Bella.
Me fascinas cuando te diriges hacia el baño
caminando como gata, un orgasmo en cada paso.
Bella.
Me calientas, mucho más que el sol.
Una picara sonrisa, una ceja elevada, una
duda en tu entre ceja.
Concentrada, con una mirada perdida en la
ventana,
un humeante café dibujando tus
pensamientos,
te
juro que los veo.
Bella.
Adoro esos domingos, juntos hasta tarde en
la cama,
iniciando una guerra, batalla de almohadas,
para más tarde, firmar la paz con un beso.
Beso que nos conducen a caricias
para luego terminar amándonos.
Serpientes en celo, cuerpos entrelazados.
Bella.
Cuando llegaste ya no hubo un pasado,
no hubo un futuro, todo era un maravilloso
presente.
Me olvide de los amigos, esos que son
falsos.
Tú eres el mejor de los amigos.
Bella.
Ya no hubo otra amante, calmaste esa
picazón
de quitar cada viernes un nuevo calzón.
De beber un trago de cortesía, luego una
mentira,
para meter en mi cama y hacer un falso
amor.
Bella.
Firmamento sin luna, ni estrellas, mucho
menos fugases,
solo una oscuridad total, sin un principio, ni un final,
solo te necesito a ti, para alumbrar mi
vida.
Bella.
Descaradamente bella, nada tiene hermosura comparada con la tuya.
No hay obra de arte, ni pintura de Picasso, ni Miguel Angel y su Capilla Sixtina.
Ni escultura que disimule y des merite a tu figura.
No hay sonido ni melodía de amor, por ser
tú, mi único amor.
No hay arco-iris, le has robado sus colores
y los que no se logran ver.
No hay sensaciones que despierten mis
sentidos a la pasión.
Sin tu hermosa y tierna presencia un cuerpo
sin vida soy.
Bella.
Luces maravillosa adentro de esa mezclilla,
con zapatos de tacón,
me pregunto, cómo logras mantener la
verticalidad sobre esas zapatillas.
Cabellera despeinada que se entrega y se mese
al son del aire.
Camiseta que no logra contener a tu feminidad,
que no la doblega ni la fuerza de la gravedad.
Bella.
Eres la mitad que me hacía falta para ser
feliz.
No eres una media naranja, eres mi costilla,
esa que Dios usó, para que fueras mi compañera.
Bella.
Como disfruto verte subir las escaleras,
mirar arriba de esas perfectas pantorrillas.
Yo vi un poco más arriba y eso me gustó,
verdaderamente que me gusta,
ver esos glúteos cediéndole lugar al otro.
Bella.
Ese caminar, perfecto balance que no logro
comprender.
Te veo y no me canso de admirar
lo más bello que se puso en este lugar.
Bella.
Eres bella, eres hermosa, eres divina,
eres preciosa, eres magnifica, eres
realmente lo más bello,
eres perfecta armonía de colores, sabores y
olores,
de curvas y líneas artísticas, todo lo que
llaman bellas artes
se colocó en ti.
Bella.
Tus sonidos son suaves, perfectos y armoniosos,
como solemne concierto en el conservatorio.
Bella mujer, eres perfectamente bella,
tienes gracias,
me enamoras, por ti yo daría; no solo mi costilla,
daría
todo mi osamenta, cada músculo,
cada sentimiento. Hasta sería un zombi por ti,
pues sin ti mujer, la vida ya no tendría
sentido.
Bella.
Todo en este mundo se mueve por darte amor,
Bella mujer.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario