano y familia, me operaron mi mano, la operación me dejó cinco puntos. 
Don Cipriano se regresó a su casa, pero volverá en un año, seguro con el amplificador reparado o uno nuevo y más potente, pero esta es otra historia. 
El cirujano me dio indicaciones de que debía y que no debía hacer, pero como no hice caso se me infectó la cirugía, pero esta también es otra historia.



Tomado del libro: "Historias de un Adolescente Tímido" por Sergio Raga



lunes, 9 de abril de 2018

A lo Sharon Stone


Abre las piernas 
como Sharon Stone
que quiero ver en ellas la gloria.
Nadie, me dices, 
que estuvo antes allí.

Enciende un cigarrillo 
y fuma con sensualidad,
acomódate en esa silla 
que quiero ver tus pantorrillas.

Habla y di, 
si lo deseas groserías 
que para mí será poesías.

Ríe o ríete de mí,
tienes en tu expresión 
una particular vulgaridad 
pero para mí eres sincera 
y solo dices la verdad.

Seguro estoy 
de que no eres una asesina,
pero sí podrías asesinarme 
si me permites conocer la gloria
que traes entre esas lindas piernas,
tranquila yo no levantaré cargos
porque me habrás hecho un milagro.

Estás cómoda en esa silla 
sino busca la comodidad
que para mí ese no es problema
si al hacerlo 
mueves ese par de lindas piernas
y me permites ver un poco más allá.

Así, sigue así 
buscando el confort
y deja ver todo lo bello 
que muy bien lo has depilado.

Son tus piernas interminables,
largo el camino hacia la felicidad,
te juro que no me cansaré 
en esa caminata 
que me llevará hasta la gloria 
de poder saciar mi sed,
sediento de ti estoy.

Por favor no te recuestes,
si sentada como dama 
me haces perder la calma,
ahora mucho más, 
echada para atrás me matarás.

Esa minifalda 
que elegiste de color blanco
hace que me imagine 
que eres un ángel caído,
solo espero que ese ángel 
que del cielo cayó
se convierta en un demonio
y que sin freno
me haga pecar a su lado,
que me invite a despertar juntos.

Quemarme 
entre las llamas del infierno
que tienes entre esos piernones 
largos y eternos 
comos lo será mi condena 
si sigo contigo.

Tóme un respiro 
que el interrogatorio aun no termina
acomódose o levántese, 
eso es, mejor levántese
así me permitirá disfrutar 
de toda su deidad femenina.

Vaya que mujer 
me ha dejado perplejo y húmedo,
que peliculón, no crees amor,
me gustaría tanto replicar esa escena
pero no eres Sharon Stone,
ni tienes esa depilación.

De igual manera 
abre esas piernas mujer
a lo Sharon Stone, 
igual tú también 
traes entre las piernas mi propia gloria
la quiero de nuevo conocer 
y en ella entrar,
quedarme ahí por la eternidad.

Pero en mi mente me repito:
Abre las piernas como Sharon Stone
y deja salir tus más bajos instintos.

Nadie la descubrió 
que una sensual asesina fue y será, 
quién será su siguiente víctima,
juro que esa, desearía ser yo.




viernes, 6 de abril de 2018

Mi Primer Beso


Me encontraba jugando con mi prima, ella era mi mejor amigo, éramos dos chavales de apenas 6 años. De pronto ella se voltea hacia mí, yo la veo sin saber que sucedía, pero en su cara había una rara expresión una que nunca antes vi, ella se puso seria y sus ojos verdes se abrieron tanto que me asustó, una vez de frente a mí ella me dice: Ahora somos novios. Yo sentí que me asusté, de qué hablaba mi mejor amigo, qué era aquello de que ahora éramos novios, ella sin decir nada avanzó hasta donde yo me encontraba petrificado, paso que daba hacia adelante, paso que yo daba pero para atrás, el miedo me invadió y sin saber qué hacer, otro paso más, ella una felina coqueta y sensual y yo la presa indefensa y sin nada más que retroceder, así siguió aquello, ella avanzando con seguridad y yo retrocediendo con miedo intentando salvaguardar mi integridad, por fin dio otro paso más al igual que yo, pero vaya sorpresa mi espalda se encontró con la pared, presa sin escapatoria, ya no podía hacer nada, ella avanzó sin detenerse y cuando sentí su cuerpo se juntó al mío, yo petrificado, ella cerró sus ojos y se abalanzó hacia mis labios y los besó, yo sentí que era bueno, algo nuevo pero que me gustó, esa sensación me recorrió por todo mi cuerpo, ella no dejaba de besarme y yo deseaba que el tiempo se detuviera; mis ojos muy bien abiertos no había motivo para cerrarlos, y observaba todo al tiempo que sentía de todo.

