Quise ser yo.

 

Quise ser yo, quien te haga feliz y ser especial.

 

Quise ser yo, quien te lleve a la luna y te haga bailar bajo una lluvia de estrellas.

Quise ser tu dueño, tu sueño, tu beso más deseado, un alerquin o un Rin Tin Tin que te ladre por la mañana.

Quise ser un reflejo en tu mirada, ser carmín que humecte tus labios y me dejen sabor a miel, uva, fresa, cereza o frambuesa sobre los míos cuando me besas.

Quise ser tu dueño, tu sueño húmedo entre sábanas y almohadas alborotadas como tu cabellera despeinada por la mañana.

Quise ser el cepillo con que peinas tu cabellera, el estropajo que le quite el sudor de tu piel, beber tu miel de cada poro de tu cuerpo desnudo.

Quise ser tu mundo, tu cielo, tu sol y la luna que se peina con su reflejo sobre el agua de la laguna. 

Pero no soy nada, no soy nadie, ni te conozco, te desconozco, no lo merezco, si yo quise ser todo eso, pero tarde me di cuenta que no soy nadie, que no tengo nada ni lo tendré por ser prohibido para ti.

No soy yo el que te va a disfrutar al momento de amarte, el que quiere compartir tu vida, penas y alegrías, tu despertar, cómo me habría gustado alejar de ti esa tristeza que tienes en tus ojos, me habría gustado estar junto a ti cuando sientas ganas de un hombre que te haga temblar a la hora de amar.

Me habría gustado ser tu dueño, pero soy dueño de nada, pobre mujer que creerá un día ser amada, morirá engañada, pues quien te pudo amar hasta desfallecer, ese soy yo.

SergioRaga

6/2/24