La devolución (mujeres maltratadas 9)

La vimos pasar muchas veces por nuestra calle con rumbo hacia abajo, mientras con mi amigo Fredy estábamos sentados donde un día crecería el Árbol de don Mario, era una mujer espectacular, alta, morena, delgada, con tremenda figura, lo extraño era que nos llamara la atención a dos que no superábamos los trece años, claro eran otros tiempos, no era posible dejar de ver a tremenda mujer. Con el paso del tiempo supimos que la hermosa chica pasaba por nuestra calle con rumbo a casa de los suegros, un tipo que vivía cuadras más abajo de la nuestra; la vimos tomada de la mano de su novio y a pesar de nuestra corta e inocente edad nos hacíamos la pregunta de cómo y por qué esa hermosura era novia de ese tipo al cual no le veíamos el atractivo por ningún lado. Un tipo alto, moreno, de bigote, de complexión normal, o sea uno más del montón, de muchos en el barrio, no así la chica, quien para hacer más difícil de creer ese noviazgo la joven mujer no vivía en nuestra colonia, ella llegó a estos lugares por un tío, quien a la vez era la figura paterna de la chica, este tío de la señorita en cuestión tenía unos negocios comerciales en mi colonia y por ello venía, para cuidar sus intereses y con seguridad en uno de esos viajes la chica lo acompañó y se dio el encuentro con este tipo y algo vio ella en él que le gustó y se ennoviaron, lo que él vio en la chica ni se diga, esto no es cuestionable. 

Pasó más tiempo y de pronto nos llegó la noticia de que se casarían, esto no dejó de molestarnos a mi amigo y a mí, cómo aquello era posible, la chica se veía con esa aura de mujer enamorada y la envidia de todos los que los conocíamos se hizo presente, con Fredy seguíamos indignados por se compromiso, pero en cuestiones del amor, no hay nada cuestionable, como he dicho; el peor coche se lleva la mejor mazorca y esta vez no era la excepción. Mi madre hacía comentarios con las vecinas del próximo compromiso matrimonial, aunque la reunión iba a ser en un lugar muy alejado de nuestras lugares sociales ya acostumbrados a pocos de mi colonia se les invitó; escuché decir después que ella se veía como una muñequita de porcelana, bella en su traje blanco, imagino, no es que lo escuchara, que el tipo se veía como lunar con pelos, pero bueno... La fiesta fue de ensueño, pues el comerciante quien era el padre adoptivo de su sobrina huérfana, echo la casa por la ventana, y como no hacerlo si era como si la primera de sus hijas se le casara, además la chica era muy querida, de un carácter que ya quisiéramos muchos en una mujer, no así el tipo, este a muchos nos caía mal y no por la suerte de tener a tremenda novia y ahora esposa.

La ceremonia y recepción concluyó para los novios, quienes el tiempo se detuvo para irse a su luna de miel, esta pagada por el tío de la novia a un lugar a donde solo iban los de dinero en aquellos dorados y lejanos tiempos, pero esa noche la pasarían en un prestigioso hotel de mi ciudad. 

Sentados en el mismo lugar donde dio inicio mi historia estábamos con mi amigo de toda una vida
extrañando no ver a la ahora señora del tipo de cuadras abajo, deseando un día se nos apareciera de nuevo la oportunidad de ver a otra como ella, algo que era imposible, cuando me dice Fredy.

_ Oíga, ¿no es ese el recién casado? Yo vi hacía donde veía Fredy.
_Yo creo que sí... Sí, es él. ¿Qué hará acá en plena luna de miel?
_Pues, no tengo la menor idea.

El tipo pasó con rumbo hacía su casa, se le veía descompuesto el rostro, nosotros nos quedamos intentando encontrar una respuesta, pues hacía a penas unos tres días de la boda del año para nuestra comunidad y este se paseaba por las calles de nuestra amada colonia y sin su flamante esposa. Allí estuvimos un buen rato sin saber la causa del por qué...

_Bueno, hablamos al rato. Dije a Fredy.