Al tiempo llegó a casa un tío que siempre nos visitaba y con él su pequeña hija, por la noche nos encontrábamos los cuatro en el cuarto y mientras nuestros padres hablaban y hablaban, ella se metió por debajo de una sábana blanca y yo imité sus movimientos y nos tapamos, la sábana nos llegaba hasta el cuello, de pronto ella se metió por debajo de la blanca sábana y yo seguí con aquel misterioso juego, ya por debajo de la sábana solo escuchando la voz de nuestros padres los cuales estaban muy distraídos con el chisme, ella sin mediar palabra se acercó hasta mí y yo distraído cuando reaccioné ya era tarde, ella estaba con sus labios pegados a los míos, otra vez esa rara sensación; yo me preguntaba mientras disfrutaba de aquel beso, por qué cierran los ojos.

El tiempo pasaba y mi prima cada que podía nos besábamos, en el cuarto, en el jardín, en el auto, donde nadie nos viera. 

Para una navidad en la que nos llegó a la casa toda la familia de mi madre, después de las doce cenamos, yo al terminar dije muchas gracias y tomé mi plato y me dirigí para la pila, cuando deposité mi plato y cubiertos en el lavadero al dar la vuelta me encontré con mi prima, ella era de mi edad, era otra prima y sin que se dieran cuenta se había tomado unos tragos de licor, así que estaba desinhibida y muy atrevida, se dirigió hasta el lavadero se colocó dando la espalda al lavadero y con su cara dispuesta para mí, yo me preguntaba qué pasaba, aquello no era normal, era evidente que estaba tomada, pero esta vez no me moví, sabía lo que ella quería y yo también, entonces ocurrió lo de siempre, ella cerró sus ojos y entre abrió sus labios, yo vi para un lado y para el otro, como aquel que esta a punto de hurtar algo, entonces me acerqué a los labios de mi prima que me esperaban y los uní a los míos, ella al sentirme me abrió la boca con su lengua, la metió muy adentro, al principio fue raro, qué era esto, pero al rato supe que no estaba desagradable, por el contrario era una sensación muy agradable, seguimos besándonos hasta que apareció mi madre.

_¿Qué hacen, van a lavar los platos?

El tiempo siguió su ininterrumpido andar y para unas vacaciones llegué al pueblo, allá me esperaban mis primos, entre ellos la que me besó bajo la sábana, pero entre los ya conocidos se encontraba alguien a quien jamás antes vi, yo le digo a mi primo; quién es ella. Ella es mi prima, bueno alguien más con quien jugar, para esa etapa de mi vida ya era un pre adolescente de como trece años. A la mañana siguiente nos reunimos y todos entre risas maliciosas dispusieron que iríamos a casa de la chica nueva y así lo hicimos.

_Buenas doña Tulita, vamos a ir a jugar al cuarto de la Fulanita nueva.
_Pero no vayan a hacer travesuras, mucho cuidado eh. Dijo doña Tulita mientras atendía la tienda.

Llegamos al cuarto de la Fulanita y ella entró, se dirigió hasta su cama y se sentó, yo no entendía nada, mi primo me dice.

_Entra, ella dice que le gustas y quiere que la beses.
_¡¿Qué?!
_¿Qué pasa, acaso no has besado a nadie.

Aquel fue un golpe bajo, del cual debía salir victorioso.

_No, claro que ya he besado.

Dije indignado.

_Entonces entrá y bésala, nosotros vigilamos aquí.

Dijo mi primo.

La Fulanita esperaba en la orilla de la cama con la vista puesta al suelo, yo caminé al patíbulo, en ese momento sentía que no avanzaba, que la distancia se había triplicado, mientras avanzaba escuché el rechinar de las bisagras lo cual nos daba privacidad, pero las risas pícaras de la concurrencia se escuchaban, también el Shhhhh, para no ser descubiertos por doña Tulita. Al fin llegué y menté al lado de la Fulanita y vi para todos lados, estaba asustado y emocionado. ¿Y si nos cachaba doña Tulita? Las bisagras sonaban de vez en cuando y por entre lo que la puerta permitía los ojos de la banda y las risas nerviosas, pude escuchar cuando alguien preguntó.

_¿Ya?
_¡Shhhh!

Bueno a lo que me enviaron, le coloqué mi brazo sobre sus hombros, ella seguía viendo hacia abajo, imagino que emocionada y asustada, recordé el beso de la navidad anterior, así que le tomé la barbilla y lentamente y sutilmente le fui levantando la cara hasta que ella quedó entregada recostando su cabeza sobre mi hombro y al hacerlo tenía los ojoso cerrados, vi sus labios y me acerqué lentamente coloqué mi boca entre abierta, mientras que la de ella estaba cerrada, al besarla ella no abrió la boca y eso fue raro, así que traté con mi lengua de abrir su boca pero esta estaba muy bien cerrada y por mas que hice no logré que la abriera dejándola toda ensalivada, yo escuchaba risas nerviosas y esto.

_Deja ver. Quiero ver.

En eso todos entraron como estampida y mi primo dijo muy asustado y nervioso.

_Viene doña Tulita.

Todos nos hicimos los locos, ella llegó y nos observó detenidamente, luego dijo.

_¿Por qué tanto silencio y risas nerviosas, qué están haciendo?

Días después ella ya había aprendido y los besos fueron mejores.

Para cuando tenía quince años, me invitaron a un viaje, así que nos fuimos, pero estuvimos en un lugar antes de cruzar la frontera al país, nuestro destino. Una noche uno de mis amigos por los cuales me invitaron al viaje me dijo que lo acompañara al campo de la feria y así lo hicimos, cuando nos acercábamos al campo de la feria se nos acercó una chica amiga de mi acompañante, este se le iluminó el rostro al verla y nos presentó, a mí me impresionó, era muy linda, ella al saludarme y yo extenderle mi mano, ella la tomó y mi mejía la besó, yo sentí una buena vibra, pero a mi amigo esto no le gustó, resulta que la niña posiblemente rondaba mi edad y andaba con una chaperona más o menos de la edad de nosotros, la chica dispuso que la chaperona fuera la pareja de mi amigo y yo la de ella para subir a las ruedas mecánicas a las cuales ella nos invitó, esto emocionó a la chaperona y por supuesto a mí, no así a mi amigo. Nos la pasamos increíble, menos mi amigo, al fin llegó la hora de volver a casa y la chica nos dice si la acompañamos hasta su casa, mi amigo dijo que no apresuradamente, pero yo dije que sí, y así lo hicimos, mientras caminamos ella me ofrece un chicle de mora o fresa, no lo recuerdo bien, pero era uno la pura miel. Cuando llegamos a un lugar al fondo se lograba ver una enorme casa, lujosa muy linda, ella dice hasta aquí, no quiero nos vean mis padres acompañadas pues no me dejarán salir mañana, está bien, la chaperona se alejó de nosotros con mi enojado amigo y una vez ellos alejados la chica se cuelga e mi cuello y me besa, yo de una me tragué el chicle, la chica era una experta en el arte del beso y creo que sabía lo que el chicle haría pues nuestra saliva tenía un delicioso sabor a miel, esa noche nos besamos largo y tendido sin desear separarnos uno del otro, hoy que lo recuerdo se me hace agua la boca, una de mis mejores experiencias en esto de los besos.
De regreso mi amigo no me hablaba, pero con forme avanzamos este me dice.

_¿Cómo besa?
_Muy rico, muy rico.

Para las vacaciones de ese año como era costumbre regresé para con mis primos, solo que esta vez todos habíamos crecido, ya no éramos los mismos. Para la mañana siguiente llegó mi prima la de las sábanas blancas convertida en una belleza de mujer, recuerdo que me invitó a salir a un corredor largo y solitario, yo me acomodé sobre una cómoda silla, ella se sentó sobre mis piernas y me dice.

_¿Recuerdas las sábanas blancas?...


Continuará...



Tomado del Libro: "Historias de un Adolescente Tímido" de Sergio Raga.

miércoles, 4 de abril de 2018

Canciones tristes de amor


Quién llora en su cuarto
el adiós de un amor?
Quién disimula con una sonrisa
el dolor que tiene en el corazón?
Quién se asoma a la ventana
y suspira por un amor que se fue?

Quién escucha en la radio
canciones tristes de amor del Bee Gees?

Quién siente qué la vida llegó a su final
y se confina en su cuarto
con su nueva amiga la depresión?
Quién llora al recordar
momentos que recién fueron de felicidad?

Quién escucha en la radio
canciones tristes de amor del Bee Gees?

Quién disimula la tristeza en su rostro
y cambia de conversación
diciendo; que lindo día el de hoy?
Quién disimula y esconde en su pecho
todo el dolor que le dejó el adiós de un amor?

Quién escucha en la radio
canciones tristes de amor del Bee Gees?

Quién se confinó y se encerró en su habitación,
llora por el vacío que le dejó un viejo amor?
Quién se asoma a la ventana
a ver parejas entregándose amor
y llora escuchando en la radio
canciones tristes de amor del Bee Gees?

Quién se lamenta con su nueva amiga la soledad
reprochándose que la culpa es de ella
por tanta soledad y ansiedad?

Quién escucha en la radio
canciones tristes de amor del Bee Gees?

Quién cree que la vida se le terminó
en plena juventud y llora su decepción
con enorme dolor en el corazón?

Quién se atreverá a decirle
que esto a todos ya nos pasó,
que debe salir de su encierro
y empezar de nuevo un nuevo amor,
pintar su sonrisa de carmín cereza
y salir a la calle en busca de una nueva ilusión?

Tal vez sea el Bee Gees
en la estrofa de una linda canción de amor
que escucha en la radio.
Tal vez sea la música que escucha en su encierro
la que le abra los ojos
y entienda que el amor es así
y que el verdadero amor
espera por ella en algún lugar.

Quién es esa chiquilla
que llora su primera decepción de amor
y trata de disimular su dolor
con una falsa sonrisa,
dolor que le desgarra el corazón?

Quién escucha en la radio
canciones tristes de amor del Bee Gees?