Un corazón triste y con un mal destino

Tengo un corazón triste
que alguien un día me lo robó, 
lo rompió, lo quebró, 
pero eso no me venció, 
nunca me derrotó
y buscando seguí con ilusión.

Me decían, que en el amor 
no había solución,
muchas veces ya antes me decepcioné
y creí, tenían la razón.

Pero no me detuve 
y seguí buscando en mi camino
un nuevo destino
que me hiciera un día 
encontrarte y conocerte.

Que llevara a mi lado
una nueva ilusión, 
un nuevo amor. 
Y entre las estrellas, 
escondido en una de ellas.

Te cruzaste en mi destino,
mi caminó iluminó 
y a mi corazón emocionó,
bajaste de ese cielo 
lleno de amores y desamores,
al verte bajar, sentí un poco de miedo, 
lo confieso.

Pensando que sería como antes,
pero por fin bajaste y te paraste frente mio,
sonreíste y tambien yo sonreí,
me dije; será este mi día de suerte.

Me respondiste; que no,
que la suerte era para él,
sonreímos y le dije;
será entonces un día de suerte para los dos.

Me dijo; si.
Solo si quieres olvidar a quien tu corazón
antes lo destrozó, lo rompió lo quebró
y mató toda ilusión.

No te sientas mal, 
pues a mi ya me pasó; 
y ahí me escondí para no sufrir más.

Pero que suerte, quererte tanto 
y que tu sientas lo mismo que yo.
Por ti deje mi escondite y baje de ese cielo
lleno amor y desamor.

Se me hizo conocerte,
pues ya creo quererte y la suerte es mía,
de saber que tú sientes lo mismo.

Ya no le temo a mi destino 
si lo vivo junto al tuyo...
¡Para siempre!