miércoles, 24 de abril de 2019

Whisky


Y me dijo. 

Esto es todo mi amor para ti, 
no me hagas reír, 
me has hecho sufrir.
Mejor sirve otro whisky. 

Y me dijo. 

Es todo lo que tiene mi corazón para ti, 
no me hagas reír, 
migajas de amor no busco para mí, 
me has hecho sufrir. 
Lo puedes creer amigo, ¡salud!

Le respondí con mucho dolor y amargura, 
te entregué de mi lo mejor, 
todo mi amor, 
ella suspiro hondo, 
la vi entristecer y estremecer, 
entonces comprendí 
que no todos podemos dar el amor 
de igual medida y sonreí. 
Dejé de sufrir. 

Sirve otro whisky 
que hoy me emborracho.

Sus migajas de amor para mí 
eran el equivalente a mi gran amor por ella 
y tarde lo vine a saber, 
después de la discusión y su desilusión 
la vi alejarse y salir de mi vida, 
¿puedes creerlo cantinero? 
Trae mejor otra botella de whisky.

Tal vez mi grande amor 
para otra solo sean migajas de amor 
y se habrá de reír y sufrirán 
cuando le diga es todo el amor que tengo para ti. 

Alguien vino antes que mí 
por una copa de whisky, 
¿has escuchado antes esta misma historia 
cantinero, mi amigo? 

Salud por tantas migajas de amor 
que incitan a beber un trago de whisky.



SergioRaga 24-04-19



lunes, 22 de abril de 2019

Autoestima


La discordia se hace presente en una tienda, donde el experto le ofrece a su cliente el producto que este busca y que según él, es el que le va a su estilo, el consumidor pide probar otro diseño, el experto le dice. 

_ Este no es el indicado para usted. 

El otro responde.

_ Pero este se me ve mejor. 
_ Por supuesto que no, este es el correcto. 

El comprador no se siente cómodo con lo que el experto le ofrece, pues él no se ve bien con ese producto, así que insiste en comprar lo que a él le gusta. El experto le insiste, que no es lo que a él le va y que le conviene comprar lo que él le sugiere, pues el producto que él le sugiere es incluso más barato. El cliente insiste y compra lo que a él le ha gustado y sale a la calle con su compra. 

El experto lo observa desde su vitrina decepcionado porque según su experiencia este se ve ridículo. 

El tipo ya en la calle camina con mucha confianza, con su autoestima en lo alto, y entonces, se da cuenta que todos lo ven, algo que antes nunca pasó; empieza a entrar en pánico pensando que el experto tenía razón, y este, que lo observa desde su tienda sonríe con satisfacción y se dice.

_ Pues claro, yo tenía razón, todos lo ven por ridículo, creo que regresará arrepentido por el cambio. 

El individuo que se siente chiquito y acomplejado da la vuelta para volver a la tienda por el cambio, pero al hacerlo se encuentra con una enorme vitrina y de nuevo se ve reflejado en ella, y lo que él ve, es a un tipo sacado de una revista, a una estrella de cine; su autoestima empieza de nuevo a subir y llega al top, alcanza la cumbre. 

El experto al ver su reacción no logra evitar un grito: ¡Coño que no es tu estilo, te ves ridículoooo! 

El grito es tan intenso que las aves que reposaban en los rascacielos vuelan asustados hacia el sol.

Mientras que el tipo con su autoestima por los cielos avanza muy seguro y todos lo ven. 
Se encuentra con una top model, que al pasar por su lado le dice: - ¡Adiós guapo! 

El experto no comprende que le a visto esa hermosísima mujer. 

Quizá el tipo se vea mal como lo dijo el experto; pero lo que lo ha hecho atractivo es su ahora alta autoestima, la seguridad que esta le ha dado, él se siente bien, como una estrella de rock, y camina con confianza y garbo.

El experto cerró su tienda y colocó un rótulo: "Cerrado por crisis emocional"; y es que, es esto lo que el experto no logra ver en él. 

La autoestima es el mejor producto de belleza y atracción que te puedes vestir.



SergioRaga 22-02-19