Sábanas, almohadas y sudor

Te veo en las nubes dibujado.
Escucho tu voz que me llega con el viento.
Un beso fresco con sabor a tu aliento.
Piel erizada como electrocutado.
Corazón que por momentos se detiene 
para después latir más fuerte.

Tal vez estoy entusiasmado 
con conseguir tu amor, 
con saborear tu sabor,
con confundir tu sudor,
con hacerte el amor.

Llevarte a un lugar privado 
donde solo pueden llegar 
dos enamorados,
donde solo pueden estar 
dos que se entregan en cuerpo y alma,
donde solo pueden permanecer 
dos que solo quieren amarse y devorarse.

Creo que pido mucho 
pues aun no te encuentro,
no sé si existes o aún no,
pero la ilusión permanece en mi corazón.

Y si aún no has llegado 
te inventaré o te pintaré,
pero de una manero u otra te hallaré 
para poder amarte y devorarte
dejarte destrozado, descansando 
para la segunda ronda de amor.

Corazón que por momentos se detiene 
para después latir más fuerte,
te inventaré o te pintaré,
porque de una u otra manera te hallaré
para poder al fin amarte y devorarte.

Para que me pidas piedad para seguir 
no confundir y oír que me detenga.
Creo que pido mucho
pero no he logrado saciar mi sed de amar.

Algo de mí 
me dice que te encontraré,
sino te inventaré o te dibujaré 
sobre mis sábanas que serán el lienzo 
junto a mis almohadas
y las acuarelas serán mis ganas y mi sudor.

El resplandor que veo sobre mi cama
se logra cuando la luna incide sobre ella, 
junto a mi imaginación 
te haremos esta noche el amor.

Quizá nunca sepas 
que esta noche fuiste mía,
que me pedías más y más,
que me rasgabas las ganas por la espalda,
deseabas ser amado y devorado 
y yo que no saciaba estas ganas.

Te disfruté de norte a sur, 
aunque solo fue mi imaginación,
pues al nacer el sol 
solo mi almohada, mis sábanas y mi sudor
me dijeron que contigo hice el amor.