Y ambos cogimos hacia nuestras casas las cuales quedaban una al lado de la otra, entré en mi casa con la duda del por qué, el tipo no estaba con su mujer en su luna de miel.

_Mamá, fíjate que vimos al novio pasar para su casa, ¿no debería estar en su luna de miel aún?
_Muchacho metido, mejor busque que hacer, no se meta en lo que no le importa. Dijo mi madre molesta por mi pregunta.

Que raro que mi mamá se haya molestado por mi pregunta, aquí algo no anda mal y lo voy a averiguar, pensé.

Al poco tiempo de esto, yo todo un investigador privado en busca de respuestas, escuché una platica entre vecinas del barrio, lo que hablaban era algo delicado para aquellas fechas, yo no lograba comprender lo grave del suceso, pero si entendía perfectamente de lo que hablaban, lo que no lograba comprender era como a este tipo que se le apareció la "virgen" con tremenda mujer se ponía los moños, jamás en toda su existencia lograría de nuevo repetir tan grandiosa hazaña.

_Hola Sergio, ¿ya supo lo que sucedió con la boda del tipo? Dijo Fredy.

Yo me hice el que no sabía nada.

_No, ¿qué pasó?
_No ve que el tipo devolvió a la mañana siguiente a la mamacita por no haberla encontrada virgen.
_¿En serio? Dije asombrado, ya me las daba de actor por esa época.
_¿Usted que hubiera hecho? Dijo Fredy.
_Mmmmm, la verdad que no sé, pero tanta belleza podía ser disculpa de algo que no sabemos realmente cómo fue, ¿no cree? Además, y si quien estuvo con ella primero solo la engañó para disfrutar su cuerpo y la dejó, quien sabe por qué razón y ella se le entregó enamorada, pero en el fondo es una buena mujer, usted al igual que yo la vimos y siempre nos pareció una mujer ejemplar ¿o no?
_Bueno, eso sí, ¿pobre verdad?
_Y ¿usted qué habría hecho? Le regresé la pregunta.
_Yo pienso igual que usted. Dijo.

Jamás volvimos a ver a la linda chica por el barrio, según supe mucho tiempo después cuando mi mamá ya habló del tema sin pena ni gloria, el tío la envió a vivir a los USA, para evitar la vergüenza de la pobre, para no ser señalada como una cualquiera, por otras que tal vez si lo eran, pues muchas muchachas de aquella época se daban sus mañas para embaucar a más de uno, esas si eran lo que tal vez la chica deshonrada no lo fue.

Si esa historia hubiera sido hoy día, ellos estarían felices los dos, pero el machismo de aquella época, el cual aún hoy día persiste no le permitió permanecer al lado de tan espectacular mujer en todos los sentidos y esto lo dice un hombre ya hecho que por ese tiempo era un culicagado que empezaba a vivir.

Ah, con el paso del tiempo el tipejo, se casó con una mujer la cual la encontró como siempre su machista mentalidad le exigió y cundo lo vimos con su ahora mujer, no nos extrañó para nada, esta sí era su mancuerna, no digo que era una mujer de mal ver, tenía un bonito cuerpo, pero jamás como la que él devolvió. Hará un par de años que me los encontré, pues me alegra que aún estén juntos y al ver a su pareja de vida, a la cual, el tiempo ha sido ingrato con ella y con él también, me pregunto; qué seria de aquella espectacular joven mujer, cuyo único error fue haber entregado su virginidad a otro que tal vez solo la usó y la desechó, pero bueno, esto ya no lo sabré nunca, a propósito el tío de la chica falleció dos años después de aquella vergüenza familiar.


Con dedicatoria especial para tanta mujer que en el tiempo fueron usadas y desechadas por tanto machista mal llamados "hombres", para todas ellas es esta historia.
Que bueno que lograron salir avante e hicieron una vida al lado de un verdadero hombre que las valoró por lo que son, y no por un mal momento que tal vez no olvidaran nunca y que las marcó para siempre. 


Tomado del libro: "Historias de un Adolescente Tímido" por SergioRaga